La Hermana De Shintarō Midorima

Kise vs. Kuroko

Narra Miran

El partido de práctica es hoy, le pedí permiso a mamá para que me dejara ir, ella me dejó ir, pero Shintarõ estaba algo gruñón, al parecer no le agradaba tanto que yo andara con Kise

Llegué a Kaijo y me dirigí a gimnasio donde estaban los muchachos y el entrenador, un grupo de los chicos estaba colocando una red en medio de la cancha

-Aida-san se va a enojar en cuanto vea esto -dije acercandome al entrenador

-me vale, no le veo el porque los demás deben dejar de entrenar por un partido de práctica -lo mire fíjamente

-te he dicho que se va a enojar, despues no te quejes -lo dejé tratando de entender lo que le había dicho mientras que yo tenía una sonrisa.

Salí del gimnasio y vi a Kise correr para llegar a tiempo al entrenamiento, estaba tan apurado que ni cuenta se dio de mi prescencia y de que le había puesto el pie para que cayera y bueno, lo hizo, cayo y se puso a quejar, solo me reí y salí corriendo hacia el gimnasio para que no me atrapara

-¡Kasamatsu! -me escondí tras él -salvame de la rubia -le dije, en vez de hacerme caso el intento atraparme mientras Kise se acercaba, pero volvi a salir corriendo hasta el entrenador, ahora si Kise no se atrevería a nada

-¿Qué te pasa? -pregunto Takeuchi

-Nada -se encogio de hombros y mando a que los chicos comenzaran a entrenar

-¿Por qué no estas con ellos? -se agacho y me puso una mano en la cabeza

-no quiero, yo solo vine a ver el partido

-¡Tu... pequeña mocosa! -Kise estaba enojado

-Tu... grandisima rubia -lo imite en burla

-no me digas asi... -comenzo a hacer berrinche

-Kise, vete a entrenar -ordenó el entrenador Takeuchi

-si, entrenador -se puso recto, pero luego se volvio hacia mi -tu y yo hablamos luego, enana

-Kise... -el rubio salio corriendo -¿Qué le hiciste? -me preguntó

-¿yo...? No, nada -me hice la inocente.

Al rato alguien llego diciendo que había gente de otro colegio afuera, Seirin, el entrenador le dijo a Kise que fuera a recibirlos y que los trajera aqui, yo fui tras él

-¡Oigan chicos! -grito ni bien los vio empezó a correr más rápido, cuando llego a ellos dijo algo de mostrarles el lugar, llegué corriendo y abrace a kuro-kun -¡Midorimachi! -se quejó el rubio al ver lo que hice

-hola, Midorima-san -me dijo Kuroko y me separe de él para saludarlo y agarrarle de la mano poniendome a su lado, sus compañeros parecian celosos y ni que decir Kise

-Kurokochi, desde que me rechazaste cuando te invite a unirte a nosotros he estado llorando en mi almohada -rodé los ojos, para ser modelo no es buen actor -ni siquiera una chica me ha rechazado antes -no aguante más y empecé a reir a carcajadas ganandome la atención de los de Seirin, puesto que Ki-chi y Kuro-kun estaban hablando

-¿podrías dejar de ser tan sarcástico? -le pidio el enano al rubio y yo me seguí riendo -y usted, Midorima-san, no debería reirse de esa forma, ya es una señorita -al escuchar eso dejé de reirme y comencé a gruñir -y tampoco es un perro -volví a gruñir tensando los tendones de mis manos

-¡No me molestes! ¡Alma en pena! -lo reté

-Estoy interesado en saber más sobre el sujeto que hace que Kurokochi diga esas cosas -dijo Kise cuando Kuroko iba a abrir la boca para seguir regañándome -no me importa mucho ser llamado parte de la generación de milagros -Kise se acercó a Kagami -pero no puedo ignorar un desafío tan obvio -lo miró de reojo -no soy lo suficientemente maduro para dejarlo pasar -dijo mirándolo, la tensión se notaba de lejos -lo siento, pero te voy a aplastar con todo lo que tengo -desafió Kise, rode los ojos tirando de Kuroko para llevarlo al gimnasio mientras los demás nos seguían