(Por favor leer la nota del final, y lo más importante, responder a las preguntas del final de la nota, por favor)
*Narra Marry*
-PIIIIIIIIIIIIIIIIIII.-Me despertó una horrible bocina justo en mi oído, provocando que mi hermosa cara besara el suelo.
-¿Pero qué mierda?-Me levanté como pude y vi a Hayes, riéndose, mientras mi prima lo besaba.-¡VAIS A MORIR!.-Les grité y no tardaron ni cinco segundo en desaparecer.
-Buenos días princesa.-Apareció Nash por la puerta.-Ya veo que has tenido un bonito despertar.
-Mira Nash, tengo muchas ganas de esterilizar a un Grier, así que hazte un favor, y no me toques las narices, o te castro, y sabes que lo haré.-le amenacé con mi bate, ¿de donde lo había sacado? Ni idea, pero siempre estaba cuando lo necesitaba.
-Vale, vale, tranquila, mis pelotas no tienen la culpa.
-¡Hey Tío! ¿Aún estás en pijama?-Se lanzó Cristian sobre él.-Hoy es la exhibición de animadoras, y mi chica participa, además seguro que te tiras a alguna, que ya te hace falta.-Dijo mi hermano, siendo tan él.
-¿Quieres venir?-Dijo el castaño mirándome.
-¿Yo? ¿En una exhibición de animadoras? Gracias, pero soy alérgica a la silicona.-Mi hermano iba a interrumpirme, pero me adelanté.-A excepción de tu novia, es la única que me cae bien.
-Vamos, será divertido.-Repitió el oji-azul.-Y necesitas distraerte un poco. Shawn...
-Estoy bien, llevaos a Cris y a Hayes, yo me quedaré con los pequeños.
Al final asintieron y se marcharon, menos mal que no tuve que dar muchas excusas.
Después de dos interminables horas persiguiendo por toda la casa a las fieras, más conocidas como niños, decidieron ir al parque, lo cual no me molestaba, ya que así correrían a sus anchas y yo podría descansar.
Pero me equivoqué,en menos de diez minutos se me habían perdido.
Estoy muerta.
*Narra Nash*
Después de que casi cinco animadoras se me echaran al cuello pidiéndome sexo, decidí salir de ahí, cuando de repente dos enanos se me echaron encima.
-¿Que hacéis aquí pequeños?-Sí, eran Sky y José, busqué por todos lados a Mary pero no la veía.
-Jugamos al escondite, solo que Mary no lo sabe.-Soltaron ambos mientras reían.
-Eso está muy mal, llevarme hasta donde os habéis escapado.
Una vez allí, vi a Mary, Alba, Toni, Cameron, Gilinsky y a los niñeros, buscando como locos a los pequeños, no pude evitar reírme, con lo que se dieron cuenta de mi presencia y de la de los dos mini monstruos que tenía a los lados.
-¡¿TENÍAS TÚ A LOS DOS Y NO ME HAS AVISADO?! ¡¿SABES EL MIEDO QUE HE PASADO?!-Se me lanzó Mary.
-¡ESO COÑO, QUE ESTO DE CORRER PARA NADA NO MOLA!.-Dijo Toni.
-¡LA PRÓXIMA VEZ QUE PASE ESTO, TE METERÉ UN PALO POR EL CULO, Y TE VA A SALIR POR LA BOCA!.-Esta vez habló Alba, siendo tan amable como siempre. Los demás aún estaban cogiendo aire.
-No es mi culpa, los que querían jugar al escondite era ellos, los señalé pero ya no estaban.-¿Donde se han metido?
-Bien venido a mi mundo.-Dijo Mary.-Estos niños tienen un mal concepto de lo que es jugar al escondite.
Tras estar más de media hora buscando a los niños, fuimos a tomar un helado, los mini monstruos se habían escondido debajo del tobogán.
De camino a la exhibición... sí, convencí a Mary, ¿Cómo? Fue fácil, solo tuve que pagar todos los helados; bueno a lo que íbamos, mientras íbamos a ver a todas esas sexys animadoras, Alba empujó a Toni contra un camión, en marcha, para perseguir a un gatito, el cual adoptó; pero ese bicho tenía muy malas pulgas, solo le caía bien ella, porque a cualquiera que se le acercara le arañaba, y si no, que me pregunten a mi, maldito gato, y parecía bueno.
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Una marginada más...
Fanfiction¿Qué pasa cuando una chica nueva y marginada, entra en un instituto lleno de niñas pijas y de chicos que creen ser dioses? Que explota una bomba de relojería. Mary una chica de 16 años, Española, se tiene que mudar a Londres, por el trabajo de sus...