Es mi secretaria: Cristian y Anastasia

Capitulo 61: Teddy

POV CRISTIAN

No puedo creer lo que estoy viendo. Ana esta perfecta con su vestido de novia. Su peinado, vestido, maquillaje, la hacen ver hermosa, más de lo que era antes. Si es posible. Su vientre abultado queda visible y es mi hijo el que está adentro.

Cuando llega a mi lado, la tomo de la mano y le ayudo a colocarse en su lugar. Ella me sonríe y cuando el padre comienza a hablar mis nervios comienza a hablar.

Durante la ceremonia veo que Ana se ha quedado varias veces y cuando lo hace, una mueca. No creo que mi bebé quiera nacer en este momento, aunque viendo el gran vientre que tiene, no lo dudaría.

-vamos a escuchar los botos de los novios- dice el cura.

-señor Grey, comience- yo asiento con la cabeza.

-yo Cristian Grey acepto como esposa a Anastasia Stelle, para respetarla y cuidarla para siempre. Estar con ella en todo momento, en la salud, enfermedad, felicidad o tristeza. Seré un pilar en tu vida, seré tu sustento, tu compañía, tu amigo y tu confidente. Te ayudare en todo lo que sea posible, porque eres mi más y sin ti, mi vida ya no tiene sentido. Ante todo los invitados y antes Dios, prometo serte fiel y no hacerte daño, solo amarte, como lo mereces- sonrió y le coloco el anillo. Ella sonríe y veo que está intentando aguantar las lágrimas.

-Anastasia, su turno- dice el cura. Veo que toma aire.

-yo Anastasia Stelle tomo como esposa a Cristian Grey, para serle fiel en lo bueno y en lo malo. Ser su compañera en los momentos de felicidad y tristeza. Ser su amiga, compañera y amante- se detiene y se queja –estar contigo en todo lo que me necesites. Mi amor estará contigo hasta el último día de mi vida y gracias al amor que tenemos veremos los frutos hermosos que recogeremos. Eso es lo único que nos importa. Ante Dios y nuestro amigos sello mi promesa con esto- ella coloca el anillo en mi dedo y sonríe.

-bonitos votos- dice el cura.

La ceremonia continua. El padre habla un poco de la unión tan importante que estamos logrando y luego bendice nuestras vidas y la vida que viene en camino.

-bueno ante la ley de Dios y antes la presencia de los invitados, los declaro marido y mujer. Puede besar a la novia- sonreímos y nos vemos. Cuando el vientre toca mi abdomen, lo siento duro pero ese pensamiento se esfuma cuando siento las patadas del bebé.

Todos los asistentes están aplaudiendo, gritando y saltando. Mia es la más feliz, sé que un dos días antes de la boda, mi padre, mi madre y mi hermana hablaron con Ana y limaron asperezas. No sé qué hablaron porque no me quisieron decir, pero conociendo a mi esposa, no creo que haya sido muy dura. Ella es un pan de amor, y de gran corazón.

Caminamos por la alfombra hasta donde está la recepción. Todos y cada uno de los invitados nos abrazan y nos damos las manos. Me acerco a mi mujer que la veo pensativa.

-bebe, estas extraña. ¿Qué pasa?- ella me mira.

-necesito ir al baño. Tengo unas ganas gigantes de hacer pis. Solo que con tanta tela me da miedo que se moje o se ensucie- sonrió.

-bueno si quieres podrías ponerte el vestido blanco más corto. Ese que va con bordados morados. Es lindo y cómodo- le sonrió.

-está bien. Le pediré a Kate que me acompañe. Y así poder ir al baño a gusto. Me disculpas con los demás- me besa en los labios y camina donde esta Kate para luego entrar a la casa.

-¿Qué le pasa a mi niña?- me pregunta Luzmira.

-quiere hacer pis. Pero le da miedo que pueda manchar el vestido, así que se fue a cambiar por un vestido más cómodo- le digo.