Capítulo 18

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~ Relata Fernando

-Mamá voy a llegar tarde, enserio apurate. –Mi mamá apenas iba abriendo los ojos, ¿Qué no le importaba que llegara tarde con la psicóloga? A veces es muy rara. Dice que me concentre, que llegue temprano y debidamente a donde valla… Y después se queda dormida y tarda un chingo para levantarse y llevarme. –Voy a agarrar las llaves del auto. –Me di media vuelta y Me dirigí a la cocina.

-Feeeeeeeeeer –gritó mi mamá. Sabía que con eso reaccionaría. Volví a rastras a la puerta de su cuarto –A ver mijito –me dijo –Si tu cita es a las 6:45 –me dijo.

-Mamá, ¡Siempre es a las 6:00!

-La cambié mijito, la cambié, ¿Que no te acuerdas? –me confundió. Yo nunca me di cuenta cuando la cambió… -Pero era solo por esta cita que porque tenías entrenamiento, pero después me dijiste que se canceló. 

Estaba en lo cierto, solo que creí que ella lo había cambiado de vuelta. Entonces, no iba a ver a _________(tn) hoy, mierda, estaba esperando precisamente este día para verla fuera de la escuela. 

-Bueno pues –le dije y cerré la puerta de su cuarto silenciosamente. 

-¡Despiertame unos 20 minutos antes de la cita! –Me gritó.

-Seh –respodí. Fui en línea recta y sin distracciones a mi habitación. Practicamente me aventé a mi cama sin pensamientos en la cabeza, mirando el techo corrugado. Estube así unos 8 minutos, pensando al vacío. Pensando en Lucie, pero al mismo tiempo en __________(tn). Lo que Lucie me hizo hace unas semanas me cayó como un balde de agua fría…

#flashback

-No no no, esque yo ya me voy, adiós Fer, Lucie... –Se despidió ________(tn) cuando estaba yo en el hospital. Sabía que su plan era que nos dejara solos, pero presentía que algo no estaba bien aquí. Cuando ella salió, se sintió el aire tenso de la habitación.

-Fer… -me dijo mirando al suelo. Yo solo podía verle el cabello, pero luego alzó la cara y me miró profundamente a los ojos. –Necesito que me dejes de perseguir. –Bam. Mi corazón se detuvo un instante. Y yo, en shock, aún la miraba a los ojos. –Yo… no te quiero… de la misma manera en la que tu a mí. 

-¿Hay alguien más con quien sales, cierto? –Abrió los ojos como platos y volvió a la mirada baja –Los ví en el parque justo frente a mi casa. Tú ibas vestida muy extraño, con una chamarra de cuero negra, botas, una pañoleta roja en la frente, los labios rojos y los ojos negros. Viste a un muchacho… o tal vez ya es señor –se tensó aún más el ambiente, parecía que pronto la habitación explotaría- …y lo besaste. Lo ví todo, y para que te digo que no, me destrozó el corazón y me sentí… traicionado. –Esta vez yo fui el que desvió la mirada, hacia la ventana, donde estaba terminando el atardecer. 

-Por favor no se lo digas a nadie. –dijo rápido, en casi un susurro. No estaba seguro de lo que había escuchado, así que la miré a los ojos confundido. Lucie no era de esas personas que mantenía algo que sentía en secreto.

-¿Qué?

-Que por favor no se lo digas a nadie. –Me volvió a decir, y sostuvo mi mirada arriba. Toda su expresión soltaba desesperación, preocupación, un exalto. No tenía nada que decir. –Lo siento.

Antes de poder decir algo, escuché un portazo: Ella se había ido. ¿Eso que fue? ¿Quién era realmente ese señor?... ¿Debería meterme en esto? O… ¿Simplemente olvidarme de Lucie?... 

Por más que la quisiera, yo no estoy en condición de ayudar a nadie en este momento. Estoy… destruido… no puedo.

#Fin flashback.

Enferma e Inteligente / NovelaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora