Cosas Que Pasan

Un día

Llego al Instituto; "Espero que nos haya tocado el mismo horario, al menos que tengamos uno parecido... No soy un psicópata, ni un acosador... ¿verdad?" pienso buscando a Dana cerca de la entrada; la veo bajar del coche de Jasper... Dios... le odio tanto...
- ¿Qué has hecho para conseguirlo?- le pregunto; se rasca la nuca algo perdida.
- Mmm... ¿qué?- susurra avergonzada; señalo detrás de ella.
- ¿Cómo has conseguido subir a su coche?- insisto; mira hacia atrás un segundo.
- Eh... yo... bueno, soy su vecina Mitch- dice para salir del paso, caminando hacia la entrada; la persigo.
- ¿Crees que no lo sabía? Venga Dana, cuéntame qué has hecho.
- No he hecho nada. ¿Recuerdas que ayer tuve que ir a la Junta del alumnado?
- Sí, ¿se tragó la jueza el vídeo editado?
- Por supuesto.
- ¿Ha dicho que no te metas en más líos?
-¿Eh?, dejaría de ser yo si hiciera eso. No, me ha hecho pagar 200$ dólares por lo de la fachada y tengo vigilancia el resto del curso, sólo por si acaso.
-¿¡Quién te vigila!?- digo exasperado.
- Él.
- ¿Por qué él?
- Es el presidente y lo dijo la jueza.
- ¿Te traerá siempre?
- No lo sé. Tal vez.
- No te enamores, ¿entendido?
- ¡No!, ¿por qué iba a hacerlo?
- Bueno... Ya os conocéis lo suficiente, él es... él, y tú... tú eres especial.
- No lo haré, tranquilo.
- Estoy hablando totalmente en serio Dana.
- Y yo; lo juro por tu gusto hacia... - se calla de pronto; Nina acaba de aparecer.
He dejado de escucharlas, mis ojos se han posado en un flequillo despeinado y pelirrojo oscuro que avanza entre la multitud de estudiantes hacia no sé dónde. Doy la espalda a las chicas con la intención de averiguar hacia dónde se dirige; él chico mira hacia otro lado y consigo adivinar que es Thunder llendo hacia su taquilla.
- Ya, entiendo- escucho dicir a Nina justo cuando vuelvo a mirarlas.
- ¿Le habéis visto?, cada vez está mejor- comento refiriéndome a Thunder.
- ¡Pero serás gilipollas!- suelta Nina cabreada- Me tienes harta Mitch; díselo, invítale a merendar con nosotros- añade entre dientes y con los puños apretados; sonrío feliz, sólo he escuchado "invítale a merendar con nosotros", no sé qué le pasa a ella- Vamos, aún puedo cambiar de opinión- insiste algo más calmada; me marcho, "Ya tengo una excusa para hablar con él".
- ¡Te esperamos en clase!- grita Dana mientras Nina tira de ella hacia nuestra aula.

No hago ruido al acercarme a él por detrás, quiero darle un pequeño susto; ya casi lo tengo...
- ¿Qué tal, Patata?- pregunta sin mirarme; doy un pisotón al suelo.
- Pues ahora nada bien, me has chafado el susto- respondo; cierra su taquilla y se gira hacia mí, sonríe.
- Sólo noté una perturbación en la fuerza- comenta alborotando mi flequillo con su mano; le miro extrañado- Es de Star Wars, ¿no has visto las pelis?- añade con tranquilidad; niego con la cabeza- Om, pues te he hecho un spoiler; lo siento- admite con una sonrisa torpe; sonrío.
- No importa- susurro- ¿Qué tienes ahora?- pregunto interesado.
- Francés- contesta; sonrío.
- Ven, tenemos lo mismo- digo poniendo rumbo hacia la clase. Entramos; veo a Nina y Dana separadas, "Mal rollo" pienso, decido sentarme con él a la misma distancia de ellas para que después no me riñan.

