El Rompecabezas de la Magia©

-Las cartas del destino-

"Te juro que jamás en mi vida había visto a alguien tan obstinado como tú, Isabel. Solo tú soportas que tu vida sea un misterio. Tú eres un misterio en todo el sentido de la palabra. Te conocía, ahora no sé ni quién eres."
LR, The Prayer

-Vale, ya sé que no voy a ganar la partida, pero por lo menos déjame perder con dignidad.- decía Fabel, mientras observaba sus cartas.

-Jamás ganas, así que mejor calla.- dijo Micael en la esquina del cuarto. Sentado a lo indio en la cama de Lumina, con su guitarra.

-Gracias, yo también te quiero.- respondió Fabel.

Micael le mando un beso y le guiñó el ojo.

Manuel en cambio seguía ganando, y se iba a agenciar los premios más jugosos. Un paquete de cigarros, treinta pases de impresión y dos pastelitos de crema.
Sonreía con suficiencia.

Lumina y Caridad seguían devanándose los sesos tratando de ganarle a Manuel en las cartas, pero no había muchas opciones.

Al final, como previsto Manuel gano, y Lumina se rió a carcajadas de las caras de Fabel al perder sus cigarros.

La habitación de Lumina tenía la cama arrinconada en una esquina, el escritorio y el armario, era de un color rosa peptobismol, y había muchos cojines.
La mayor parte de las pertenecías de Lumina eran libros. Eso le daba s la habitación un olor especial s papel y tinta, que reconfortaba a todos.

Lumina ya no parecía afectada, si no más bien bastante entretenida con sus amigos.

-Bueno, ¿Ya estás más tranquila?.- le preguntó Manuel a Lumina.

Ella asintió mientras revolvía las cartas. Las repartió entre los cuatro, por qué Micael no tenía intenciones de jugar con ellos.

-Creo que me impresione mucho. Pero en parte lo que más me preocupa es que los de la escuela me empiecen a ver. Prefiero pasar desapercibida.- dijo de repente Lumina. No los observaba, solo veía sus cartas, pero todos los demás si la veían fijamente.

-¿Por qué quieres pasar desapercibida? .- preguntó Fabel.- Sí no hubieras sido parte de esto, entonces tal vez no me hubiera enterado de tu presencia.

-Por qué es más sencillo, sin contar que es  más fácil sobrevivir cuando no te ven, los maestros te tienen lastima y te pasan y la gente no te molesta por lo que haces o tus gustos.- dijo Lumina. Lo decía monótonamente, como si estuviese acostumbrada a esa explicación.

-Tal vez es que te has juntado con la gente inadecuada.- le dijo Caridad.- no todos son así.

Lumina solamente no respondió más. Tampoco la presionaron. Lo que frustró más que nada a Manuel, parecía una caja cerrada.

Después de eso jugaron unas cuantas partidas más, hablando de cosas banales y sin importancia.

Más tarde, cuando habían dejado de jugar, Lumina estaba sacando cosas de su mochila, y Caridad avistó una bolsita  roja y lo reconoció, un tarot.

-Tienes un tarot.- apuntó ella.- ¿Por qué no jugamos?

Lumina la observó detenidamente, y los demás a Lumina. Parecía que no sabía cómo reaccionar ante esa petición. Ella sabía leer las cartas, pero sabía que era algo arriesgado.

-¿Seguros?

-Si, ¿Por qué no?

Lumina se acercó y les indicó que se sentarán, incluyendo a Micael. Saco de la bolsa un mazo de cartas que se veían diferentes a las que comúnmente ellos conocían. Eran negras con símbolos arcanos y católicos en la parte posterior, pintadas a mano. Las mezclo y después las golpeo tres veces, luego les indicó a los demás que la imitaran.

-Sacare una carta por cada uno. Primero yo, luego Caridad, Manuel, Micael y Fabel. El orden en el que tocaron las cartas.

Saco la suya y la puso en el suelo. Volteada hacia arriba. La emperatriz. Luego la de Caridad. La Reina de Espadas. Para Manuel El Ahorcado. Micael el As de Oros y finalmente para Fabel el Caballero de Oros.

Lumina lo observo atentamente.

-Hay varias interpretaciones, pero en especial podemos ver que individualmente, yo soy una presencia protectora y creativa.
"La Reina de Espadas representa en Caridad la honestidad y la visión clara de las situaciones."
"El Ahorcado significa sacrificio. Manuel sacrifica y hace las cosas por qué son tu deber."
"Micael el As de Oros significa el éxito y las oportunidades, pero como persona se refiere más bien a que te va bien, pero a veces dudas de tus acciones."
"Fabel. El Caballero de Oros significa que trabajas duro para conseguir lo que quieres y te comprometes. "
" En general cada una representa sus características más arraigadas, en conjunto, las cartas indican que mientras trabajemos juntos tendremos éxito, pero habrá que hacer muchos sacrificios que se tendrán que tomar en cuenta de manera en la que se hacen las cosas, por qué habrá que hacer sacrificios con un corazón sincero, y mientras lo hagamos así, siempre habrá una protección que mantendrá el peligro alejado."

Cuando terminó ella no se dio cuenta de que la observaban fijamente.

-Eso fue muy extraño.- dijo Manuel

-Ustedes me pidieron que leyera las cartas. Las cartas nunca mienten, solo nos dicen cosas que tal vez no sepamos o que no queremos saber.

Micael no sabia como reaccionar ante lo que acababa de escuchar. Tal vez por qué era muy acertado, o de alguna manera pintaba un futuro bastante difícil.

Lumina recogió las cartas y las guardo de nuevo en el saquito rojo, que después metió en un cajón de su escritorio.

Cada uno se quedo con sus ideas para que pudieran analizarlo.

Todos sabían que he lo que Lumina había dicho era terriblemente acertado, y a la vez dejaba ver que las cosas no iban a mejorar pronto.

Se quedaron en silencio. Era ese tipo de silencios cómodos, donde tenis la confianza de estar callado y sentirte aceptado entre todos los que te rodean. Sin explicaciones. Solo una aceptación mutua.

Caridad no había tenido el mejor día. Regaños y luego la situación del tipo que se suicido. La verdad ella no veían por qué en la escuela, era un terrible lugar para morir.

En cambio Lumina pensaba diferente. El mejor lugar para morir era la escuela, rodeada de gente y lo más importante: joven.
Pero solo eran sus ideas locas y descabelladas que jamás exteriorizaba por qué sabía que sus nuevos amigos se pondrían como energúmenos.

-Vale, ¿Y como le hacemos para dormir?.- preguntó Fabel a media voz.

-Tengo unas cuantas mantas que pueden hacer de colchoneta y cojines de sobra. También puedo compartir la cama con alguno de ustedes.

Todos acordaron que Caridad era la indicada para dormir en la cama con Lumina.

Una vez más durmieron juntos, nada más que esta vez las cosas eran muy diferentes. Lo hicieron por miedo. Había algo acechándolos y eso era motivo suficiente para temer.

Sus enemigos estaban justo en él mismo lugar que ellos, y tal vez peor, los demonios más retorcidos se encontraban en el interior de cada uno.