Capítulo 42

833 70 3
                                    

¿Tú Quién Eres?

Escritora

Han pasado exactamente dos meces desde que Kyle y Ángel fueron secuestradas, un mes desde que las autoridades iniciaron la búsqueda y un mes desde aquel encuentro entre Alan y Hudson.

¿Qué ha pasado en el transcurso de ese mes?

Las autoridades están más consientes y más convencidos de que las niñas se las trago la tierra, han movido cielo y mar, pero no encuentran ni un rastro de ella como tampoco encuentran un sólo rastro de Eduardo.

Hudson por su parte tiene muy bien vigilada a las Russo, aunque nadie se halla dado cuenta, ni siquiera el mismo Bruce que es el guardia de seguridad personal de ambas chicas.

Hudson sabe que estuvieron en Portugal, sabe que Kyle discutió con Eduardo, sabe que se encuentran en Denver, sabe lo que Eduardo le hizo a Kyle o más bien, se las ingenio para estar allí cuando Kyle fue llevada a emergencias por Bruce.

Y se preguntarán como Hudson habrá hecho todo eso cuando los mismos hombres de Eduardo lo conocen y conocen su rostro perfectamente, y Obvio Hudson no pondría su vida en peligro en manos de los hombres de Eduardo, pero el de algún modo se las ingeniaba para saber cada paso que daban las Russo y su padre, por eso no le dijo nada a Alan y decidió esperarse un momento hasta la hora que sea correcta para el, pues el tenía para los Russo y para Alan una jugada maestra y necesitaba por ahora a Alan lejos de sus planes.

~Kyle

Me desperté algo tarde, me dolía mucho la cabeza y al levantarme vi unas enormes bolsas debajo de mis ojos, y cuando me percaté me di cuenta a que se debían esas enormes ojeras y es que luego de tener ese sueño con mi mamá no hice más que romper en llanto, su partida, su ausencia, esta situación me han vuelto a quebrar nuevamente, han hecho añicos mi corazón, nuevamente me siento vulnerable, sola y desprotegida, nuevamente ella no esta y siento su ausencia aún más, sintiéndome más miserable.

Lo estuve pensando muchas veces, lo he maquinado, planeado y levemente calculado y pienso que lo mejor sería sacar a Ángel de este lío, hoy más que nunca debo de protegerla, aunque eso implique dejar mi vida en manos de Eduardo, hoy sin más preámbulos voy a planear la huida de Ángel, de esta semana no pasa que mi pequeño Angelito vuela con su familia.

Me metí a la tina y me di una ducha algo larga para relajar mis nervios y relajar mi mente, pues debo de tener todo en orden en mi cabeza sino no podré calcular bien la huida de Ángel.

Luego de ducharme, me coloque algo cómodo y me quede en la cama a esperar por Bruce, y fue allí que me di cuenta que Ángel no estaba conmigo a mi lado y empece a desesperarme, pues no estaba en el baño, no estaba debajo de la cama y no estaba por ningún lado de la habitación.

- BRUCE, -dije mientras le pegaba fuerte a la puerta, pues el anoche antes de salir cerró la puerta bajo llave.

- BRUCE ABRE LA PUERTA POR FAVOR, -dije mientras tomaba la manija de la puerta y trataba de abrirla.

- BRUCE, -seguí gritando mientras por mi mente pasaba lo peor, imaginando a Eduardo entrar en la madrugada y llevándose a mi hermana.

- BRUCE, -dije, pero fui callada por sorpresa, pues el apareció de la nada frente a mi con las llaves en las manos.

- Que sucede, -me pregunto.

- Donde está Ángel, -le pregunte.

- Esta en la guardería, -dijo y sentí como el peso que llevaba en mi espalda se fue relajando.

MY LIFE, MY STORY, MY PASTDonde viven las historias. Descúbrelo ahora