El comienzo y el final (yaoi)

Capitulo 83 - Un lindo pollito llamado Deidara.

Deidara estaba acurrucado en los brazos de Itachi, y sus ojos se empezaban a abrir lentamente, viendo aquel pelinegro, que le daba un beso en la frente, de manera cariñosa.

Itachi: Buenos días.

Deidara: (adormilado) ¿Nos quedamos dormidos en el salón?

Entra por la puerta corriendo Tobi, abrazando a Deidara.

Tobi: ¡Por fin despiertas Deidara-sempai!

Deidara: ¡Déjame Tobi!

Los demás empezaron a entrar por la puerta.

Pain: Deidara, estas desnudo.

Lo único que lo tapaba era la manta de ayer, que solo le estaba cubriendo su parte viril. Al darse cuenta jaló la manta, tapándose, y yendo a otra habitación para ponerse algo de ropa.

Kisame: ¿Qué tal estuvo ayer?

Itachi: (sonrisa Uchiha) Solo te digo que ese pollito sabe como excitar a alguien. (Gotita) No empieces Orochimaru.

Orochimaru: No hecho nada.

Itachi: Tienes la cara de –quiero violarlo-, además si lo haces yo mismo te matare.

Sasori: (-.-) Otra vez no lo hagáis en un sitio común.

Itachi: Pero quería dejaros descansar por una vez.

Kisame: Se lo dirás a tu hermano.

Itachi: Claro, seguramente me felicitara y dirá que he elegido bien.

Pain: Los hermanos Uchiha enamorados de dos rubios de ojos azules.

Kisame: Tenéis los mismos gustos.

Kakuzu: No me gastare el dinero en comprar otro sofá.

Itachi: Sabes que seguramente mi ototo y Naruto lo hayan hecho aquí algunas veces.

Hidan: No es algo gracioso de pensar.

Mientras tanto en el edificio de reuniones los pequeños Uchiha querían mostrar de verdad todas sus habilidades. Esta vez decidieron comenzar de menor a mayor, a si que el primero era el pequeño ángel negro.

Naruto: Es necesario que el pequeño la haga, solo tiene 2 meses.

Mizukage: Lo siento Naruto, pero es el más desarrollado de todos.

Sasuke: ¿Qué prueba tiene que hacer?

Raikage: Ha podido esquivar e ir tranquilamente por un campo de batalla de diferentes elementos, creo que lo más adecuado ahora es probar con kunais.

Naruto: ¡Es solo un bebe!

Decía abrazando fuertemente a su hijo, que preocupado también le correspondía.

Tsuchikage: Yo también lo veo un poco excesivo.

Hana: Tsuyoshi podrá hacerlo, un kunai le dará, pero no será grave, gracias a ello podrá despertar su fuerza interior.

Sasuke: ¿Qué quieres decir?

Hana: No se papa, es algo que sé que va a pasar, Kami-sama me lo dijo.

Taigaken: Yo sé que podrá hacerlo.

Sasuke: Lo tiene que hacer Naruto.

Naruto miró a su pequeño de cabello oscuro y ojos rojos.

Naruto: Puedes entenderme.

Tsuyoshi: (asiente)

Naruto: Tienes que hacer algo muy peligroso, pero si tienes miedo puedes venir con papi ¿vale?

Tsuyoshi: (asiente).

Pequeñas gotas caían de los ojos de Naruto, pero la pequeña manita de aquel angelito oscuro las aparto.

Tsuyoshi: (Con voz triste) Papi.

Naruto: Me alegra poder escuchar tu dulce voz por primera vez, mi pequeño.

El pequeño voló hasta más de en medio de la gran estancia. Esta antes había sido un campo de entrenamiento, y venía perfecta para saber lo que los pequeños podían llegar a hacer. De la pared empezaron a salir algunos kunais, el pequeño de forma ágil y elegante los esquivaba, incluso tenía los ojos cerrados.

Podía sentir los kunais por la forma en que partían el viento. Cada vez salían más kunais atacándolo, se le empezaba hacer algo tedioso, ya que eran una gran cantidad, pero acepto hacer el reto. Quinientos kunais eran lanzados por minuto, con una media de ocho por segundo. Tal como Hana dijo, uno logró alcanzar una de sus negras alas.

El pequeño se quitó como pudo el kunai, y sin parar de volar, en sus ojos rojos, ahora se podía ver el Sharingan, sus movimientos fueron más rápidos, consiguiendo esquivar todos los kunai. La pared dejó de lanzar kunais y el pequeño fue volando rápidamente a los brazos de su papi.

Naruto lo abrazó con fuerza, atesorándolo enormemente. Lamió la herida en el ala de su pequeño, que ya estaba prácticamente curada.

Tsuyoshi: Papi.

Naruto: Gracias al cielo que estas bien mi pequeño ángel oscuro.

Ahora le tocaba a Hana, que hacía tan solo unos meses que aprendió a andar, la pequeña solo tenía un año.

Sasuke: Hana te toca.

Hana: No te preocupes papi, lo haré bien (sonrisa).

A la pequeña le pusieron plantas carnívoras que estaban medio muertas. Hana las tocó haciendo que estas revivieran en tan solo unos instantes. Lo normal es que las plantas la atacaran intentando comérsela, pero en cambió la mimaban y jugaban con ella.

Hana: ¡Adiós plantitas!

Sasuke: Lo has hecho muy bien mi pequeña natura.

Era el turno de Aiko, de tres años.

Taigaken: Tu puedes dragoncita.

Aiko: ¡Oni-chan!

La pelirroja fue al centro del lugar, de la nada empezaron a salir un montón de llamas, intentando quemarla, Naruto y Sasuke tenían el corazón en un puño con cada prueba, que sus pequeños hacían. La pequeña Aiko salió de entre las llamas tranquilamente.

Aiko: ¿No es un poco tonto intentar quemar al mismo fuego?

Empezaron a salir kunais, pero la pequeña los esquivaba haciendo volteretas en el aire o alguna pirueta. Para ella todo eso era un juego en el qué podía ganar con un poco de esfuerzo, todo aquello le resultaba realmente divertido. Todo paró de repente.

Aiko: (sonrisa) Jeje, fue divertido.

Taisei, el pequeño rubio de ojos azules y marquitas en las mejillas, era igualito a su papi, el pequeño ya tenía 6 años. Como este dominaba el elemento del agua lo encerraron en un tanque de está. El pequeño no sabía que hacer para salir de ahí y estaba inquieto.

Taisei: "Tranquilízate, no te pasara nada, estás dentro del agua. Queridas gotas que fluis a mi alrededor, soy uno con vosotras"

El pequeño consiguió romper el tanque de cristal, gracias a su control sobre el agua, todos los cristales se esparcieron alrededor.

Taisei: No podéis matar a un pez en su propio elemento.

Le tocaba a la princesa, está actualmente también tenía 6 años, al igual que su hermano pequeño. Himeko era la más lista de la familia, y la que pensaba y nunca mejor dicho, con la cabeza fría.

Las pruebas siguieron poco a poco, pudiendo demostrar lo fuertes que podían llegar a ser. A Himeko la intentaron congelar, pero ella congeló el lugar. Soun demostró sus habilidades con la espada y como podía llegar a dar miedo. Los mellizos demostraron sus habilidades animales, sus grandes sentidos, Toshiki consiguió demostrar su gran velocidad, y Ryuta su gran instinto y dominación de grandes bestias. Taigaken que tenía 13 años, peleo a la vez con Kai de 16, y Hiroto de 15, ganándolos de manera sencilla, tenía un gran poder de lucha.