Looking For An Adventure

Capítulo 9: Quien es Holly?

-Debe ser una broma!- grito Luna mirando con enojo el poste frente a ella, el cual tenía miles de carteles en diferentes direcciones que señalaban diferentes caminos -Maldito país de las maravillas!- dijo con furia pateando el piso.

Cuando había despertado estaba dentro de una habitación y para poder salir había tenido que tomarse el líquido de la botella para encoger y luego al salir comer el pastel para crecer.

-Estas pérdida Alicia?- dijo alguien con voz juguetona y Luna levantó la cabeza, acostado en un árbol se encontraba el gato sonriente

-Sí, dónde está el sombrerero?- dijo con impaciencia golpeando el suelo con el pie, sabía que Holly estaría con él ya que era su personaje favorito de todo el cuento.

-Es el camino de la derecha- dijo señalando la izquierda -O el de la izquierda- señalo la derecha y comenzó a desvanecerse mientras reía, pero antes que lograra desvanecerse por completo Luna lo tomó del cuello con ambas manos.

-No te iras a ningún lado- dijo sonriendo con malicia y por primera vez en su vida el gato sonriente dejó de sonreír.

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-Cumpleaños feliz!- dijo la liebre mientras servía el té.

-A ti, a mí, a tú!- canturreo Holly divertida mientras aceptaba la taza que la horrible liebre le ofrecía.

-Holly?- dijo alguien y la rubia, ahora pelirroja, levantó la cabeza sonriendo al ver a su amiga con el vestido celeste y el cabello rubio de Alicia.

-Hey Luna! Qué tal te va? Yo estoy bien, mis amigos son divertidos! Quieres te?- dijo rápidamente y Luna frunció el ceño acercándose a su amiga.

-Qué te pasa Holly?- susurro y la pelirroja se sacó la galera para poder acomodarse el cabello.

-Es difícil explicarlo pero creó que mientras más tiempo permanecemos dentro de un cuento, más nos volvemos parte de él- explicó Holly mirando a su amiga con preocupación volviendo a ponerse la galera, Luna trago saliva -Tardaste un día en venir aquí ósea que hemos estado aquí más de veinticuatro horas y mírame- levantó los brazos y tomó a Luna de los brazos sacudiéndola -Luna, no puedo parar de tomar el té y yo odio el té! escuchó las voces en mi cabeza, estoy volviéndome loca- susurro y Luna miró con preocupación a su amiga.

-Saldremos de aquí, no te preocupes- le dijo apretando los brazos de Holly para calmarla -Ahora piensa, qué tenemos que hacer en este cuento?- Holly se quedó en silencio y luego sonrió de oreja a oreja, tomó a su amiga de la mano y comenzó a arrastrarla por el bosque -Holly! Adónde vamos?!-

-Al laberinto de la Reina de Corazones! Es hermoso! Hasta te hará perder la cabeza!- grito sin dejar de correr mientras reía a carcajadas por su propio chiste.

Luna estaba sería, por alguna razón el cuento no le afectaba a ella, pero a Holly si y si no se apuraban Luna temía perder a su amiga por completo.

-Cuidado- le advirtió Holly -Si tocas las paredes del laberinto te atraparan y morirás allí- dijo sin importancia como si atravesar un laberinto maldito custodiado por una reina a la cual le agradaban las decapitaciones fuese un simple día de campo.

-Muy bien, hay que entrar- dijo Luna y tomando de la mano a Holly comenzó a caminar entre los interminables pasadizos del laberinto.

-Luna- dijo Holly rompiendo el silencio que había reinado desde que se habían adentrado en el laberinto, la rubia miró a su amiga incitándole a continuar -Si algo me pasa tendrás que seguir sin mí-

-No voy a hacer eso Holly- contesto con decisión.

-Si pierdo la cabeza Luna, si me vuelvo parte del cuento no creó que pueda salir del libro, tendrás que dejarme atrás- Holly caminaba derecha sin mirar a Luna, sabía que cuando llegara el momento debería empujar a su amiga por el portal si ella no quería irse.

-Ya has perdido la cabeza hace tiempo Holly, por eso me volví tu amiga- dijo Luna riendo bajo -Y si tienes que quedarte yo también lo haré, podría acostumbrarme a vivir aquí- Holly miró de reojo a su amiga y sonrió, Luna era y siempre sería su familia.

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-Hey! Necesitan ayuda?- As y Trébol se dieron vuelta encontrándose a una niña de cabello rubio y ojos celestes con un vestido del mismo color que les sonreía y a una mujer de cabello naranja con una extraña chaqueta marrón de pianista, una enorme galera y un moño.

-Nadie puede ayudarnos- sollozo As.

-La reina nos cortara la cabeza- agregó Trébol entre lágrimas -Nos equivocamos de rosas, en vez de rojas plantamos blancas!-

-No se preocupen- dijo la niña con una amigable sonrisa -Sólo hay que pintar las rosas blancas de rojo!- las cartas se miraron la una a la otra y sonrieron ante la magnífica idea de la niña.

-Gracias!-dijo As.

-Yo traeré la pintura-agrego Trébol y salió corriendo hacia el castillo.

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Luna y Holly estuvieron horas ayudando a pintar las rosas de rojo, cada tanto Luna miraba a Holly y le hacía alguna pregunta para saber si su amiga seguía estando allí.

-Entonces Holly, qué vas a llevarte de el país de las maravillas?- preguntó mientras terminaba de pintar una rosa.

-Quién es Holly?- respondió el sombrerero con una sonrisa y Luna miró con terror a su amiga -Alicia, quita esa cara parece que has visto a la reina de corazones!- grito riendo pero Luna no río.

-CÓMO SE ATREVEN!!!- un grito a lo lejos hizo que ambos se voltearán, la reina se acercaba junto con sus soldados listos para matarlos -PERDERAN LA CABEZA!!!-

-Holly, hay que irnos!- grito Luna y comenzó a arrastrar a Holly por el laberinto.

-Alicia quién es Holly?- preguntó cuándo se detuvieron en una bifurcación del camino.

-Era mi mejor amiga y voy a volver a verla pronto- dijo arrastrando a el sombrero por el camino de la derecha.

Luna sentía los gritos de la reina acercarse, tenía miedo, no de ella sino del estado de Holly, siguió corriendo arrastrando al sombrerero mientras este decía incoherencias.

-Qué es eso?- preguntó señalando algo al final de uno de los pasillos, Luna freno en secó y retrocedió mirando en la dirección que el sombrerero señalaba.

-El portal!- Luna corrió hacia el pero se detuvo al ver que Holly no la seguía -Ven, hay que irnos!-

-No quiero irme Alicia!- le grito el sombrerero y Luna la tomó de la cara y la miró directo a los ojos.

-Holly, yo sé que tu estas allí dentro, hay que irnos- le dijo y un brillo de coherencia apareció en sus ojos verdes.

-Luna?- pregunto con una sonrisa que su amiga devolvió.

-Lo siento- Luna empujó a su amiga dentro y le dio una última mirada a la reina, le sonrió y levantando el dedo medio, salto dentro del portal esperando que al llegar al otro lado su amiga hubiera recobrado la memoria.