The Styles Twins

¿Final?

Valentina había pasado la tarde en el departamento de Niall Horan. El tiempo se les fue volando viendo películas, charlando y bromeando. Cuando cayó la noche, Niall cogió su guitarra y comenzó a tocar los acordes mientras cantaba. A la rizada le tomó por sorpresa que el rubio cantase algunas frases en español.

Sentados en el reluciente suelo de madera y sus cuerpos apoyados en el sofá, ambos tarareaban las canciones que Niall tocaba. Llegó un momento en que el rubio se veía tan concentrado que Valentina se quedó en silencio, solo para escuchar cada melodía que salía de su voz y apreciar ese brillo en sus ojos. Niall la miraba de vez en cuando, deslizando los dedos por las cuerdas creando una melodía que la chica ya conocía. La miró fijamente a los ojos mientras cantaba:

- Half as much
As I love you
You'll never treat yourself right darling
But I want you to
If I let you know
I'm here
For you
Maybe you love yourself
Like I love you, oh.

Valentina no podía dejar de sonreír o de ruborizarse. Por un momento sus ojos se cristalizaron, pero no dejaría que su cursilería arruinara ese precioso momento. Afortunadamente, sus lentes y el reflejo de estos ocultaban las lágrimas. Cuando la canción llegó a su fin, la chica comenzó a aplaudir fervorosamente y Niall hacía pequeñas reverencias con la cabeza:

- Espectacular. Asombroso. A-S-O-M-B-R-O-S-O.

- Vaya, no sabía que también eras maestra - Niall bromeó.

- Adoro como cantas. Me gustaría que fuera así en sus conciertos.

- Pero los gritos de las fans añaden la magia para que la canción sea especial.

- Si, debo admitirlo.

Niall le sonrió mientras extendía la mano para coger un puñado de palomitas, pero no pudo tomar nada.

- Oh, vaya - El chico cogió el bol y echó un vistazo -. Se han acabado.

- ¿De verdad? - La chica le preguntó con diversión -. Ni siquiera me has dejado coger un poco. Te las has comido todas.

- ¿D-D verdad?

- Bah, claro que no. Era una broma Nialler.

- Entonces iré por más - Niall se levantó del suelo llevándose consigo el bol -. Por cierto, solo mis amigos me llaman Nialler. O Neil.

Valentina arrugó el entrecejo sin comprender.

- ¿Y yo no soy tu amiga?

- Bueno si...no...digo si - Niall vacilaba, sintiéndose como un tonto. Se revolvió el cabello y se desvió del tema con una risita -. Olvídalo.

- Claro - contestó Valentina con duda.

La chica miró sus uñas y se sorprendió por tenerlas tan descuidadas. Recordó haber comprado un esmalte nuevo y que aún seguía en su cartera, por lo que sacó la pintura de uñas y comenzó, con cuidado y con paciencia, a pintar cada una de sus uñas.

Niall cogió una bolsa de palomitas, la colocó en el microondas según las instrucciones y colocó el tiempo de dos minutos. El chico se apoyó en el tope de granito y se mordió el labio.

- Rayos Niall, casi metes la pata.

Desde hacía unos días atrás quería confesarle a Valentina que le gustaba. Estaba demasiado nervioso por que no encontraba el momento adecuado para hacérselo saber, o cuando era el momento, sus nervios y tartamudeo arruinaban el momento. Los chicos le habían dado varios consejos, pero decidió seguir las palabras de su hermano: