C17.

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(Este capítulo es súper intenso así que lean bajo su propio riesgo.)

- ¿Porqué me traes aquí? - intente no sonar peda pero creo que fracase en el intento.

- No iba a dejar que te hiciera algo ese idiota. - dijo irritado.

- Bueno, pero no tenías porque traerme aquí. - le alegue.

- Ya tranquila, es súper tarde.

Maldita sea, se me había olvidado checar mi celular para ver la hora, pero me daba muchísima flojera sacarlo.

- ¿Qué horas son? - le pregunte.

- Las 3:37 am. - me dijo leyendo la hora en su celular.

Wow si que ya era muy muy tarde con razón dice que estoy peda, hasta perdí la noción del tiempo. Me sentía incómoda estando aquí sentada en su cama y el parado.

Alan se salió y me dejo sola en el cuarto, me pare para apagar la luz y sólo me quite mis tacones y me acosté, la verdad no me di cuenta a que hora me quede dormida.

Escuche una llave abriendo la puerta, me sentí rapidísimo, sigo medio peda que ni me acordaba en donde estoy, ah si la casa de Alan. Ahora si revise mi celular y tenía como mil mensajes de Laura.. Laura OMG no me acorde de ella después de que me dejo sola. Todos sus mensajes eran hace más de dos horas. Son las 4:15 am según mi celular.

Alan entró a el cuatro.

- ¿Te desperté? - pregunto cerrando la puerta.

- ¿Tu qué crees? - le conteste sarcásticamente con otra pregunta. Súper maduro de mi parte, pero ¿quien es maduro con muchísimo alcohol encima?

- Lo lamento.

- ¿Ya se fueron todos? - mi voz todavía era medio arrastrada.

- Ya, se acaban de terminar de ir. - oh no, ¿y Laura?

- ¿Y Laura o Max? - le pregunte súper nerviosa.

- Max se fue hace mucho rato con una de su salón y Laura terminó pedisima que esta dormida en la sala, es la única que esta allá abajo.

Menos mal que Laura no me había dejado sola. Si no yo creo que la madreaba. Fuera de broma.

- Bueno te dejo para que te duermas. - se dirigió hacia la puerta.

- NO, - prácticamente grite, que oso. - quiero decir no, no te vallas.

Esto esta mal, ¿cómo que porque le estoy suplicando para que se quede? En verdad debo de seguir pedisima.

- ¿Quieres que me quede? - pregunto muy asombrado. De echo hasta yo estaba asombrada ósea no se porque le dije eso.

- Si, quédate. - se acerco a la cama y se acostó del lado libre.

- Buenas noches, Nina. - me dijo dándome la espalda.

- No tengo sueño. - le dije.

- Yo tampoco. - admitió el poniéndose boca arriba.

Me senté en la cama y en un momento de no pensar ni razonar me subí a el poniendo mis piernas una a cada lado de su cuerpo largó.

- ¿Qué haces? - me acerque a el cuando pregunto.

Creo que sigo peda o es el hecho de que el esta muy guapo, es de los más guapos que eh llegado a ver en mi vida. Su piel blanca se veía perfecta en la obscuridad con sólo la luz de la luna que entraba por su ventana que dejaba que lo viera. Ya estaba súper cerca mi boca de la de el, sus labios rosados estaban entre abiertos. Sus ojos verdes profundo estaban esperando una respuesta.

- No preguntes. - le dije.

Junte mis labios a los de el, le agarré su cabello castaño claro casi rubio entrelazando mis dedos en sus mechones al momento que nos besábamos despacio. Sus manos estaban agarrando mis piernas y yo estaba tipo como incada sobre su cuerpo perfecto. Empezamos a besarnos más fuerte y en un segundo cambiamos el orden de las cosas, el ya estaba arriba de mi recargando su peso sobre su brazo derecho mientras yo estaba acostada totalmente en la cama con una pierna alrededor de su torso.

No decíamos palabra alguna, no había oportunidad y aunque lo hubiera el sabor a menta de su boca hacia que no quisiera dejar de besarlo jamás, aparte besa súper bien..

