Capítulo 18

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Austin esbozó una sonrisa burlona, y puso las manos en señal de rendición...

-Esta bien hermanito, ganaste... solo esta vez. - Dijo mientras se retiraba del lugar.

Amelia no sabía si voltear a enfrentarlo o no...Optó por seguir caminando

-Espera - dijo él.

- ¿Si? - Preguntó ella volteando a verlo. Sus ojos lo escanearon rápidamente, llevaba solo un pantalón de pijamas, tenía su pecho totalmente desnudo... sus palabras se encogieron en su estómago.

- ¿Qué hacías despierta a esta hora?

-Tenía sed - dijo sosteniendo la vista con él.

Drew la observó con el ceño fruncido.

- ¿Te sientes bien aquí? - Le preguntó interesado.

-Si te digo que no ¿Me dejarías regresar a casa?

-No.

-Entonces no tengo que esforzarme en hacerte creer algo. No aquí no estoy bien, y lo sabes.

Drew enfocó sus ojos marrones hacia ella, ¿Por qué mierda se mostraba tan rebelde? ¿Qué acaso él no se podía preocupar?

Hubo un minuto de silencio, Amelia observó su taza de leche, la cual empezaba a enfriarse

-será mejor que me vaya. Hasta mañana Señor. -dijo resaltando la última palabra con sarcasmo. Sin esperar confirmación, empezó a caminar, fue consciente de que él venía detrás de ella.

- ¿Cuál es tu habitación? -Le preguntó.

Ella no respondió, simplemente abrió una puerta, y se detuvo en el umbral, Drew sonrió y entró, tomándola de la mano y cerrando la puerta detrás de él. De repente se escucharon unos gritos, al parecer eran gemidos, no, ¡Erran gritos y gemidos! Miró a los lados, quería saber de donde provenían, ¿Y si era cierto que violaban a las chicas en la noche? -AUSTIN -gritó una chica.

Drew frunció el ceño, ante los gemidos, El imbécil de su hermano ¿No podía ser más discreto? Vio a Amelia poner cara de pánico, él sin pensarlo se acercó a ella y la abrazó...

- ¿Qué es eso Drew? ¿Él la está violando?

Drew sonrió quedadamente.

- No, es solo sexo, sexo ruidoso.

Amelia se despegó de él ¿Qué mierda estaba haciendo? Estaba preocupada porque hubiera un violador, y hace unas horas este tipo le había hecho lo mismo, sintió sus mejillas arder, no podría con esto.

-No, suéltame, tú eres igual a él, son violadores, se aprovechan de chicas pobres -no pudo terminar la frase, se tapó el rostro con ambas manos y empezó a llorar.

Drew estaba asombrado, no reconocía este nuevo giro, ni siquiera podía controlar lo que sentía, sintió unas desesperadas ganas de abrazarla y hacerla sentir protegida.

-No espera amor, no llores.

- ¡Yo no soy tu amor! ¡Descarado!

Él sonrió ante su insulto, no dijo una palabra, se sentó en la extraña cama en la cual dormía y la sentó en sus piernas en contra de su voluntad, se recostó en el espaldar de la cama y enterró su cabeza en su cabello.

-Solo cálmate.

Amelia empezó a ceder, pero igual seguía cautelosa, él era el enemigo, tenía que recordarlo, había hecho tantas cosas en el día que estaba mental y físicamente agotada, él no iba a ceder, así que lentamente como pudo se bajó de sus brazos, y se acurrucó en la cama.

-Drew, vete por favor.

- ¿Prefieres que esté Austin en vez de mí?

Ella no respondió a eso, se quedó hecha un ovillo, mientras sentía como la cama se hacía más liviana, sacó la cabeza por las sábanas y vio a Drew saliendo, en ese momento se había dado cuente de que había estado aguantando la respiración, respiró hondo. Mañana sería un nuevo y mejor día, o eso esperaba.

- ¿Dónde estabas? -Preguntó Micaela sobresaltándolo.

It hurts |Drew Dirksen|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora