Es mi secretaria: Cristian y Anastasia

Capitulo 54: No te vayas

POV ANASTASIA

-¿Qué? Ustedes están locos- dice Luzmira.

-no podemos hacer nada en tres semanas. Es más, ¿Dónde conseguiremos un vestido de novia para tu cuerpo que está constantemente cambiando?- dice Kate.

-creo que aquí sobre decir que un matrimonio tan rápido se debe a un embarazo- dice Jorge.

-no lo hago solo por mi hijo sino también porque amo a Ana y no la quiero dejar de nuevo. Esa es la verdad- dice Cristian.

-además no quiero la gran fiesta. Quiero algo íntimo. Algo en familia. Solo ustedes y la familia de Cristian. No tengo a nadie más- les digo.

-¿Cuántas personas?- dice Luzmira.

-más de 30 lo dudo- le digo.

-está bien. Haremos algo y sé que te va a gustar. Es más Kate me puede ayudar. Y después seguimos hablando. Necesito que se vayan de una vez si quieren llegar a la cita. Con cuidado y espero buenas noticias- me dice Luzmira. Ella toma un papel y comienza a notar cosas.

Me acerco a ella y le beso sonoramente la mejilla, lo mismo que don Jorge y manos sonríen. Con cuidado subimos a la camioneta. Cristian me puso el cinturón, ya que dijo que mi barriga no ayuda. Cuando termino me dijo, buena chica, y me beso y yo como boba sonreí.

-no estuvo tan mal- dice Cristian.

-no pero aun no me convenzo que nos casaremos. Dios, nunca imagine que mi jefe se fijaría en alguien tan insignificante como yo. Siempre soñé que me iba a casar con alguien de mi misma condición y aunque tuviéramos una vida difícil siempre saldríamos a delante, porque estábamos juntos- digo mirando por la ventana.

-¿tan más concepto tienes de ti?-

-la vida no había sido fácil para mí y para nadie-

-pues estas muy equivocada. Creo que hubiera sido tonto y estúpido se te hubiera dejado ir. Mira sé que fui un ogro contigo siendo mi secretaria y también un idiota siendo tu novio, pero entiéndeme. Ana eres deliciosamente bella y eres un vicio. Tú ternura e inocencia me desarmaron y pensando en lo que dijiste, me enerva y se hincha la vena cuando pienso que otro hubiera podido estar contigo- los nudillos de sus manos están blancos cuando dice lo último.

-Cristian, dejando de lados esos pensamientos, después de la cita con la ginecóloga ¿podemos ver algo de ropa para Teddy? Lo único que tengo de él, es una ecografía y seria. No tiene cuna, ni ropa, nada- le digo.

-claro. Además tengo algo que contarte- dice mirando fijamente el camino.

-¿Qué cosa?-

-esta mañana hable con mi padre. Le explique lo que estábamos pasando y le dije que necesitaba ayuda. Mi padre solo se encarga de casos complejos y es la cara del bufete y por lo general está en la casa, así que le pedí que mientras yo está aquí, en España, él se hiciera cargo de la empresa, algo así como presidente interino. Al principio se negó pero cuando le explique de la existencia de Teddy y lo que está pasando con el trío siniestro, el acepto-

-y ¿Qué más? no creo que solo te haya dicho que si- le digo.

-por algo fuiste mi secretaria. Si. La condición para aceptar es que luego de que Teddy nazca debo volver al mando de Grey House. Me dio como plazo máximo tres meses después del parto. Después de eso debo pasar 15 días en España y 15 días en Seattle. Es lo único que puedo hacer y también me dijo que debo ser consciente de lo que he creado- dice.

-no es tan malo como parece. Yo hablare con Luzmira para poder pasar temporadas tanto en Seattle como España. No quiero que pierdas tu empresa. Creo que debo ceder en esto también y si hay que estar tres meses aquí y tres meses haya, no encuentro problema. O un mes aquí o allá. Yo no sé. Aún nos quedan algunas semanas para planear mejor la cosas- le digo.