La pesadilla de Miles

Frente a él

Al fin Walker se había quitado de la entrada de la habitación.

Miles aprovecho para correr y esconderse para esperar a que su sobrino volviera.

Se había visto tentado por apartar a junior de Trager, pero no podía ponerlo en peligro.

Pero cuando escucho que solo irían a cenar y volverían, planeo esperarlos dentro.

La habitación donde el pequeño había estado los últimos días era bastante cómoda, a diferencia de las imágenes que su mente había creado.

Esperaba ver una jaula, un calabozo o cualquier cosa.

Pero esa habitación sencilla pero cálida era más de lo que podía esperar.

El pequeño estaba sano y eso alivio mucho su corazón, pero ahora debía sacarlo del lugar.

Cuando volvió a escuchar los pasos a fuera de la habitación, se escondió en el closet y con su pistola en mano.

-entonces cuando llegaran mis padres...-

-tu madre ya ha llegado, pero queremos que estén ambos para que sea una mejor reunión, no te parece...-

-pero poder verlos pronto.-

-en cuanto tus padres se reúnan Andrew vendrá por ti para que puedas verlos-

El pequeño sonrió a su amigo, y se acomodó en su cama para dormir.

Trager se fue de la habitación para ver a Waylon, tenía que comenzar los preparativos para la llegada de Eddie.

Cuando se alejó lo suficiente, Miles salió del armario.

Junior sonrió al ver a su tío, quiso gritar de felicidad pero al ver la seña que su tío le hacía guardo silencio.

-estas bien Junior-

-tío... ¿Cómo llegaste aquí?...-

-ven pequeño tenemos que salir-

-pero mis padres, ellos le pidieron a Trager que me trajera para verlos-

-no mi amigo, Trager miente....tus padres si están aquí, pero no porque se los pidieran a él...ese hombre es malo y tu estas en peligro-

El menor miro los ojos de su tío, él nunca le había mentido y ahora entendía algunas cosas.

Así que tomo a su tío de su mano para poder salir de ahí.

Miles fue hasta la puerta, la abrió...

Pero una enorme mano tomándolo por el cuello lo dejo paralizado, tanto físico como mentalmente.

Chris Walker, estaba frente a él...

Recordó como el tipo gustaba de arrancar miembros y cabezas...

Vio a su sobrino...

Y deseo que la pistola no se hubiera caído de su mano.

Por dios que iba a morir...