Looking Up For You [Raura] (editando)

~Capitulo Veintinueve~ "Compañías"

"Compañías"

—Vuelve pronto— le dije mientras estábamos en el marco de la puerta de la casa, despidiéndonos.

—Pronto lo haré, ya veras. Lo haré lo mas rápido que pueda.

—Te voy a extrañar— dije como niña chiquita.

—Y yo igual y no sabes cuanto— me dijo al oído.

—Te amo.

—Te amo más— me dijo sonriendo.

Vaya que extrañare a Ross en estos días que estaré sin él.

—Adiós.

Apenas dije eso y él se aparto de la puerta, subió al carro y arranco. Se perdió al final de la calle. Entré en la casa.

—Niña no se preocupe, él regresara pronto— me dijo tomando mis manos.

—No lo sé Anna, tengo un mal presentimiento— me lleve la mano al pecho y la mire con angustia.

—Cálmese, si esta nerviosa los días se le pasaran mas lentos, piense en que todo estará bien.

—Okey, lo intentare.

Me metí con ella en la cocina, le ayude con los platos, y a limpiar las repisas, estaba aburrida, no tenia mucho que hacer. Después de eso salí un rato al patio trasero, y me senté enfrente del estanque, comencé a tirar pequeñas rocas adentro. Me puse a tararear una canción, mas era solo una melodía con palabras al azar.

Has tenido un sentimiento como si no creyeras lo que has visto.
Dando vueltas, en cámara lenta.
El corazón palpita el tiempo se congela.
No cierres tus ojos, que todo alrededor tuyo todos tus sueños se vuelven realidad.
No te sorprendas, sabes que tu vas a brillar.
Eres una estrella que aparece entre la noche.
Eres lo mejor que en la oscuridad apareció y brillas como un diamante en el cielo.
Tú serás todo lo que quieras ser en tu corazón y todo estará bien.
Es tu historia nunca contada, las hadas mágicas como un nuevo comienzo, como una vela que brilla y la vista que te estuviste perdiendo. Ve y vuela eres libre el mundo te ayudara a encontrarte a ti. [Parte de la Canción Shine interpretada por Laura Marano]

—¿Esta mejor niña?— dijo Anna detrás de mi.

—Eso creo.

—He visto que usted a estado algo... enferma, ¿esta usted bien?

—Si Anna, aunque por las mañanas he estado un tanto mareada cuando me levanto pero no ha de ser gran cosa.

—Quien sabe niña, tal vez y este esperando— dijo y me ofreció un vaso de agua.

—¡Ay! ¡Anna! Y ¿eso como puede ser?

—Pues, milagros pasan.

—Ay Anna— dije sonriendo al cielo —¿Sabes? En cierta forma me emociona esa idea, pero no creo estar embarazada.

—Niña estará aquí sola una semana, ¿que tiene planeado hacer?

—No estaré sola, ustedes están aquí.

—Pero sin su esposo...— comenzó a decir pero la interrumpí.

—Cierto, no lo sé, a ver que se me ocurre— dije levantándome del suelo.

Los días pasaban, las nauseas se hacían frecuentes, pero siempre pensaba lo mismo, ya no vomitaba, solo eran mareos.
Justo antes de salir de la casa el correo llego, tome el sobre enorme amarillo y lo eche en mi maleta, después vería que era.