-¡Nina Anderson Wood!- digo cerca de su oido; pega un salto en la silla y mira en todas direcciones; se levanta ofendida y me mira.
- ¿¡Tu eres idiota o te comes los mocos!?- grita dándome puñetazos en el hombro; sonrío tranquilo, sin inmutarme, pongo las manos en sus hombros y le miro a los ojos fijamente...
- Nina, él, - comento señalando a Thunder- es Theo- añado.
- Om... Theo... el famoso Theo... - comienza a bromear- Alguien me habló mucho de ti, creo... creo que fue ayer por la tarde... sí... mientras cuidaba de mi hermano pequeño con ayuda de un vecino...- le tapo la boca automáticamente; suelta una carcajada malévola y me sonrojo de vergüenza. Theo me mira a los ojos con los suyos divertidos y una expresión curiosa en el rostro.
- La pobre está loca- me disculpo por sus palabras; Theo sonríe levemente- ¿Qué tal sí nos vamos?- añado acalorado. Asienten de acuerdo.
Creo que Theo mira mucho a Nina, ¿y si le gusta ella?, ¿y si él no siente nada?;mi expresión comienza ha tornarse triste...
- ¿¡Qué miras, a caso tengo ranas en la cara!?- suelta ella de pronto; él niega con la cabeza y se aparta el flequillo de los ojos segundos después- ¿Entonces?- pregunta molesta.
- ¿Eres la chica con la que me choqué antes?- murmura confuso.
- Que yo sepa no hay otra Nina Anderson en este Instituto, ni ninguna chica que se parezca lo más mínimo a mí- responde; él baja la cabeza avergonzado y camina un rato más mirando sus pies pensativo; le miro.
- ¿Qué pasa Thunder?- susurro preocupado visiblemente;Nina hinca el codo en mi costado más cercano, la miro y me hace una seña indicando que lo deje, yo gestualizo otra haciendo notar que me deje ella a mí.- ¿Thunder...?- insisto cerca de su oído.
- Perdón; andaba en mi cabeza... No es nada, no te preocupes- contesta él rápidamente; sonrío y miro a Nina sacando la lengua, me imita y nos reímos.
- Aún no me has dicho de dónde vienes- comento interesado; Theo sonríe.
- Canberra, Australia- confiesa entre dientes sin apartar la vista del suelo.
- Genial... tenemos un pequeño australiano- murmura Nina sarcástica.
- Al menos no mido lo que un arbusto- reprocha tranquilo.
- ¿Porque has venido?- sigue con mi interrogatorio sin importar lo que pase alrededor, sólo veo a Theo.
- La granja de mis abuelos ha sido trasladada aquí, así que debo estudiar aquí- dice pasivo mientras mete las manos en los bolsillos de su chaqueta de cuero negro.
- ¿Qué tenéis en la granja?- insisto; Nina se río y ambos la miramos.
- ¿¡Qué!?, sólo imaginaba a nuestro pequeño australiano con cara de niño pequeño como un cowboy de la pradera, montado en una vaca de manchas rosas que daba batido de chocolate en vez de leche...- lentamente va bajando el tono de voz hasta quedar en silencio; él y yo, nos miramos  y de pronto comenzamos a reír con ella.
- ¿¡Qué te he dicho sobre las "drogas", Nina!?- bromeo aún entre risas.
- Que las comparta- musita fingiendo sentir timidez; sonrío y miro la hora- Es hora de que conozcas al resto del grupo Pequeño Cowboy de la Pradera- dice; Theo sonríe. Me adelanto un poco a sus pasos; poco después Thunder aparece a mi lado y sonrío.

Thunder y yo hemos hablado mucho, pero no como ayer por la tarde, no de la misma forma, y eso me entristece. Las chicas se han ido a no sé dónde, pero eso no importa; creo que me gusta un chico que apenas conocí hace un día y es muy probable que, a él, le guste mi mejor amiga.
- Ahora que ya estamos todos, yo... quería...- comienza a balbucear Jasper con una mano en la nuca- ¿qué tal sí venís esta tarde a casa?, voy... podéis quedaros a dormir y... tendremos maratón de películas...- finaliza bastante cortado; los demás nos miramos unos instantes y sonreímos.
- Claro- acepta Dana en nombre de los cuatro; él suspira aliviado.
- ¿Te daba vergüenza?- pregunto; Jasper asiente, nos reímos, se sonroja visiblemente, baja la vista a sus pies, Dana acarcia su pelo y él la mira, le sonríe amable.
- Sé que no ha pasado ni un día, pero quiero conoceros ahora y no más adelante- confiesa Jasper entre dientes; sonreimos y asentimos. Suena la sirena del fin del recreo y entramos al Instituto; sólo quedan un par de horas.