Llevas las cuentas de mi corazon #PSF2017

Capitulo 25

''En el capitulo anterior''

Andrea: No, Samuel, no me parece.

Samuel: Por favor, si... acepta ir conmigo al viaje.

Andrea POV

El me suplicaba que fuera con el al viaje, y no me faltaban las ganas de ir con el, pero debía pensar en mi madre, a ella no le gustara que me vaya con Samuel, aunque sea un viaje de negocios, pero que estoy diciendo, a mama no le gusta nada de lo que hago después de que termine con Marcelo, y yo pensando en lo que ella quiere o no, úes ahora me toca pensar también en mi.

Samuel: ¿Qué me dices osita? Lo que más quisiera es que me acompañaras, pero si no quieres... -me interrumpe-.

Andrea: Mi osito, está bien, iré contigo al viaje.

Samuel: ¡Gracias mi amor! -dice contento y me abraza- te prometo que no te arrepentirás.

Andrea: No lo dudo, osito.

Lo beso una vez mas y volvemos a tomar asiento, terminamos de hacer el brindis, un brindis por nosotros, por nuestro amor, después de unos minutos nos fuimos al estacionamiento y el insistió en seguirme con su auto por seguridad, porque ya era demasiado tarde. Cuando llegamos el se fue enseguida y yo entre a casa, subí sin hacer mucho ruido hasta mi habitación, me desvestí, me di una ducha y luego me puse el pijama, cuando me acosté en la cama vi por última vez mi celular, allí estaba el mensaje de buenas noches que siempre me manda Samuel, y así pude dormir plácidamente.

Samuel POV

Después de acompañar a Andrea hasta su casa, llegue al rancho y subí a mi habitación, estaba muy feliz porque Andrea acepto ir al viaje conmigo, como todas las noches le mando un mensaje de buenas noches, me di un baño rápido y a la cama. Al día siguiente estaba desayunando con mis hermanos y les comentaba de mi viaje.

Arturo: Entonces, ¿cuándo te vas?

Samuel: Mañana en la tarde, para volver el domingo en la mañana.

Flavio: Samuel, ya invitaste a Andrea para que vaya contigo.

Samuel: Si la invite, pero para que me ayudara a negociar, sabes que es muy buena en eso.

Flavio: Si, entiendo, bueno hermanos ahí nos vemos -se levanta y se va-.

En el resto del desayuno estuve hablando con Arturo y dándole algunas indicaciones acerca del trabajo en el rancho, cuando vi la hora me levante casi que de inmediato, todavía no había colocado las flores en el escritorio de Andrea, y debe estar por llegar. Fui corriendo, busque las flores y la tarjeta... ¡todavía estaba en blanco! No puede ser, como no me di cuenta, acelere mas el paso, entre a la oficina de Andrea y me senté en el escritorio, le escribí un mensaje en la tarjeta y me dispuse a salir, pero cuando voy a abrir la puerta se abre de golpe.