Revenge // PAUSADA // EDITANDO

Capítulo 4.

-¿___________? ¿Enserio? ¿Nunca te has enamorado? - Maddy pregunta sacándome de mis propios pensamientos.

-No, jamás. Jamás estaré enamorada. Eso del amor no es para mi. - dije segura sin titubear

-¿Lo dices por qué alguna vez te lastimaron? - me mira extrañada - ¿Te han roto el corazón?

¿Romperme el corazón? Ni siquiera he tenido novio ni mi primer beso...

-Maddy... No he salido con alguien, jamás... - dije alargando las palabras metida en mis pensamientos.  En mis 18 años de vida jamás he besado a nadie... ¡Whooa! Eso si que no me lo había planteado nunca.... - Ni siquiera he tenido mi primer beso... nada... - dije algo consternada. Nunca me había importado eso pero ahora es... ¿cómo decirlo? ¿diferente? Soy practicamente mayor de edad y no me he enamorado ni tenido mi primer beso. Muchas chicas a esta edad ya esta madres son y la sociedad las acepta, pero hmmm... ¡BASTA! ¿En qué estas pensando? ¿Amor? ¡Eso no importa ahora! ¡Lo que impora es tu venganza! Me grita mi subconsciente.

-Creo que necesitas una cita - dice Maddy maliciosamente - Mi hermano es de tu edad y se llev... - la interrumpo

-¡NO! - grito eufórica - ¡No tendré una cita con tu hermano, ni con nadie! 

Maddy da un paso hacia atrás instintivamente cuando me levanto de golpe, frunciendo el ceño con los puños cerrados, pero al intentar pararme recuerdo que no puedo caminar y me dejo caer pesadamente en la cama. Me tapo la cara con las manos.

-Lo siento, no quería ponerme así. C-creo que exageré un poco - digo reincorporándome en la cama nuevamente - solamente quiero atrapar a los que me hicieron esto - señalo mis piernas - y a los que mataron a mis padres, s-solo eso - digo empezando a sollozar.

-No, no llores __________ - me dice Maddy acercándose a la cama y abrazándome - creo que necesitas descansar solo un poco, estas tensa y necesitas pensa muy bien eso de vengarte, no es bueno y ademas la policia ya se esta encargando de eso.

-Pues no lo hace bien - digo sollozando aún más con un toque de rabia - si fueran tan buenos como ellos dicen ser ya los hubieran atrapado y encarcelado pero no... no lo han hecho - digo, limpiando con furia las lágrimas de mis mejillas, susurrando la última oración.

-Descansa un poco - me dice Maddy y da por terminada la conversación dirigiéndose a la puerta de la habitación - Te traeré algo de comer - dice antes de cerrar despacio la puerta.

Maldita sea... Suspiro. Creo que Maddy tiene razón debo descansar un poco. Pero la venganza sigue en pie, no me detendré hasta encontrar a los culpables aunque muera en el intento así lo haré...

*****

Siento como me mueven un poco y susurran mi nombre. Abro los ojos lentamente y bostezo. Depsués visualizo a Maddy con un doctor que jamás había visto antes.

-¿________? - dice el doctor cuyo nombre desconozco

-Si soy yo, ¿qué pasa? - digo adormilada

-_________ él es Christian - dice Maddy con una sonrisa que luego borra inmediatamente cuando él la voltea a ver - D-digo él es el Doctor Davenport - dice mirando sus manos

-Oh - digo con sorpresa. Con que él es Christian. ¡Qué buen gusto tienes Maddy! Alto, fornido y unos ojos aceitunados al igual que los de Maddy que apuesto que a ella la hace suspirar TODO el día. - Mucho gusto - digo estirando mi mano para poder estrecharla con él y el cotor hace los mismo. Nos saludamos con una sonrisa en el rostro.

-Yo seré quién te apoye con tus ejercicios para que puedas volver a caminar - dice con una amplia sonrisa - ¡Ah, claro! Se me olvidaba - se voltea y se dirige a Maddy, ella abre los ojos con sorpresa y se sonroja ligeramente- Tu y yo, desde ahora trabajaremos juntos con la señorita Stevens.

¡Ja! Maddy y Christian canto una ridícula tonadita en mi cabeza mientras les sonrio a los dos. ¡Que bien se ven juntos! ¿Cómo es posible que prefiera a la peliroja y fea enfermera de ayer? Ugh. Recuerdo su cara con plastas de maquillaje y sus pechos, obviamente operados, saliendo del escote de su uniforme. Eww. Me dan arcadas solo de recordarla.

-¿E-esta seguro q-que me q-quiere trabajando c-con usted?- dice Maddy demasiado nerviosa. No se nada del amor pero ¡Por el amor de Dios! ¡No seas tan obvia Madeleine!

-Por supuesto Madeleine - le dice muy formal - Eres una de las mejoes enfermeras de por aquí, además eres la única que no me pidió mi número telefónico cuando me vió entrar por primera vez al hospital - dice y se rien escandalosamente olvidandome por completo así que aclaro mi garganta y los dos regresan a la seriedad al mismo tiempo.

-Lo siento _______ - dice Maddy - un chiste local que tenemos aquí en el hospital - dice mirando a Christian con una tierna sonrisa.

-Ah, claro - digo tratando de mantenerme seria pero estos dos simplemente se ven tan bien juntos pero me da risa lo pequeña que es Maddy en cmpraración a Christian.

-Empezaremos pasado mañana con el entrenamiento - me dice Christian - ejercicios básicos, no te preocupes serán sesiones de 2 horas. - dice con una sonrisa

-Hoy mismo sales del hospital - me dice Maddy con efusividad - Te llevaré a tu casa y...- Christian la interrumpe

-De hecho Madeleine, te quedarás con ella - dice con autoridad

-¿Conmigo en mi casa? ¿Cómo una enfermera a domicilio? - digo algo sorprendida. No es que no quiera que Maddy este conmigo de hecho me agrada su compañia y nos hemos hecho muy amigas pero puedo cuidarme sola, que este en una silla de ruedas no significa que no pueda cuidar de mi misma.

-¿Tiene algún problema con eso señorita Stevens? - me pregunta Christian - ¿Quiere que le asignemos otra enfermera? - pregunta algo sorprendido igual que yo, creo que todo el mundo aquí se ha dado cuenta de que tan íntimas nos hemos vuelto Maddy y yo.

-No, para nada, es solo que no esperaba que me asignaran una enfermera a domicilio, puedo cuidarme sola, se lo aseguro- dije tratando de ser convincente

-Estás en silla de ruedas, no puedes andar por allí sola sin ayuda - Maddy dice algo enojada - Necesitas ayuda, pero si no quieres la mía no hay problema, Amanda Jennings puede suplirme - dijo Maddy con uno reprochante.

-¿Amanda Jennings? ¿Quién es ella? - dije extrañada por el tono de voz que Maddy había usado conmigo

-Mi novia - dijo Christian y en eso miramos hacia la puerta (los tres al mismo tiempo)

-Si, esa soy yo - dijo la pelirroja acercandose con paso decidido a Christian besándolo efusivamente, él sorprendido por la actitud de la pelirroja 

-Eww, que asco - dije sin siquiera pensarlo

Amanda volteó y me dedicó una mirada asesina mientras que Maddy solamente estaba parada ahí cruzada de brazos furiosa mirando a cualquier parte menos a nosotros.