Capítulo 5

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Hola lectoras, sé que no es el mejor capítulo pero es uno más para por fin adelantar la novela. Estoy de buenas y con tiempo, pueden pedirme que capítulo subir dejando sus comentarios, los unicos que no puedo actualizar ahora son "Escuadron Suicidio", "Problematic Squads" y "Resurrección de Elsa". No olviden votar y comentar, es triste que sólo voten y no comenten, así que se los agradecería mucho.

¡Gracias por leer!

***Elsa***

Después de todo el alboroto, no dude en regresar de nuevo al día siguiente.

Estaba sentada de frente al escritorio de Nicolás, quien estaba reacomodando los archivos sobre aquel peliblanco al que mi confianza perdió después de implantarme miedo.

-Nos da mucho gusto que regreses con nosotros –Nicolás tendió los papeles frente a mí.

Asentí levemente, no tenía ganas de hablar sobre Jack, sobre su captura me encargaría sólo yo y en casos de que llegase a ponerse violento la situación mis agentes serían Tadashi y a una chica a quien le desconozco.

-La otra compañera vendrá en unos días para ayudarle en el caso – Nicolás y yo nos pusimos en pie.

-Claro señor – La curiosidad me invadía – Sólo dígame ¿Qué pasará si le capturan?

-Encerrarlo de por vida, o buscar alguna cura para quitarle sus poderes.

-¿Eso se puede?

-Claro, desde que hay maleantes así, los laboratorios han estado trabajando en ello.

-De acuerdo, yo me ocupo de capturarlo.

-Nuestros agentes entrarán en acción en caso que la situación se ponga difícil.

-Señor – Hice una pausa a éste antes de continuar – Si le vamos a capturar no me gustaría que le lastimaran, sé que ha hecho mal durante muchos años, pero no pienso capturarlo con la violencia, sin lastimarlo por favor.

-Se lo prometemos señorita Arendelle – Nicolás y yo estrechamos la mano.

Ambos salimos de su oficina. En nuestra esperaba estaba el agente Hamada. Tenía unos rasguños rojizos pequeños en su pómulo izquierdo, con puntadas blancas de vendas miniaturas.

-Hemos terminado – Nicolás se dirigió a Hamada – La señorita Elsa hará su trabajo por aparte de nosotros, más tú y nuestra agente quien está en Chicago, serán quienes trabajen con ella, no olviden que deben acompañarla.

-Queda claro Nicolás.

Tadashi me miró con una muy leve sonrisa, se dio vuelta para ir a la salida. Los papeles que llevaba los he puesto en mi bolso y así caminé hacia Tadashi.

Es inevitable pensar en lo que ha de estar pensando Jack sobre mí ahora. Debería poner más seguridad en mi casa y que Anna pasé unos días en la casa de Kristoff, no me gustaría que llegara a ella por culpa mía.

Al salir al estacionamiento, Tadashi sube a una camioneta 4x4 negra. Yo decido subir al asiento del copiloto.

-¿Te encuentras bien? – Me giré cuando Tadashi colocó sus ojos en mí con seriedad – Lamento que las cosas hayan salido mal.

-No pasa nada – Di una bocanada de aire mientras me removí en el asiento – Gracias que llegaste anoche.

-Gracias a tu hermana, acudió a nosotros debido a que tomó la tarjeta que te habían entregado.

Gracias a Anna. Pensé en ella y la dulzura que lleva dentro.

Tadashi arrancó el auto. Las calles eran tranquilas y los movimientos del carro eran fluidos, él chico sabe conducir bien.

Atraída Por El Enemigo (Jelsa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora