II

277 14 3
                                        

Los chicos me observaban de una forma muy estraña. ¿Es extraño que seamos hermanas? No somos muy diferentes.

Al parecer, los otros tres gritos provenían de dos chicas y un chico que aún se encontraban en el interior de la casa. Miré a mi hermana y luego a los chicos.

-H-Hola- saludé, tratando de sonar lo más calmada posible.

-¿Y esta aquerosa aparentando ser santa?- dijo el moreno que salió en segundo lugar. (N/A: "aquerosa" lo escribí así a propósito XD).

Un golpe se escuchó en todo el lugar. Mi hermana lo había golpeado con una sartén, que solo Dios sabe de dónde lo sacó, justo en la cabeza.

-Cuidadito con mi hermana, Alejandro- le advirtió Steicy con pose de defensa.

No tengo ni una hora y ya el tal Alejandro me odia. Genial... miré a los demás y estaban más perdidos que yo. Saludé con la mano lentamente y Steicy pasó un brazo por mi hombro para abrazarme.

-Chicos, ella es Nely. Somos hermanas de parte de padre y viene a quedarse un tiempo conmigo-

Yo solo sonreí un poco avergonzada, pero al ver que ellos sonreían y se acercaban, los nervios se esfumaron.

-Bien, mi nombre es Gabe Johnson. Un gusto- saludó un moreno, un par de centímetros más alto que yo y tenia los ojos color miel.

-Igualmente- contesté con una sonrisa amigable.

-Yo soy Nelly Cáceres y ella es Mery Cáceres- dijo una chica algo baja de estatura, de piel blanca, cabello negro y ojos oscuros- Somos hermanas- creo que eso es obvio...

-Somos compañeras de Steicy- contestó la otra chica. Era de mi altura, las misma características que su hermana, pero tenía los ojos más grandes.

-Yo soy Ronaldo Ayala, pero me puedes llamar "papi sexy"- dijo besando mi mano, a lo que un golpe seco volvió a sonar.

-¿Cuándo dejará de ser un mujeriego?- dijo mi hermana con un tono algo cansado.

-No lo sé- dijeron ambas chicas mientras veían a Ronaldo inconsciente al lado de Alejandro.

-Ellos son hermanos- comentó Gabe con una cara algo cansada.

-No necesitaba saber eso- contesté mirando a los chicos en el suelo, en cierto modo, se parecían un poco. Posé mi mirada en el rubio que estaba parado a unos pasos de mí.

-El idiota de ahí es Nataniel Jones- dijo Mery con una sonrisa pícara- Oye, rubio. ¿Le echaste el ojo a la hermana de Steicy?-

En eso me puse totalmente roja. Podría jurar que me salía humo de las orejas. Cuando volteé a ver a Nathaniel, estaba hasta peor que yo.

Ahora que lo veo bien... es alto, de pelo rubio pero estaba al borde de ser castaño y sus ojos son de un jade intenso. Tan intenso que literalmente me hipnotizaban.

-¿Se estarán viendo como idiotas o dirán algo?- dijo Steicy empujándome un poco hacia adelante.

-L-Lamento haber caído encima de ti hace rato- se disculpó con la cara totalmente roja y mirando hacia el suelo.

-descuida- dije con una pequeña sonrisa.

-Vayamos a tu habitación- escuché que dijo Steicy y entre Mery y Nelly me ayudaron con las maletas, mientras que Gabe y Nathaniel arrastraban a Alejandro y a Ronaldo.

-¿Todos viven aquí?- pregunté señalando a los chicos y luego a ellas.

-Solo nosotras tres- contestó mi hermana.

-No estamos tan locas como para vivir con cuatro idiotas que creen ser personajes de Dragon Ball, Fairy Tail o Nanatsu no Taizai- comentó Mery.

No pude evitar soltar una risita ante aquel comentario. Subimos hasta el segundo piso y nos dirigimos hasta la última habitación. La habitación a la que entramos era la única que estaba de blanco. ¿Cómo lo sé? Porque al pasar por las demás habitaciones estas estaban pintadas de colores vivos y adornadas con muebles modernos.

-Papá dijo que podíamos buscar los muebles que quieras mañana- me dijo Steicy, sacándome de mis pensamientos. Yo solo asentí.

Luego de acomodar algunas de mis cosas, las chicas y yo estuvimos conversando un rato de nuestras vidas. Nelly, extrañamente, es la hermana mayor por dos años. Mery es una excelente estudiante, pero parece drogada de tan animada que es. Steicy es la supuesta "novia" de alejandro, o eso es lo que él cree.

Estábamos tan concentradas en nuestra conversación, que nos exaltamos cuando se escucharon gritos al otro lado de la puerta.

-¡AHORA SI QUE NO TE VAS A SALVAR!-

-¡AYUDAAAAA!-

-Yo mejor me voy- al escuchar eso, entró Ronaldo a la habitación y nos miró a todas- No quiero estar ahí afuera con ellos. No quiero que me metan un palo por donde no da el sol-

Nos reímos un poco y lo invitamos a sentarse junto a nosotras. Los demás seguían discutiendo afuera. Esto iba a ser largo...

Hasta aquí el capítulo de hoy! Espero verlos pronto! Un beso muy grande!
Bay Bay!

Viviendo Con Mi HermanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora