La otra cara de la moneda

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Lydia*

Desperté en la cama, sola. Theo no estaba, es raro tenerlo en casa en las mañanas, él siempre sale y nuca me dice a donde, aveces tengo miedo de que me engañe pero una parte de mi desea que lo haga para así disminuir el tiempo junto a él. Me gusta la compañía que me hace Theo pero no lo amo, amo a Stiles y siempre será así, tal vez el ya no lo haga pero yo a él si y no tendré miedo de volver a verlo mañana cuando llegue con Allison y Scott.

Me levante de la cama con un poco de pereza pero él hambre era mayor así que corrí a la cocina, conecte mi celular a la corneta y puse la nueva canción de FH, prepare un homelet y tostadas, puse la mesa y luego los cubiertos, iba a sentarme cuando me di cuenta de que la ventana estaba abierta, me acerque para cerrarla pero al hacerlo me fijé que Theo estaba en la cafetería que se encuentra cruzando la calle, sonreí al notar que estaba comprándole unas rosas a un joven pero mi sonrisa se borro al ver a quién se las entregaba. Tracy, estudio último año con nosotros, siempre fue reservada y nunca entable una conversación que durará más de dos minutos, veo que cambió mucho al notar que su mano se posó en el muslo de Theo, cerré la ventana con fuerza y tome el desayuno frío que había hecho y lo guarde en el microondas, no estoy tan loca como para botarlo, dejaré que Theo se lo coma, tome mi abrigo y salí a caminar unas cuantas manzanas.

Caminando me he dado cuenta que aquí en NY no soy nadie, no tengo a nadie quien me diga si lo que hago está bien o mal, alguien que me abrace cuando camino por los pasillos, alguien que esté terriblemente obsesionado conmigo. Alguien como Stiles.

Camine directo al aeropuerto para esperar a Allison, dure 15 minutos antes de verla bajar tomada de la mano de Scott y más atrás venía Stiles, se veía muy bien, al verlo me recordó la primera vez que lo vi sentado al fondo del salón, lo extrañe tanto, lo amo tanto, pero él no a mí y sé que es así porque vine de la mano de una chica rubia y una poco más baja que yo.

— ¡Lydia!— Allison gritó tan fuerte que dude que fuera cazadora y no Banshee, corrí directo a sus brazos y lloramos juntas.— Diablos, te he extrañado tanto, tu cabello parece una zanahoria.— reí ante su comentario y luego nos fundimos en otro abrazo, Scott me miró un largo tiempo y luego me atrajo a su pecho para darme un largo abrazo, fue reconfortante tenerlo devuelta, y por último Stiles me miraba con nerviosismo, también estaba nervioso, lo sé porque cuando está nervioso juega con su cabello, sonríe ante ese acto y lo abrace, sentí la mirada de odio de la chica que venía con él y no pude parar de sonreír, me separe de él y no pude evitar decir.

—Te extrañe mucho más de lo que imaginas.—

—Yo igual, Lyd.— me abrazo con tanta fuerza que creí que me rompería en dos.— Te extrañe mucho.—

I'm your hero? «Stydia»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora