"Narcissistic"

CAPITULO 4...

  Capítulo No4:

Una de las cosas en común entre Finnick y yo era nuestra incalculable competitividad, por obvios motivos esto no era nada bueno.
- ¿Y vendrás al juego esta noche? – Me preguntó mientras nos dirigíamos a la salida del instituto. ()
- Claro tengo que venir a apoyar a... - ¡Rayos! Ya no tenía a nadie a quien apoyar.
- ¿Decías...? – Preguntó conteniendo la risa.
- A nadie – Respondí resignada -...Por ahora – Completé.
- Así que no vendrás... - Soltó una pequeña risa.
- Nunca dije eso, puede que se ponga divertido – Mordí mi labio inferior con malicia.
- ¿Sabes? Tu definición de "divertido" no es muy agradable para mi gusto -
- Ay Finnick, es que estoy hablando con un amargado – Le dije haciéndolo reír – Deberías conseguirte una novia, cariño – Le dije abrazándolo y soltando una carcajada.
- ¿Una novia? – Volteó a verme – Eso no sería problema si no me las espantaras -
- ¿Espantarlas? – Pregunté inocente.
- Si, tu y tus estúpidas "pruebas" – Rodó los ojos – Que yo más bien creo que son celos -

 - ¡No! – Alargué riendo – No son pruebas, solo son algunas preguntas-

- Si, claro – Dijo sarcástico - ¿Por qué mejor no haces un casting? Las entrevistarías a todas y yo me quedaría con la que elijas – Dijo seguro pero obviamente el sarcasmo seguía.
- Sabes... No sería una mala idea -
- ¡Oh, por favor! – Me interrumpió.
- Es solo una broma, Finnick – Le sonreí haciéndolo soltar una carcajada - ¿Y quién está entre tus planes? – Le pregunté mientras nos sentábamos en unas de las bancas del campus, solo volteó a verme y negó con la cabeza – Vamos pequeño amigo... puedes compartirlo conmigo... -
- No te lo diré – Sonrió cómplice.
- ¿Esto quiere decir que si hay alguien? – Subí rápidamente mis cejas.
- No pierdas tu tiempo -

- Oh Finnick, vamos, puedes decirme – De verdad quería saber quién era la que había atraído la atención de mi amigo – Te prometo que no me entrometeré – Lo miraba suplicante y él solo reía – A no ser que se trate de Glimmer o una de sus clones, sería de la única forma en la que si me entrometería -

 Los "clones" de Glimmer son dos chicas que la siguen a todas partes, la verdad es que no se sus nombres, dudo que alguien los sepa pero eso no importa en lo más mínimo. Las llamo "clones" por su notoria ausencia de personalidad y la gran capacidad de adaptación hacia Glimmer. Si ella viene de rosa, ellas vienen de un rosa oscuro, si ella viene de celeste, sus clones de azul marino. Patético.

- No te preocupes, jamás saldría con ellas – Afirmó – Pero de todos modos no te diré quién es -
- Bueno, no me digas, no me importa – Me puse de pie y tomé mi cartera para comenzar a caminar hacia mi auto.
- No te enojes – Dijo mientras se abrazaba de mi cintura evitando que caminara.
- No estoy enojada – En realidad no lo estaba, era imposible enojarme con él.
- Oh, sí lo estás – Me abrazó un poco mejor y acomodó su cabeza en mi hombro – Eres una celosa – Rió en mi oído.
- Si, puede ser pero tu eres un tonto – Lo empujé.
- Hey, escucha... - Me dijo mientras con su dedo índice señalaba su oído.
Se escuchaba un fuerte motor, gire mi mirada hacia donde provenía el fuerte sonido.
- Así que no solo es el atuendo, en realidad conduce una motocicleta – Sonreí satisfactoriamente - ¿Cuál es su nombre? -

  - Peeta Mellark – Respondió.

- Lindo nombre – En cuestión de segundos pasó a alta velocidad frente a nosotros.
- Pierdes tu tiempo – Canturreó Finnick en mi oído.
- Ya lo veremos – Canté igual mientras abría la puerta de mi auto.
Una vez dentro de este, Finnick la cerró y esperó a que bajara el vidrio.
- La conocerás esta noche – Se acercó y besó mi mejilla.
- ¿Qué? – Pregunté sorprendida.
- Esta noche la conocerás – Repitió.
- ¿Cómo? ¿Irá al partido? – Era más que obvio pero mi estupefacción evitaba mi buen razonamiento.
- Si... - Se dio media vuelta sin dejar de caminar – Conmigo... -
- Date por muerto Odair! – Le grité – Vas a tener una cita y no me dijiste nada! -
Él volteó y como siempre, solo gritó "Te amo". Encendí el auto, aún incrédula. Se suponía que los mejores amigos se cuentan todo, él sabe todo de mí y él ni siquiera me había dicho que saldría con alguien.
- Idiota ¿Cree que todo se soluciona con un "Te amo"? – Dije molesta mientras conducía hacia mi casa.

Una vez en esta, subí a mi habitación y me recosté en la cama, no tuve razonamiento del tiempo solo se que volví a mí en el momento en que mi celular comenzó a vibrar. Miré la pantalla. Finnick.
- ¿Qué quieres? – Atendí

  - Hey – Alargó – ¿Así es como tratas a tu mejor amigo? -

- ¿Mejor amigo? – Pregunté y el rió – Si, claro – Agregué con sarcasmo – Ahora puedes entender por qué no tengo amigas -
- Amor, no seas dramática – Volvió a reír.
- No soy dramática – Le contesté seria, no estaba molesta pero lo que decía era verdad – Yo confío ciegamente en ti y ni siquiera me quieres contar que vas a salir con alguien -
- ¡Si te lo dije! ...Algo tarde pero te lo dije -
- Púdrete Finnick – Colgué.
Me puse de pie y dejé caer el celular para que rebotara sobre el acolchado de mi cama, caminé hacia el baño y abrí la ducha. Eran las seis de la tarde, seguramente no iría al partido, no iba a ir de tercera en cuestión con Finnick y su "noviecita" y no podía llamar a nadie más ya que mi nuevo objetivo es Peeta Mellark.
Regresé a mi habitación para esperar que la temperatura del agua se templara, me recosté al lado de mi celular y en ese momento recibí un mensaje: "Te llamaré, si me cuelgas... iré a tu casa".
Dicho y hecho, Finnick llamó al cabo de unos minutos.
- No fastidies – Le dije seria.
- No te conté por lo mismo, si no es de tu gusto, simplemente la repelas. No quiero eso, a mí realmente me importa y no quiero que nada lo interrumpa – Hablaba tan serio como yo.
- Entonces te pido perdón por preocuparme por ti y alejar a las estúpidas que solo te lastimarían – Contesté herida.

  En realidad yo solo había espantado a dos y había fuertes motivos para hacerlo.

- Y despreocúpate – Seguí – Que no me meteré más en tu vida – Colgué...

  •Queen_corse•