Looking For An Adventure

Capítulo 31: Vino, galletas y bruja al horno

El grito de Luna despertó a Holly, la rubia miró a su amiga y lanzó una risotada al verla hecha una niña de nuevo.

-Hasta tienes trencitas!- dijo entre risas y Luna bufo.

-Tú tampoco estas hermosa- dijo y Holly dejó de reír para mirarse, llevaba puesto un jardinero y tenía el pelo rapado como hombre, soltó un grito ante esto último -Siempre supe que te quedarías calva- Luna comenzó a burlarse de su amiga y esta la golpeó.

-Cierra la boca, hay que caminar- dijo con fastidio Holly para comenzar a adentrarse en el bosque.

-Sabes a dónde vamos?- le pregunto Luna moviendo su vestido cuando estuvo a su lado.

-No, pero en el cuento de Hansel y Gretel ellos encuentran la casa por mera suerte así que...-

-Hay que caminar- término de decir Luna soltando un suspiro -Gracias- la rubia la miró sin entender -Por salvarme-

-Tú hubieras hecho lo mismo por mí- le dijo con una sonrisa y Luna desvío la vista.

-No cuando peleé con la quimera- dijo en susurros y Holly se detuvo quedando detrás de ella, la pelinegra se dio la vuelta y la miro -Yo enserio lo siento-

-Ya me lo has dicho Luna, ya te he perdonado, no fue tu culpa- le dijo apoyando una mano en su hombro -Tú tienes un pésimo autoestima y cuando te sube el ego actúas como una idiota y cometes estupideces- le dijo riendo y la pelinegra rodó los ojos.

-Igual que tu- le dijo y Holly río mientras caminaba de espaldas para poder mirar a la pelinegra.

-Te equívocas, yo siempre tengo el ego al máximo, nací para triunfar cariño- dijo con una media sonrisa.

-Y por eso te comportas como idiota y haces estupideces, pero nadie lo nota porque eso normal en ti?- preguntó Luna con una sonrisa.

-Exacto!- le dijo y cuando se giró tropezó con una raíz y cayó de cara al suelo -Este es un claro ejemplo- su voz se escuchó amortiguada debido a que tenía toda la cabeza metida en el barro, Luna río con ganas y cuando levantó la cabeza vio la casa de la bruja.

-Mira, tu estupidez nos fue de ayuda!- le grito y Holly sonrió aún con la cara llena de barro haciendo que sus blancos dientes resaltaran.

-Ves! Cuando yo soy estúpida pasan cosas buenas, cuando tú eres estúpida el mundo pierde el equilibrio- dijo y la pelinegra rodó los ojos mientras reía, caminaron hasta la casa y cuanto más se acercaban más ganas tenían de morder las paredes.

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-Sólo un bocado- susurro Holly estirando su brazo hacia una enorme paleta que había en el jardín.

-No comas nada- le advirtió Luna golpeándole la mano y la rubia rodó los ojos con fastidio.

-Me muero de hambre Luna!- le dijo y esta soltó un suspiro, se corrió y dejó que su amiga devorara la paleta.

-Pruébalo!- le insistió limpiándose la crema de la boca con la manga de su remera -Esta delicioso! Además me traje algo muy bueno del cuento anterior- dijo Holly sacando una botella de vino de su moral.

-De dónde lo sacaste?- preguntó Luna con una gran sonrisa -Crees que nos hará mal por ser niños?-

-Se lo robe a Artemisa y no tengo la menor idea, pero es delicioso así que no me importa- dijo riendo mientras servía la dulce bebida en el cáliz que le había robado al rey Arturo.

Comieron y bebieron hasta que no pudieron más y el sueño las invadió, ambas cayeron dormidas sin darse cuenta que la bruja esperaba en un escondite para poder atraparlas.