Me desabrocho el pantalón y sus labios empezaron a bajar hacia mi cuello haciendo que mi piel se me pusiera de gallina con el sentir de su contacto, sus labios seguían bajando por mi cuerpo hasta que llegaron a mi abdomen. Me besaba el abdomen muy pero muy excitantemente, sentía como mi cuerpo esta súper caliente y ya no podía detener esto, siento que ya es más que yo, en mi vida había sentido algo como esto, se siente tan bien.

Regreso a mis labios y cada vez nos besábamos más apasionadamente, su lengua jugaba con la mía y el me mordía un labios y luego yo uno a el. Me quito mis pantalones y yo le saque su camisa dejando su torso súper bien formado desnudo.

Sus manos bajaron a mi área pélvica y después al área de mis labios de abajo, separo mis piernas y me estaba tocando ahí abajo por encima de mi calzón sin dejar de besarme, me sentía ya súper mojada y muy excitada que no quería que esta sensación se fuera nunca.

Movió la parte de abajo de mi calzón y empezó a mover sus dedos por mi piel jugando con mis labios de ahí abajo. Como pude le saque el pantalón dejándolo en bóxers, se veían súper apretados y se veía claramente excitado, cada que abría mis ojos encontraba sus ojos profundos y hermosos viéndome, su rostro se veía sudado y creo que yo también lo estaba, digo siento muchísimo calor en mi, tanto que es difícil explicar, siento como que me estoy quemando pero es súper placentero este sentimiento.

Separo aún más mis piernas y dejo de jugar con mis labios de ahí abajo, quito su mano de esa zona y la uso para separar aún más mis piernas, no entiendo como es que estoy siendo tan flexible, y entonces introdujo uno de sus dedos en mi, mi vagina, esto era ya algo súper diferente, se sentía tan placentero que empece a arquearme del placer haciéndome también gemir ligeramente. Sacaba y volvía a meter su dedo mientras me besaba el cuello. Notablemente estoy sumamente mojada, no me explico como es que se puede estar en un nivel como este de placer y como es que puedo estar tan mojada. Dejo de besarme, hizo su torso para atrás y con sus dos manos me quito mi calzón entonces inclino su cabeza en esa zona y me beso todo mi abdomen bajo y cada vez bajaba más hasta que sus labios llegaron a mis labios de ahí abajo, quería llorar del placer o gritar o que se yo, esto se siente súper bien quisiera estar así toda mi vida, con sus dos manos volvió a abrir mis piernas dejando súper expuesta mi zona de ahí, siguió besando y mordiendo ligeramente los labios de esa zona, hasta que introdujo su lengua moviéndola dentro de mi.

- Alan. - gemí al tiempo en que me arqueaba del placer.

Agarre su cabeza y la aplaste contra mi para que su siguiera moviendo su lengua provocándome el mayor placer de mi vida entera, esto ya no tiene nombre.

"Te están haciendo sexo oral, Nina." Me dijo mi conciencia.

Si es cierto esto es sexo oral, pero soy virgen ¿o ya no? ¿Si? Bueno yo digo que sí.. O no se.

Alzo su cabeza y tenía la respiración súper fuerte y agitada al igual que yo, no entiendo porque deje que pasara esto, es mi primera experiencia sexual pero se sintió muy bien.

- ¿Tienes baño? - le pregunte súper agitada el solamente se me quedaba viendo a los ojos.

Su mano apunto hacia una puerta alado de su mesa de noche. Me pare y agarre mis jeans y mi calzón metiéndome rápidamente a el baño.

OMG no se que hice, ósea si se pero wow que padre se sintió.

Prendí la luz y cuando me vi al espejo me di cuenta que estaba súper despeinada, tenía los ojos rojos cristalinos, mis labios ardían en un rojo intenso y yo estaba súper sudada.

Esto no estuvo bien, ¿el me gusta? ¿O no? Digo cuando lo conocí se me hizo súper lindo pero esta es la segunda vez que lo veo.

Alan. Era todo lo que estaba en mi mente en estos momentos.

Alan.

Alan.

Alan.

(Dije que ya sería intenso así que perdón si perturbe a alguien. Comenten y voten. Xoxo)

Totalmente tuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora