PREDOMINIO (Detenida)

Capitulo- 12

Kayla iba de un lado a otro y no paraba de farfullar lo increíble de todo esto. Nos encontrábamos en las calles del barrio Blookline, a minutos por el comienzo del espectáculo nocturno.

Marks me matara en cuanto lo sepa. En mi defensa fue Kayla la que me siguió desde Season hasta aquí. Sabía que tenía que buscar una mejor excusa para desaparecer de su vista, sin embargo el fingir un dolor estomacal del infierno no fue muy creíble para ella.

Había intentado de todo, le amenacé, llore, rogué, incluso trate de sobornarla para conseguir que se marchara. Ningún método funciono en contra de su irritable curiosidad, hace minutos me di por vencida y estoy parada en mitad de la calle imaginando mi propia sentencia. ¿Cómo me excusare frente a Marks? En cuanto se entere que eh traído a su hermanita menor a un lugar como este me tachara como cretina, ahora que él está de vuelta en la ciudad desde ya semanas lo único que eh notado es que se ha vuelto más sobreprotector con Kayla.

-¿Cuándo empieza esta tontería?-Escuche su bufido, empezaba a desesperase. La cosa era que el show ya había comenzado, yo seguía debatiéndome si el presentarme era la mejor decisión, pero claramente fue una terrible desde el momento en que me decidí venir en busca de Declan. Llevaba dos días sin saber de él, era angustiante, conociéndolo, juraría que algo tuvo que haber surgido para que no esté fastidiando en mi puerta y arruinando mi existencia. Quería saber de él, me frustraba la desesperación por verlo, tendría que estar más que aliviada por su ausencia pero era totalmente lo contrario.-Bien. Iré yo porque al ver te has quedado como estúpida ahí parada y la diversión esta por allá.

En cuanto Kayla dijo lo dicho me congele. No era bueno que me viera con Declan. Me prepare para forzarla si era necesario y subirla de vuelta al auto. Mi sorpresa fue que ya no estaba. Maldición.

Distinguí una pequeña figura pasarse por el alambrado y temí perderla de vista.-¡Kayla espera! ¡No puedes ir a ningún lado sin mí!

Me sumergí en la oscuridad de la construcción agitada, buscándola con la mirada.

-No lo entiendo... dices ver al mundo sin jodida moral ¿Y te encanta frecuentar este lugar? Que.... Contradictorio.

Jordan se interpone en mi camino y freno a tiempo antes de estrellarme contra su dorso.

-Ahora no. No tengo tiempo para tus tonterías muévete.

Mi voz salió enfurruñada y a la defensiva sorprendiendo un poco, pero eso solo abre paso a una sonrisa burlona.

-Vaya, la nena ha venido de malas.

-¿No deberían estar pateándote el trasero?-Masculle esperanzada porque lo ofendiera y me dejara en paz. Kayla era una prioridad ahora.

-Sé que quieres verme competir, pero no soy el único que se gana la vida aquí.-Me guiñó un ojo y respiro profundamente. Un estallido llega a mis oídos y gritos enfurecidos se oyen a nuestras espaldas, me giro de pronto sobresaltada sin creer lo que oía, los gritos de ira y ladridos lastimeros retiemblan por toda la estructura y de inmediato supe que venían de la explanada. Sabía lo que significaba. Un caos se ha armado a causa de los resultados de la carrera, la gente suele ponerse loca, Declan me había platicado sobre ello.

Jordan escucha a mi lado ligeramente sorprendido, se da la vuelta y dispone a empezar a marcharse, yo imito el gesto pero al mismo tiempo doy un traspié y me enloquezco. La realidad golpea mi sistema y antes de que me detenga a pensar obligo a mis piernas reaccionar y correr como nunca hacia la explanada. Con el corazón en boca, doy un respingo y las suelas de mis zapatos resbalan contra la tierra. Lo único que podía pensar era en Kayla. Kayla estaba ahí en el caos y si de alguna forma salía herida no sería posible soportarlo. No avanzo demasiado y poco después la figura de Jordan interviene en mi camino de nuevo y me toma por los hombros.