Capítulo 17: Pequeño Infinito

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Despierto algo sudada y con el pelo húmedo, veo la hora en mi reloj de mesa y son las 3:21 am. Buscó mi bata de dormir y la encuentro colgada en mi closet justo detrás de la puerta. La amarró por mi cintura y salgo. Todo esta oscuro y veo sólo algunos reflejos de luz de la luna que llegan desde las cortinas abiertas de ventanas cerradas.

Me tomó del pasamanos y bajo lentamente las escaleras contando cada escalón para no caerme en el último escalón me tropiezo pero logró agarrarme de algo, suelto una carcajada y camino a la cocina. Prendó la luz para alumbrar la cocina, del refrigerador sacó una una caja de leche y un chocolate, lo cierro y abro una puerta para sacar un vaso y servirme la leche. Mientras que me lo sirvo llevo a mis labios una barra de chocolates con almendras, saboreó el exquisito sabor del chocolate por un minutos, me siento y tomó un sorbo de leche. La casa esta en silenció no tengo idea si este sola o este con Aaron o Papá, me levantó y subo las escaleras, me voy a la habitación de papá y duerme plácidamente con un brazo en su nuca y una en su estómago.

La cierro cuidadosamente para no despertarlo y lo logró, camino por el pasillo hasta llegar a la antepenúltimo habitación que es la de Aaron y el duerme con... ¿Anabell? Creó que es ella por que veo algo de cabello rubio tapando el rostro de Aaron, el la tiene abrazada con su brazo derecho y ella le tiene la mano tomada cerca de sus labios, sonrió y cierro la puerta cuidadosamente. Abro la puerta de mi habitación y en el momento que la cierro mi celular vibra, lo tomó en mis manos y es Mariana.

-Hola Mariana.

-Hola amiga, ¿Te desperté?

-No, estaba despierta.

- ¿Estas bien?

-No del todo.

-¿Por que, que pasa?

-Nada, sólo ... Nada.

-Francisca, te conozco, cuentame me estas preocupándo.

-Es... Es... Debora.

-Que,¿Que pasa con ella?, no he hablado con ella hoy por que no la vi en todo el día.

-Peleeamos.

-¿Que?

-Hoy me dijo que estaba de novia, pero con Cameron, yo le dije que no la apoyaría en esta relación por que no la querías ver sufrir y ella me llamó... Perra...perra bastarda.

-¿Que? Y ¿Que hiciste?.

-Le dije que no me hablara jamás y que no anduviera llorando por los rincones si el la deja por otra y me fui.

-Hablaré con ella, no te preocupes amiga, todo se arreglara y si ella no lo quiere así, no hay nada que hacer.

-Si... ¿para que me llamabas?

-No lo se, he despertado y se me quitó el sueño.

-bueno, somos dos.

-Jajaja.

Escuchó un ruido desde no ventana.

-Espera.

-¿Que pasa?

-He escuchado un ruido desde mi ventana

-Y ¿Que es?

Abro la cortina, veo para abajo y no hay nada

-No hay nada.

-Esta bien.

-Bueno, tengo que colgar. Nos vemos mañana, Mariana.

¿Profesor o Novio?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora