"Por ti, jamás"

CAPÍTULO 4

Dedicado a:Elychan122

Deciciones...

Nos mirábamos fijamente, su rostro se acercaba al mío y yo no sabía que hacer. Justo cuando ya no quedaba mucha distancia en nuestros labios...

-¡Lizzy! ¿Donde estás?

Por dios Jane morirías por esto. James me miró con triztesa de no haber podido besarme.

Se separó a una distancia prudente, ya que Jane nos había encontrado.

-Lizzy aquí estas. De saber que estabas ocupada no hubiese interrumpido
-Aun así lo hubieses echo- respondí claramente enojada.

Los tres reímos tratando de disimular ese momento incómodo.

-Bueno señoritas, debo retirarme. No quiero que se malentienda la situación y mucho menos dañar la reputación de Elizabeth.

James se despidió. Beso la mano de Jane y después la mía.

El beso que plantó en mi mano fue más profundo y largo, o eso imaginé.

Apenas se fué, Jane me sacó de mi mundo donde estaba.

-¡Lizzy! ¿Qué hacías con ese hombre tan apuesto aquí en los jardines apartados de las demás personas?
-Nada de lo que te imaginas.
-¿Segura? Por que hace unos momentos parecía que iban a besarse.
-Yo...- suspiré de cansancio ante su mirada acusadora -Yo no tengo nada que decir en mi defensa.
-Qué bien...cuéntame ¿Qué fué lo que pasó?
-Bailamos, hablamos,y mucho. Comenzó a decirme que era hermosa.
-Estaría ciego si no se diera cuenta de ello.
-Luego nos miramos fijamente y la distancia entre nosotros se hiba reduciendo y...
-¿Se besaron?
-¡No!
-Pero no te molestes, no es mi culpa que él sea tan indeciso.
-Él no es indeciso...¡Tu interrumpiste!

Jane comenzó a reir. Y cómo no si yo estaba furiosa por que no pude besar a un extraño y lo defiendo con mi vida ante las acusaciones de mi mejor amiga de toda la vida.

-Lizzy está enamorada.
-¡No!, no lo sé.
-Hay lizzy que feliz estoy por ti.
-Eres una mala amiga, yo no te desearía esto.
-La mala eres tú, yo si quiero enamorarme.
-No debo tomarme esto tan enserio.
-¿Por qué no? Estas enamorada.
-No. No me puedo enamorar de un extraño, estaré comprometida en menos de un mes y no puedo declinar.
-Aún no estas comprometida y no cualquier extraño lograría casi besarte lizzy. Además ¿Que tiene de malo enamorarse?
-El amor entorpece a las personas, las obliga a actuar guiándose de sus sentimientos y no por la razón.
-Hay lizzy, sin duda tu serás la persona más torpe del mundo.

Jane estaba más emocionada que yo. Pero aún que yo quisiera, no podía darme el lujo de enamorarme.

No puedo perder el tiempo enamoránme, tengo que encontrar al asesino de mi padre y tengo que cumplir la promesa que le hice.

Al meditar más en esto me di cuenta de algo, en toda la noche mientras hablé con James no pensé en mi padre, a pesar de que hice una leve mención de él en la conversación.

Definitivamente debo alejarme de James o si no logrará distraerme de mi verdadero objetivo.

No debo distraerme, no debo enamorarme. Si me enamoró pierdo.

¿Por qué? Por que no podría cumplir con la promesa que le hice a mi padre y, estando enamorada, no me podría enfocar en mi objetivo de encontrar al asesino de mi padre.

Ya se me pasará me decía a mi misma mientras Jane me arrastraba de nuevo hacia el salón de baile.

Al entrar ahí comenzé a buscar a mi madre, para mi sorpresa estaba hablando con el señor Albrith.

El estómago se me revolvió al imaginar de que hablaban. Seguro hablaban de mi compromiso con su hijo.

