Totalmente tu

C20.

- ¿En qué tanto piensas? - se puso en frente de mi.

- Nada. - mentí.

En realidad no quiero que vea lo sacada de onda que me dejo la escena que hizo Alan como un novio celoso que esta siendo engañado.

- No has querido hablar desde que nos venimos a sentar aquí.

- No es que no quiera, tu ni si quiera has empezado una conversación. - me defendí. - Mejor deja de decir si hablo o no y vamos a meternos.

- Esa es la Nina que me gusta. - sonrió.

Me ayudo a pararme de la arena mojada con una mano y con la otra agarro su tabla de surf, maldición ya tenía todo el calzón del bikini mojado.

Caminamos hasta donde el agua llegaba a nuestros pies. André me cargo sin avísame con un solo brazo, que fuerte, en el otro traía su tabla.

¿Que le pasa?

- Bajame, niño. - le daba patadas y manotazos pero el sólo se reía.

Me soltó y yo me caí mojándome toda, así toda, mi cabello estaba totalmente mojado, genial.

- No pesas nada. - río.

- Quisieras. - le di un puñetazo en el brazo pero sólo se siguió riendo.

- Y no tienes nada de fuerza. - se río más fuerte al momento en que agarraba mi delgado y débil brazo.

- Ash, eres odioso. - intente sonar enojada pero se que no lo logre porque rompí en risas.

Los dos reímos como si fuéramos una pareja. ¿Qué es lo que esta pasando contigo, Nina?

De verdad esto está rarísimo, me siento cada vez peor conmigo misma, se supone que todo lo que hago es mi secreto pero algún día explotare de verdad me siento súper zorra. En unos días acabara la Semana Santa y sólo en estas dos semanas bese a Eduardo, Alan, André.. Son 3 pero lo normal o lo que yo considero normal es no besar a más de 3 en un año, tal vez este en un error y mi moral quiera ser muy santa pero yo no lo sigo.

Me ayudo subirme en el centro de su tabla, el estaba parado en el agua sosteniendo que la tabla y yo nos fuéramos por las olas del mar.

- Hoy te ves hermosa. - Aww se puso rojo. ¿Aww? ¡Nina, concentrare! ¿Qué carajos estas pensando?

- ¿Hoy? Ósea que ¿ayer me veía fea? - dijo bromeando para que se le quitará lo rojo.

- A diario te vez hermosa. - sonrió y se puso más rojo, mi plan falló.

El sol estaba pegando durisimo y los hombros y cara de André ardían en rojo, parecía camarón o un tomate.

- ¿Me veo roja? - pregunte.

- Como un tomate. - sonrió.

- Apuesto a que tu te vez más rojo que yo. - señale a su hombro y el volteo a verlo.

- No, no, tu estas aún más roja que esto.

OMG. Debe de estar bromeando, digo el esta rojisimo, entonces ¿qué? ¿Estoy color súper mega rojo?

- Ash, me chocas. - le di una patada al mar para que el se mojará, oh si esto si me resulto.

- Tu más. - dijo secándose su cara de camarón con su manota.

Seguimos platicando muy tranquilamente, ya iba a ser la puesta de sol y yo moría de hambre.

- Me estoy muriendo, literal, muriendo de hambre. ¿Tu no? - wow que exagerada soné.