Mi Protegido

5

Nate entró a la casa encontrándose con un silencio sepulcral. Fue directamente a su habitación para recoger sus cosas lo más rápido posible. Ya que no quería encontrarse con alguien de su familia. Tenía muy claro que a esas horas, su padre ya se había enterado de todo. Ella no era tan severa pero su padre si.
Termino de cerrar la última maleta, en su cabeza pensaba que tendría más cosas pero toda su ropa y algún que otro objeto que quería llevarse consigo. Cuando estaba a punto de salir de la casa, alguien lo agarró del hombro y lo empujó hacia atrás. Tirándolo al suelo del salón donde estaban todos los miembros de su familia mirándolo fijamente.
Casa de Nate, salón
Marck: Ahora mismo me vas a explicar eso de que eres maricón.
Nate: Para empezar papa, no soy maricón como tu dices, soy tu hijo y soy gay.
Marck: ¡Y te atreves a decirme lo así de fresco! (Pegándole una bofetada fuerte)
Nate: ¿Es necesario que me hagas esto? (Empezamos a llorar)
Marck: Hannah llévate a tu hermano pequeño a la habitación.
Margaret: Mark por favor no le pegues más.
Mark: Le pego para que se le quite la tonteria de los hombres.
Nate: Por muchos golpes que me des, no cambiaras mi orientación sexual.
Marck: Pues seguiré hasta que lo consiga.
El hombro empezó a repartir diversos golpes por todo el cuerpo de su hijo. Bruscamente y sin piedad alguna repartió puñetazos y patadas sin pensar en que era su hijo al que castigaba de aquella manera.
Nate: Papa, para po...r fa...vor. (Adolorido)
Marck: ¡No vuelvas a llamarme papa en tu vida, tu ya no eres mi hijo! Yo ahora solo tengo tres hijos y tu nunca has existido.
Margaret: ¿Qué estas diciendo?
TJ: Papa no digas eso, él es nuestro hermano y sobre todo tu hijo.
Marck: Callaros los dos, ya he hablado y esta cosa ya no forma parte de esta familia.
Cogió a Nate y lo arrastró hasta la puerta donde lo lanzó hacia la entrada de la casa de manera brusca, seguido de sus maletas sin darse cuenta del lujoso coche que estaba aparcado delante de su casa. Mientras tanto Robert se encontraba en el deportivo cantando su canción favorita cuando de repente giró la cabeza y vio el cuerpo de su pequeño novio tirado en el suelo.
Casa de Nate, entrada
Robert: Nate cariño. ¿Qué te ha pasado?
Nate: Mi pad...re me ha da...do una pa...liza. (Tosiendo)
Robert: ¡¿Se ha atrevido a tocarte, cómo ha podido?!
Robert iba de camino a la puerta de la casa cuando Nate con un último esfuerzo lo detuvo agarrándole una pierna.
Nate: Déjalo estar, solo quiero irme de aquí. (Adolorido)
Robert: Pero esto no puede quedarse así, déjame ir a decirle un par cosas a tu padre.
Nate: Por favor Robert, solo vamonos.
Robert cogió en brazos a Nate, lo metió en el coche con mucho cuidado para luego meter sus maletas e irse de ahí rápidamente.
Coche de Robert
Nate: Necesito que me atienda un doctor cariño.
Robert: Tranquilo que yo me ocupo de todo, pero mira lo que te ha hecho si tienes la cara llena de sangre.
Nate: Prefiero no pensarlo, no es tan raro que haya actuado así.
Robert: Tu tranquilo y aguanta lo mejor que puedas el dolor, que llegamos enseguida.
Nate: Menos mal que te tengo a ti en este momento porque si no, estaría muriéndome.
Robert: Tranquilo. [Si lo llevo al hospital se armará un escándalo y me ahogaran a preguntas, sera mejor que llame a Chris para que me ayude a pensar que hacer.] (Besándole la mano)
Llamada
Chris: ¿Diga?
Robert: Chris necesito que vayas a mi casa lo antes posible, para que me ayudes con una cosa importante.
Chris: ¿Qué ha pasado ahora?
Robert: Nate acaba de sufrir un paliza por parte de su padre y como comprenderás no puedo llevarlo al hospital.
Chris: Voy para allá, llamaré a un amigo doctor que tengo.
Robert: Gracias, sabia que podía contar contigo.
Fin de llamada

Chris se alistó lo más rápido que pudo mientras llamaba a su amigo. Mientras se vestía hizo que Kate se despertara cosa que quería evitar a toda costa.
Kate: ¿Chris, a donde vas mi amor? (Adormilada)
Chris: Robert me ha llamado y necesita mi ayuda, es algo urgente.
Kate: Está bien. (Durmiéndose de nuevo)
Chris salió de su casa lo más rápido que pudo sintiendo una preocupación inexplicable por Nate que lo tenia muy desconcertado.
Por otra parte Robert llegaba con Nate a la mansión. Aparcó el coche, se bajó y lo volvió a coger en brazos para llevarlo a su habitación ya que quería limpiarle un poco la sangre que tenia en la cara antes de que llegara el doctor. Al cabo de veinte minutos llegó Chris a la mansión, se bajó rápidamente de su coche. Para su suerte la puerta estaba abierta, subió lo más rápido posible las escaleras y entró a la habitación de su amigo. La imagen que vio allí, le preocupó más de lo que pensaba. Nate estaba con la cara ensangrentada, hinchada en algunas partes de esta y con con la ropa sucia.
Mansión de Robert, habitación de Robert
Chris: Dios. (Preocupado)
Robert: Al fin llegas, estoy muy angustiado porque lleva más de treinta minutos inconsciente.
Chris: Estate tranquilo que mi amigo llegará lo más rápido posible.
Robert: Es que no sabes lo que sentí al verlo ahí tirado en el suelo, estoy demasiado preocupado.
En ese momento sonó el timbre de la mansión que al estar en silencio retumbo por todas las habitaciones.
Robert: Iré a abrirle ahora vuelvo. (Yéndose)
Chris: Vale.
Robert salió de la habitación corriendo dejando al rubio vigilando al joven. En ese momento Chris observó el rostro de Nate, a él también le dolía lo que le había pasado al joven ya que desde el principio le cayó bien. No entendía por qué, pero sintió la necesidad de darle una pequeña caricia en el rostro. Al principio no se atrevía a hacerlo ya que lo veía raro e innecesario pero cuando se decidió a hacerlo, Robert apareció con el doctor.