Capitulo 16
Hicieron el camino de vuelta en silencio, cada uno en su caballo y con sus propios pensamientos. Al final se había divertido en el baile, aunque se había sentido bastante desilusionada al ver que Will no era el hombre que ella creía. Siempre había sido muy caballeroso con ella, ¿por qué de pronto se había comportado de esa manera, intentando forzarla? Gracias a dios que Devlin había llegado a tiempo, sino quizás ese hombre la hubiera tomado por la fuerza.
Poco rato después, Shannon ya veía el rancho. ¿De verdad iba a acabar la noche así? ¿Devlin no pensaba decirle nada?
Cuando dejaron sus caballos en el establo, Devlin la acompañó a la puerta de la casa. Ella no quería entrar sin decir nada, pero no estaba segura de qué decir. ¿Le daba las gracias de nuevo? ¿le deseaba buenas noches y se adentraba en la casa? Pero nada de eso pudo salir de su boca, ya que Devlin la tomó por la cintura y la atrajó contra su cuerpo mientras devoraba su boca con ansias. Shannon se agarró de su camisa y se entregó por completo a ese maravilloso beso.
No sabía cuanto tiempo había pasado, pero a Shannon le había parecido muy poco cuando Devlin la soltó y dio un paso atrás.
-Buenas noches - le dijo Devlin mientras bajaba los escalones y se dirigía al cobertizo donde él tenía su habitación.
Shannon entró en la casa y cerró la puerta mientras se apoyaba en ella y lanzaba un gran suspiro. Por dios santo, cada vez que él la besaba su cuerpo se estremecía y su corazón latía a cien por hora.
Se dirigió a su habitación y se acostó mientras seguía pensando en el maravilloso beso.
Al día siguiente, Shannon decidió ir al lago a darse un baño. Hacía ya un tiempo que no se daba ese capricho, pero hoy se lo iba a dar. Llevaba su revolver en el delantal por si Simmons aparecía. Esta vez no le iba a coger desprevenida, se decía mientras salía de la casa en dirección al lago. Se fijo en que Devlin no se encontraba fuera, y se imaginó que estaría dentro de las caballerizas realizando alguna tarea.
Cuando llegó al lago, revisó con la mirada todo a su alrededor cercionándose de que no había nadie por allí que pudiera estar espiándola. Al ver que no había nadie, Shannon se desnudó y se adentró en el agua con un gran suspiro de placer. Por dios santo, cuanto había echado de menos disfrutar de un buen baño en esas aguas.
No sabía cuanto tiempo había estado allí dando brazadas de un lado a otro del lago, pero de pronto empezó a tener frio y se puso de pie mientras se daba la vuelta. Cuando se dirigía a la orilla donde tenía su ropa, vio a Devlin apoyado en un árbol mientras la miraba detenidamente con una sonrisa en el rostro. Al principio ella no supo como reaccionar, pero de pronto se dio cuenta de que el agua solo le cubría hasta la cintura, dejándole los pechos al aire.
-¡Ahhh! - gritó mientras se hundía en el agua para cubrirse los pechos desnudos -. ¡Maldito sinvergüenza! ¿Qué estás haciendo?
Realmente estaba indignada, y muy abochornada por toda esa situación.
-Ummm - dijo Devlin mientras se daba golpecitos en la barbilla con el dedo indice -. Creo que estoy disfrutando de las vistas.
-Eres... eres... - por dios santo, se había sonrojado hasta la raiz del cabello -. Date la vuelta para que pueda salir y...
-¿Por qué devería hacerlo? - le preguntó Devlin con una ceja alzada.
-Porque es lo que un caballero haría - gritó ella indignada.
-¿Y quién ha dicho que yo sea un caballero? - le preguntó con cinismo -. ¿No fuiste tú misma la que dijiste que era un pistolero?
-¡Maldición! - dijo Shannon con furia -. Pero eras un conde antes, por una vez recuerda como era ser caballeroso con una dama.
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Al Otro Lado del Oceano
RomansDespues de sufrir una decepción amorosa, Devlin St. James cuarto conde de Selford, decide dejar su país para labrarse una nueva vida. En lo más recóndito de Texas, Devlin conoce a Shanon, una mujer de armas tomar. Al principio los dos se detestan a...