Capitulo 58 - Adiós.

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Llevaron a la pequeña zorrita blanca dentro de la casa, y Sasuke aplicó un jutsu de curación para curar su colita herida. Todos estaban alrededor de la mesa donde estaba el animalito.

Kurama: (¬¬) "A mí no me hacían tanto caso"

Himeko: ¿Estás bien?

Zorrita: Kyu, kyu.

Dijo alegremente la pequeña mientras lamía cariñosamente el rostro de Himeko.

Himeko: Jeje, me haces cosquillas.

Minato: Es un animalito muy agradable.

Kurama: "Solo os hace la pelota" (¬¬)

La zorrita se dio cuenta que había un gran zorro naranja al lado de la chimenea y decidió ir a saludarlo. Dio un salto bajando de la mesa en la que se encontraba y fue a la chimenea, se puso moviendo la cola enfrente de Kurama.

Zorrita: Kyu kyu.

Kyubi la ignoró y miró para otro lado, cerrando los ojos, pero algo le sorprendió, aquella pequeña insolente estaba mordiendo su oreja.

Kurama: Deja de morder mi oreja.

La pequeña intentaba jugar con él, sin obtener ningún éxito. Kyubi se arto de tener que soportarla, así que se encerró en el interior de Naruto.

Naruto: "Kurama, ¿Qué te pasa?"

Kurama: No voy a soportar a esa zorra, prefiero estar aquí.

Naruto: Parece que a Kurama no le ha gustado el nuevo animalito.

Ryuta: Kyu-chan, (lloriquear) No te vayas.

Toshiki: Kurama.

Naruto: Dejarlo un ratito solo, seguro que luego saldrá.

Sasuke: Himeko ¿Has pensado un nombre para la zorrita?

Himeko: No.

Taigaken: ¿Piensa como la quieres llamar?

Himeko: Mmmm.

La pequeña miró fijamente a la zorrita.

Himeko: No le puedo poner nombre.

Mikoto: ¿Por qué?

Himeko: Porque ella ya tiene un nombre.

Sasuke: ¿Y cuál es princesita?

Himeko: Yukiko.

Soun: Tiene sentido.

Paso el tiempo muy rápido jugando con la zorrita, al día siguiente era 31 de Diciembre, era fin año. Decoraron un poco la casa, y Mikoto, Kushina y Sasuke prepararon grandes platos de exquisita comida. Era de noche y pronto empezaría un nuevo año, el XX26.

Todos: 5... 4... 3... 2... 1... ¡¡¡Feliz año nuevo!!!

Sasuke: Feliz cumpleaños Taigaken.

Naruto: Felicidades hijo.

Toshiki: Felicidades oni-chan.

Ryuta abrazó fuertemente a su hermano y Himeko y Taisei se unieron.

Ryuta: Felicidades Taigaken oni-chan.

Himeko: Felicidades.

Taisei: Felicidades.

Soun: Felicidades oni-chan, ya eres un año más viejo.

Sus abuelos también felicitaron al pequeño, ya era todo un hombrecito tenía 8 años, justo cuando Sasuke, Naruto y Sakura empezaron sus aventuras.

Sasuke: Hijo te quiero dar algo.

Naruto: Cierra los ojos Taigaken.

Taigaken obedeció y cerró los ojos permaneciendo quieto.

Sasuke: Ya los puedes abrir.

Le habían regalado una preciosa cadena de acero con el símbolo Uchiha en ella hecho de plata.

Sasuke: Recuerda que tu eres el primogénito del clan Uchiha, y estoy muy orgulloso de ti.

Dijo Sasuke poniéndose de rodillas, a la altura de su hijo, y con una mano en la cabeza del pequeño. Taigaken se tiró a su padre, abrazándolo fuertemente, luego abrazó a su papi.

Taigaken: Gracias por luchar tanto por tenerme papi, a ti también gracias Kurama, sin ti no estaría en este mundo.

Kurama: Eres un buen mocoso.

Kushina: Se que hemos comido mucho, pero hay que hacer un hueco para el pastel de este niño.

Mikoto: Tienes que soplar las velas.

Taigaken: (sonriente) Sí.

Taisei: ¡Pastel!

Ryuta: ¡Yo quiero!

Minato les revolvió el pelo.

Minato: ¡Par de golosos!

Kushina: Venir, sentaos a la mesa.

Mikoto sacó de la cocina una gran tarta, con un tomate dibujado en la parte superior.

Minato: ¿Por qué un tomate?

Mikoto: Porque a Sasuke siempre le han gustado los tomates, y Taigaken tiene el mismo hábito.

Naruto: Es verdad, en casa no pueden faltar tomates.

Taigaken: Es que están muy ricos.

Soun: Verdad.

Sasuke: Son muy sanos. (¬¬)

Naruto: Jeje, cuanto os quiero. Venga chibi, sopla las velas y pide un deseo.

Taigaken: "Quiero tener más hermanitas"

Taigaken soplo las velas, (aunque casi las podría volver a encender con el Katon), y todos aplaudieron.

Taisei: ¿Qué has pedido oni-chan?

Taigaken: No se puede decir porque si no, no se cumple.

Himeko: ¿Crees que se hará realidad?

Taigaken: Seguramente dentro de un tiempo si lo hará. "Adoro a mis inocentes hermanitos"

Ryuta: ¡Taigaken oni-chan reparte tu el pastel!

Se comieron prácticamente entero aquel gran pastel, ya era muy tarde y era hora de que todos los pequeños estuvieran en sus camitas. Al día siguiente los pequeños no encontraron a sus abuelos durmiendo junto a ellos, les pareció normal ya que se levantaban antes que ellos, pero no estaban por ninguna parte, buscaron por toda la casa y por los alrededores del bosque y no había rastro de ellos. Su padre les dijo que los había revivido, pero que no podían estar siempre con ellos y tuvieron que volver, las lágrimas brotaron de todos los niños, excepto de Taigaken, que tenía que ser fuerte.

Soun: (llorar) Yo quiero que el viejo vuelva, quiero a mi abuelo Fugaku.

Himeko: (llorar) Quiero que las abuelitas vuelvan.

Toshiki: (llorar) Quiero a mi abuelo Minato.

Ryuta: (llorar) No quiero que se vayan.

Taisei: (llorar) Abuelitos, tío.

Taigaken: ¿Van a volver?

Sasuke: Sí, otra vez los reviviré, no lloréis.

Los niños lloraban desconsoladamente en brazos de sus padres, que se les desgarraba el corazón al oír su llanto y ver su inmensa tristeza.

Naruto: Pensar esto, cuando los volváis a ver les podréis contar un montón de cosas y demostrar todo lo que habéis crecido.

Eso consoló un poco a los niños, pero en ese momento solo querían llorar en brazos de sus padres, por la ida de sus abuelos y su tío.

El comienzo y el final (yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora