Habían pasado unos quince minutos desde que dejó a Nate solo en el salón. No estaba enfadado por lo que le dijo, ni mucho menos, pero le vino bien para poder escapar de la situación por un rato.
Diría que se encontraba nervioso, la ocasión lo merecía pero no era así. Aunque había creado un gran conflicto entre Nate y Robert, llegó a las manos con el segundo, acababa de tener un momento de gran tensión con el primero y quizás había dejado al descubierto su orientación sexual. Este sentía alegría por lo que había pasado con el joven. Ya no trataba de mentalizarse de que no podría tener nada con él, no después de volver a besarlo aunque fuera en esa situación. Sabía que no era un calentón lo que el muchacho le provocaba y eso le gustaba porque le hacía sentir como hacía mucho no se sentía. Pero aunque la alegría pudiera opacar todo su psique, en una esquinita aún quedaba el sentimiento de culpa y miedo por todo lo que le tocaba enfrentar en un futuro cercano.
Iría por fases como si fuera un videojuego. Primero estaba la fase de entrenamiento, que era expresar abiertamente su verdadera sexualidad con más personas. Esto en el fondo no le resultaba tan tedioso ya que si lo había hecho antes, siendo más joven e inseguro, podría hacerlo ahora que era más adulto. En el segundo nivel tocaba el jefe de menor dificultad, Nate. ¿Cómo llevaría su relación a partir de ahora? ¿Haría como si no le hubiese besado estando semidesnudo o le confesaría lo que estaba empezando a sentir? Él quería ser sincero con su amigo pero auguraba un desenlace poco favorecedor para él. Nate no se lanzaría a sus brazos en cuanto le dijese la verdad. Si algo tenía claro de su amigo, era que su amor por Robert era sincero. Podría decírselo pero eso conllevaría a un distanciamiento claro en su amistad ya que sería todo muy raro, tenso y posiblemente Robert lo mataría al enterarse. Pero y si confesándole sus sentimientos todos logran llevarlo de la manera más madura posible. Parecía buena idea pero la balanza se decantaba por la primera opción. Después de pasar del segundo nivel, tenia la opción de ir al jefe final quien era Robert o pasar de manera opcional con un jefe de nivel intermedio quien era Kate. Aunque pareciese que Robert era el hueso más duro de roer, ella no se quedaba muy atrás. El rubio lo era todo para ella, sentía que había creado cierta dependencia en su persona que haría todo más complicado a la hora de cesar su relación. ¿Cómo podría cortar con ella? Era fácil decir "te dejo" pero con Kate sabía que no resultaría tan sencillo. Como mínimo un berrinche tendría por su parte pero eso era pensar con mucho optimismo. Kate pasaría del llanto al odio en pocos minutos y sospechaba que podría causarle algún que otro escándalo. Por obvias razones no le diría que estaba rompiendo porque le gustaba Nate, quien no le caía muy bien. Nunca entendió que Kate no soportarse a Nate. Habían coincidido alguna que otra vez pero el joven siempre fue simpático con ella aunque esta le hiciera algún que otro gesto de desagrado que afortunadamente Nate obvió. Es posible que la chica se diera cuenta del claro tonteo que llevaban ambos y por eso no lo soportaba. Quería pensar que no era ese el motivo pero si así fuera, le diría la verdad aunque después reaccionase de malas maneras.
Ya no había otro jefe con el que entretenerse, si o si tenia que ir a por el jefe final. De todos, era con quien peor estaba la cosa. Se habían peleado de manera física. Él y Robert. De todas las cosas que le podía haber pasado con el actor, jamás pensó que les pasaría algo así. Teniendo en cuenta que ambos eran ya bastantes adultos, lo normal hubiese sido que solucionaron sus "rencillas" con el diálogo. ¿A quién debía de vender su alma para que pudiese formular una excusa creíble? Robert no era tonto y ya se olía algo desde hacía tiempo. Antes podía alegar que eran celos absurdos pero habiéndolos visto en esa situación, el actor de Iron Man no aceptaría ninguna excusa por mas creíble que fuera. Quizá con él si debía ser sincero y agarrar el toro por los cuernos. De primeras era la única opción viable pero temía y sabía que la reacción de Robert no sería la más pacífica. Aunque si al final lo hacía. ¿Cuál sería el momento idóneo para hablarlo? Ahora no podía ir y soltarle eso como si no hubiese pasado nada. Ya no recibiría un puño de su parte, sino más bien, un disparo entre ceja y ceja. Empezaba a dolerle la cabeza solo de pensar en ese momento pero sabía que todos sus frentes abiertos, era lo que tenía que hacer si o si ya que era el responsable de todo lo que les estaba pasando a los tres y cuatro si metía a Kate pero ella era un daño colateral en esta historia.
Imaginaba posibles escenarios de todos los frentes que tenia abiertos mientras miraba un punto fijo en el techo de su habitación. Todos ellos acababan en discusión y con un desenlace similar. Intentaba pensar en opciones que dieran un final bueno para él pero no había manera. Empezaba a pensar que la había pifiado hasta tal punto que no le quedaba otra opción que asumir las consecuencias por terribles que fueran. Ya iba por el vigésimo escenario de su futuro encuentro con Robert cuando escuchó como la puerta de su habitación se abría.
