La pesadilla de Miles

Una familia

Cuando Miles despertó estaban cerca de su destino.

No había pensado que la sola presencia de su amiga pudiera calmarlo tanto.

Ya no se sentía solo, y ahora si tenía un plan firme.

Por primera vez en todos esos meses, se sentía a salvo.

Ya no había tanto miedo, y sentía que podría enfrentarlo todo y cumplir la promesa que le hizo a Waylon.

Por un momento pensó que Claire no lo ayudaría, y que estaría solo y teniendo que esconderse siempre.

Y agradecía a todas las deidades que le ayudaran, pero lo que más pedía era poder mantener a salvo a ese pequeño que ya había perdido todo.

Ahora que tenía el tiempo pensó en Miles.

Que haría con él.

Podía darlo en adopción, para mantenerlo a salvo...

O dejarlo con sus padres.

Tal vez Claire podría cuidarlo en su nombre.

No...eso no es lo que Waylon quería.

Entonces pensó en Eddie y lo que siempre decía...

Eddie Gluskin quería la familia perfecta, una para cuidar a sus hijos y mantenerlos a salvo.

Durante el tiempo que vivió con ellos en el asilo se dio cuenta que el hombre no era del todo malo, y cuidaba bastante bien a Waylon.

Tal vez eso era lo que él debía ofrecer a su sobrino.

Trato de recordar su infancia, y pensó en su madre.

Aquellos dulces tiempos donde ella cuidaba de el con tanto amor y cariño....

Sí, eso era lo que Waylon haría si estuviera vivo.

Pero ya tendría tiempo de arreglar todo, mientras le ofrecería lo que hasta ahora le había dado al niño.

Alimento y unos brazos donde dormir.

Justo como ahora lo hacía.

Y eso le causaba una felicidad que el jamás pensó sentir.

-te lo prometo Miles tu serás muy feliz...-

Claire quien aún manejaba sonrió a su amigo, y vio al pequeño.

Ella también hizo una silenciosa promesa.

*yo también te protegeré Miles...a ambos los protegeré.*