Me acerqué por pura educación y protocolo a saludar. Vaya que los títulos si eran molestos.

-Señor Albrith, reconocerlo no fue fácil a decir verdad.
-Lizzy, querida tampoco te reconocí, te vez espléndida esta noche.

"Si lizzy, arreglate más seguido por favor".

-Gracias señor Albrith, pero está exagerando.
-No lo creo lizzy sabes que eres como una hija para mi, como te mentiría de tal forma. Por cierto, justo hablaba con tu madre acerca del compromiso. Acordamos que antes de ello conocieras a mi hijo. Me gustaría presentartelo ahora mismo pero no lo encuentro por ningún lado.
-¿Conocerlo?
-Si, hemos acordado que será un mes antes de que su compromiso fuera oficial... ¿Estas de acuerdo lizzy?
-Yo... si, estoy de acuerdo.
-Entonces nos volveremos a ver dentro de muy poco tiempo.
-Si señor Albrith.

Hizo una reverencia y se fué. Por un momento creí que mi corazón se saldría de mi pecho. Estuve a punto de conocerlo.

Suspiré de alivio y agradecimiento por que el hijo del señor Albrith se haya perdido en este baile.

Mi madre me miró preocupada, y como no si me desaparecí por horas.

Mi madre se despidió de sus amigas y me comunicó que ya era hora de irnos.

Salimos hacia el jardín aproximandonos a la entrada y ahí estaba James mirándome con esa gran sonrisa perfecta en sus labios.

Mi madre me miró como si supiera que ese joven me sonreía a mi.

No pude hacer menos que ignorar la mirada de mi madre.

Cuando estaba a punto de subir al carruaje, una mano tomo la mía y me ayudó a subir.

Era james, ¡Qué pretendía! Era obvio que me puse roja pero no sabía si era por estar sonrojada o muy enojada.

Y después de estar dentro del carruaje, depositó un beso en mi mano y se marchó.

Claro, podía ignorar la mirada de mi madre pero no sus cuestionamientos.

-Hija ¿Quién es el? ¿Por que el atrevimiento?
-Yo... no se, tal vez es un loco. No lo conozco.
-Y por que ese "loco" se toma ciertas libertades con mi hija.
-No lo se, ¿Cortesía talvez?
-Pues es muy cortés y apuesto ¿Segura que no lo conoces?
-No madre. Y ¿Podría saber a que acuerdo llegó con el señor Albrith?

Excelente táctica para evadir preguntas lizzy, al fin comienzas a usar la cabeza.

-Bueno, tan sólo lo que escuchaste. La fecha del almuerzo donde conocerás al hijo del señor Albrith. Será dentro de unos días querida.
-Si lo escuche madre.
-Estas segura de que eso es lo que quieres... ¿Verdad?
-Claro que si madre, ¿Por que me cuestiona?
-Tus palabras afirman que estas de acuerdo pero tu mirada dice otra cosa. Eres mi hija y te conozco.
-No madre, es solo que e estado distraída un poco, eso es todo.

Mi madre iba a decir algo cuando nos avisaron que ya habíamos llegado a casa.

Al bajar del carruaje y entrar a la casa me apresure a entrar a mi habitación, así evitaría el seguir hablando sobre el tema con mi madre.

La criada me cambió con una bata más sencilla. Después de eso se marchó.

Yo por mi parte sepillaba mi gran melena rubia que caía por mi espalda.

Mala idea pues eso me daba tiempo para pensar.

¿Debería darle una oportunidad al amor? ¿Debería cancelar mi compromiso?

¡No! No podia... unos minutos supuestamente enamorada y mira ¡Ya hibas a arruinarlo todo!

Estaba decidido, no me hiba a enamorar aunque James me propusiera matrimonio lo más romántico posible.

Tarde en actualizar lo se odienme, me lo merezco pero prometo no abandonarlos tanto tiempo (quemenla por mentirosa).

Bye... nos leemos luego.

-@DARK_HEART_BLACK