Departamento de Chris, habitación
Chris: Nate. ¿Estás más tranquilo? (Sentándose)
Nate: Necesito que me aclares algo.
Chris: Claro, dime.
Nate: ¿Sientes atracción por mi? (Mirándole fijamente)
El actor se quedó paralizado al escuchar esas palabras. Entendía que Nate le cuestionara de esa manera tan directa después de que este le besara sin razón alguna y con una de las peores excusas de la historia. Pero nunca pensó que pudiese preguntárselo en ese momento, ya que creía que el joven se había conformado con lo que le dijo.
Chris: Ehh. ¿De qué hablas Nate? (Fingiendo extrañeza)
Nate: Pues eso, que si yo te gusto. La verdad es que no había pensado en esto desde que Luke me lo dijese el día que nos encontramos en la playa. Yo le llamé loco porque en la vida pensaría que tú te sintieses atraído por mi. Pero con lo que ha pasado hoy, tal vez debí de haberle hecho caso a Luke ya que si me lo dijo fue porque vio algo que le hizo sospechar.
Chris: Nate, no me apetece hablar de tonterías, no hoy. (Saliendo de la habitación)
Nate: No son tonterías Chris. (Siguiendo al actor)
Departamento de Chris, salón
Chris: ¡¿Qué no son tonterías?! Ósea me estás preguntando si me gustas teniendo en cuen... (Siendo interrumpido)
Nate: ¡Teniendo en cuenta que me has besado sin venir a cuento! ¡Ósea quien se cree que por un susto, besas a alguien y encima en la manera de la que me besaste. Lo de la caída te lo compro, pero lo otro no!
Chris: ¡Es lo que me pasó! ¡Si te lo quieres creer bien, y si no pues también! [Tengo que zanjar esto de cualquier manera.]
Nate: ¡Si incluso estabas empezando a tener una erección!
Chris: ¡Qué ya te he dicho que no soy maricón como tú! ¡No me gustas ni me gustaras en la vida! [Dios lo siento mucho Nate pero será mejor que lo haga así.]
Nate: ¿Maricón? ¿Así es como te refieres a mi? (Con los ojos llorosos)
Chris: No, no quería decir eso. Perdóname pero me sentía un poco acorralado y he hablado sin pensar. (Tocándole el hombro)
Nate: !Quita, no toques al maricón! (Apartándole la mano de golpe)
Chris: ¿Qué haces?
Nate: No me toques, si te doy asco. ¡Aléjate de mi! (Llorando y temblando)
Chris: Nate...
Nate: Doy as...co, soy des...preciable. (Cayendo al suelo)
Chris: Eh Nate, no digas eso, por favor no te machaques así. (Arrodillándose)
Nate: A mi pa...dre le doy asco, a Ro...bert, a In...dio e in...cluso a ti. (Sollozando)
Chris: Dios, lo siento mucho Nate. No quería decirte maricón, no siento para nada asco hacia ti.
Nate: ¡Na...die me va a que...rer porque doy as...co! (Con problemas para respirar)
El joven estaba teniendo un ataque de ansiedad, no había tocado mucho el tema pero desde que fue echado de su casa con paliza incluida por parte de su padre. Nate había tenido algún que otro ataque de ansiedad a causa del trauma que era para él ser rechazado por la gente que más quería. Ahora que no tenia ni a su familia ni a Robert, pensar que al menos tenía a Chris le era un consuelo. Pero escuchar esa palabra por parte de Chris, le hizo recordar lo que su padre le gritaba mientras apaleaba su cuerpo.
Chris necesitaba ayudarle ya que le dolía demasiado verle en ese estado y sobretodo siendo por su culpa. No quería herirle, solo acabar con su acusación y dejar el tema en el olvido. Deseaba volver unos minutos atrás en el tiempo y pensar en otra respuesta que no lo hiriese de esa manera. Se encontraba paralizado ya que ver a Nate en esa situación le hizo recordar a Alex, quien también tenía ataques de ansiedad cuando recordaba todo el sufrimiento que su madre le hizo pasar en su infancia. Recordó que una manera de ayudar a Alex era abrazarlo y calmarlo con caricias por lo que haciendo un pequeño esfuerzo, agarró al joven en brazos. Este no puso resistencia ante el acto de Chris ya que a penas tenía control de su cuerpo en ese momento. Ya de pie, se dirigió a su habitación de nuevo donde Chris acostó a Nate en la cama con mucha delicadeza. Pasó a quitarle sus zapatos para que estuviera más cómodo e hizo lo mismo con él para terminar acostándose detrás del joven a quien rodeó con sus brazos fuertemente. Aún temblaba y eso hacía que Chris presionara más sus cuerpos para que se sintiese en un ambiente cálido y acogedor. Todo esto mientras acariciaba su pelo.
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Mi Protegido
Teen FictionQuiso proteger a un chico indefenso provocando un profundo amor en ambos.