capítulo 6.

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Al llegar a casa mi madre barría la sala, miré a mi alrededor y mi padre no estaba, me sentí feliz al saber que el muy maldito no estaba, le besé la frente a mi madre y subí a mi habitación donde me encerré, mi madre subió a mitad de la noche, entró a mi habitación, no había cerrado con seguro porqué sabía que el hijo de puta no estaba en casa, mi madre se sentó a la orilla de mi cama con una pequeña rebanada de pastel con una delgada vela encendida puesta en ella, sonreí y ella comenzó a cantar con voz suave.

- cumpleaños feliz, te deseo a ti, cumpleaños mi bello Diego, cumpleaños feliz. - me cantó con una gran sonrisa en su rostro. - vamos sopla la vela hijo.

Me senté y sople la vela, mi madre me besó la sien y acarició mi espalda, sentía un nudo en la garganta, tenía tantas ganas de llorar, mi madre era tan buena a pesar de todo.

- perdona que no sea un enorme pastel Diego pero fue para lo que me alcanzó, sabes que no estamos teniendo muchos ingresos. - me dijo en tono bajo casi triste.
- no te preocupes mamá, me conformo con esto, nisiquiera me acordaba de que era mi cumpleaños. - le respondí sonriendo.
- ¿sabes que te amo verdad?. - me dijo acariciando mi mejilla.
- Sí mamá, lo sé... - le respondí.
- tu padre es muy cascarrabias y...
- no lo menciones por favor, mejor comamos esta rebanada de pastel y dormimos juntos esta noche y así ese sería otro regalo tuyo, ¿que te parece?. - le dije sonriendo.
- claro que sí hijo, mirate ya tienes 17 años, tengo un hijo muy guapo y muy bueno, nunca pensé que llegarías a ser tan guapo. - me dijo mientras comiamos la revanada de pastel.
- soy guapo porque soy igual a ti mamá. - le respondí.
- así es hijo, tienes mi nariz perfilada, mis ojos azules, mi cabello negro, mi color de piel, eres igual a mi. - me dijo detallandome.
- no sabes lo feliz que me hace que toda mi anatomía sea igual que la tuya, me hace feliz no tener nada de ese... maldito. - le dije con desprecio.
- Diego es tu padre, no lo maldigas por favor.
- pues no actúa como uno. - le dije.

Esa noche todo estuvo tan calmado, creo que fue el mejor cumpleaños que había tenido en todo lo que llevaba de vida recorrida.

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