(Esto es un poco explícito, si no quieren no lo lean. Tiene contenido sexual.)
*3 Semanas antes de Semana Santa en la alberca en casa de André a la media noche*
- Vamos, Nina, no seas penosa. - dijo André desde la alberca con una cerveza en su mano.
Yo estaba enrollada como taco en mi toalla rosa y debajo traía un bikini morado que hace que se me vean más voluptuosas mis boobs.
Yo se que esto está totalmente mal, sólo le daré más alas, pero no puedo evitarlo, el es muy guapo y siempre hace su mayor esfuerzo por estar cerca de mi o por cuidarme, yo soy la que no lo deja entrar a mi vida.
Que va.. Que pase lo que tenga que pasar, al fin no hay testigos.
- Ya, volteate. - le dije entre risas.
El hizo ademán de que se tapaba los ojos con las manos, pero en realidad se que no se los tapaba de verdad.
Deje que la toalla rosa descendiera hasta llegar al piso, se que lo hice muy seductivamente pero equis estábamos solos.
- Estas fantástica, - dijo André boquiabierto - no tengas pena. - dijo acercándose a la orilla para dejar su cerveza en el piso del ruedo de la alberca.
Corrí y me aventé a la alberca provocando un fuerte sonido del agua. Saque mi cabeza y André estaba enfrente de mi con una mirada llena de lujuria.
Puso sus brazos alrededor de mi cintura pegando mi cuerpo a el de el formando una silueta perfecta, me alzo y yo enrolle mis piernas alrededor de su torso desnudo.
- Me encantas. - murmuro.
Nuestros labios se aproximaron peligrosamente hasta que finalmente sus labios rozaron los míos, el me apretó más y yo enlace mis dedos alrededor de su cabello mojado, sus manos subían y bajaban por mi espalda a mis muslos. Los besos empezaron dulces, el sentir su calor me hacia sentirme totalmente cómoda con el, en realidad es un momento muy bueno. Sus labios se movían al par con los míos succionando mi labio inferior y luego introdujo su lengua y yo la mordí ligeramente con mis dientes. Hice mi cabeza para atrás y me empezó a besar el cuello, estaba ya tan prendida que los besos se volvieron mas salvajes, el me estaba cargando, sus grandes manos estaban, en parte, en mis pompis y muslos y yo estaba agarrada de su cabello y mis piernas enroscadas en su torso.
Me levanto más alto y empezó a besar mis boobs, yo solo cerraba los ojos para intentar no pegar un grito de placer o algo así.
- Eres increíble. - me dijo soltándome. - Ven, vamos adentro empieza a hacer mucho calor. - puso énfasis en la palabra calor, por supuesto sabía a que se refería.
Me ayudo a salir de la alberca y cuando ya estaba totalmente de pie afuera hizo mi cabello a un lado y empezó a besar mi nuca y mis hombros mojados.
Nos metimos a su cuarto, el cerro la puerta con seguro aunque ya sabíamos que no había nadie que pudiera entrar o escuchar algo igual le puso seguro.
Yo estaba parada enfrente de el entonces me pego contra la pared y me cargo de mis pompis con sus grandes manos hasta que mis piernas quedaron otra vez enroscadas en su torso aún desnudo y mojado.
Me volvió a besar peor esta vez los besos subían de tono y la verdad es que me agradaba mucho la sensación que sentía en este momento.
Abandonamos la pared para que el me recostara gentilmente en la grande cama café con blanco, el se puso en medio de mis piernas abiertas y encogidas, sus manos pasaban por mis piernas sin dejar de besarme cuando me di cuenta que me empezaba a quitar el calzón del bikini, no esto si que ya no.
- ¡ANDRÉ! - grite y el se hizo para atrás.
- ¿Qué pasa? - me pregunto visiblemente sacado de onda.
Pasa que soy virgen y no quiero dejar de serlo en la noche del aniversario de mis papas en el cual se suponía que yo me quedaría en la casa de Joyce pero ella me cubrió para que me viniera contigo porque tus papas no están por que fueron el fin de semana a Guadalajara, eso pasa.
- Soy virgen. - dije apenas audible.
- Oh, ya entiendo. - dijo tranquilamente.
Nos sentamos en la cama por un momento.
- No te preocupes, no te voy a obligar a nada. - me agarro la mano y me dio un beso en el cabello aún húmedo.
- Espero que me entiendas.
- Claro que sí - dijo - es sólo que pensé que lo habías hecho con Mariano.
- Por supuesto que NO. - dije claramente, duramente y fuertemente enfatizando no.
- Ok, tranquila no te presiono, sólo que lo supuse. - dijo y yo no conteste visiblemente enojada. - ¿Quieres hacer algo más? - dijo ahora si sin ni un rastro de doble sentido en sus palabras.
- Tengo que llegar a la casa de Joyce así que ¿me podrías llevar? Por favor.
- Claro, a donde quieras.
Mientras íbamos en el camino yo ya vestida normal acordamos no decir nada de esto nunca a nadie, acordamos que íbamos a decir que sólo platicamos ante todos, la única que lo sabría sería Joyce, obviamente porque es mi mejor amiga y ella fue la que me cubrió para poder venir.
(Se acabó el contenido sexual.)
*Hoy*
Cuando entramos al bar estaban André con David sentados en una mesa alejada de la barra.
- ¿Qué hay, preciosas? - dijo André parándose rápidamente de su asiento para darme la mano.
- Queremos unos drinks. - dijo Georgia con una sonrisa en su cara.
- ¿No invitaron a Joyce? - pregunto David.
- Claro que sí, pero esta ocupada. - dijo Georgia.
Nos sentamos todos en la mesa alta con los bancos altos.
- Bueno, como sea. ¿Quieren jugar? - pregunto André.
- ¡Oh si! - dijo David aplaudiendo en el aire, Ruth y Georgia se le unieron rápidamente yo solo voltee a ver a André súper sería.
- ¿Qué jugaremos? - pregunto Ruth visiblemente emocionada. Pf Ruth siempre se emociona con todos los juegos.
- Juegaremos yo nunca. - dijo André con una sonrisa como de malo. Se veía súper guapo con sus dientes perfectos y sus labios rosas que hacían una s.. Shit! Nina deja de andar pensando cosas que no.

ESTÁS LEYENDO
Totalmente tu
Teen FictionNina tiene la vida perfecta a los ojos de sus amigos y conocidos, tiene muchos pretendientes de donde ella escogió incorrectamente anteriormente, después de eso solo se concentró en intentar olvidarlo.. Ella pensaba que ya no podría volver a sentirs...