Mi Dulce Venganza #PGP2016

Capítulo XI

Liz.

Me desperté rodeada de unos brazos fuertes, que me mantenían junto a un cuerpo bien fornido. Mi primer instinto fue asustarme, pero recordé enseguida que quien estaba allí era Ethan.

Gire en sus brazos tratando de no despertarlo y de no perder esa agradable sensación de sus brazos rodeándome.

Comencé a observar sus facciones y no podía dejar de pensar lo hermoso que era, su cabello castaño y sedoso al cual me encantaba acariciar, su mandíbula cuadrada y varonil, que le daban un toque de seguridad, su nariz perfecta y esa hermosa boca que cada vez que rozaba mis labios me hacia delirar.

Ayer se había comportado tan bien conmigo, realmente pensé que querría salir corriendo, porque siendo sinceros ¿quién va a querer salir con una chica que tiene problemas con un ex novio desquiciado? Y sin embargo se había quedado, no me dejo sola, me consoló y se preocupo por mi, me cuido y no sé qué habrá pasado exactamente con John pero se que más de una cosa le habría dicho y hecho. Pero pesar de que quizás sonará mal, eso me daba seguridad.

Y no solo eso, sino que no intentó intimar conmigo, la mayoría hubiera aprovechado mi debilidad sentimental y él hizo todo lo contrario, pasó la noche abrazado junto a mi y nunca intento más de un beso. Y apostaría que no fue por falta de ganas, o eso intuía al haber estado contra su cuerpo y sentir su prominente entrepierna.

Me sentía contenta de eso, que se comportara tan bien conmigo y fuera atento y considerado, dadas las circunstancias de lo que venía pasando era justo lo que mi corazón necesitaba.

Estaba perdida en mis pensamientos y observando a tan hermoso hombre cuando sentí una tosecita proveniente de la puerta, gire mi rostro y allí estaba mi amiga, con un gesto bastante peculiar, una mezcla de risa e insinuación levantando sus cejas.

Sonreí y le hice señas con la mano para que se fuera, no quería que lo despertara porque sabía que lo acosaría a preguntas.
La muy maldita no quería marcharse, y estaba segura que si no decía ni media palabra no me dejaría en paz.

Se me ocurrió que podría bajar a la cocina a prepararle un buen desayuno a Ethan, después de todo era lo mínimo que se merecía, y aprovecharía para charlar allí con mi amiga.
Le volví a hacer señas para que me diera unos minutos, le di un beso en la frente a Ethan y me levante cuidadosamente para no despertarlo.

Volví a perderme observándolo hasta que mi amiga me tiró del brazo para sacarme de allí, y entre cosquillas y risitas bajamos a la cocina.

—Ya mismo te exijo que me cuentes todo, todo sin obviar ningún detalle —chillo mi amiga, mientras yo rebuscaba en la nevera por alguna fruta.

Encendí la tostadora y coloque unas rodajas de pan en ella, puse a hacer café y me dispuse a cortar algo de fruta como para una pequeña ensalada, no sabía lo que le gustaba, así que decidí preparar un poco de todo.

—Y bien ¿es que no piensas decir nada? —dijo mi amiga mientras me miraba con los brazos cruzados. Sabía que estaba impaciente por enterarse de que sucedió, pero yo no tenía idea ni por dónde empezar.

—Ufff amiga, pasaron demasiadas cosas, solo agradezco que Ethan apareciera o no sé qué habría sucedido.

El rostro de Eli se transformó, quedando totalmente seria, estaba segura que se enfadaría enormemente y con razón.

—Ayer luego de que te fuiste, decidí salir a caminar un poco y comer algo, había mensajeado con Ethan casi toda la tarde y estaba un poco confundida. Me topé con John, había venido por mi, quería llevarme con él vaya saber dios a donde, rompió mi teléfono, fue espantoso —dije al tiempo que una lágrima solitaria caía por mi mejilla —en cuanto tuve oportunidad salí corriendo para alejarme y volver aquí y al llegar estaba Ethan. Me calmo porque prácticamente me da una crisis nerviosa, imagínate que de tan alterada que estaba lo confundí con John en un principio.
Solo puedo decir que se portó como todo un caballero, más aún cuando John interrumpió aquí luego de unas horas.