Nina
Pasaron las semanas y el dolor aún estaba allí, aún lo sentía como si todavía estuviera viviendo ese momento con Gastón, pero sabía muy bien que tenía que seguir adelante y así lo hice o por lo menos lo intente.
Luna había sido un gran apoyo en esto que me estaba pasando, ella siempre estaba allí para mí, pero ella no sabía sobre la inscripción que había hecho y para ser sincera no le iba a contar nada al menos que me quedara (que prácticamente no hay posibilidades) le diría, pero si no, no tengo por qué contarle, es algo que quiero mantener muy personal, ya que es algo que hice sin pensar y en un mal momento peor que al final, muy en el fondo tenía ganas de hacer.
Durante todo este tiempo sabía que sentía dolor, que estaba mal, estaba lastimada pero no lo expresaba, ¿me explico?. A lo que me refiero es a que no lloraba, no me hablaba sobre eso y lo más raro de todo no escribía, no sentía inspiración, tenía el corazón demasiado roto como para escribir.
Gastón
Gastón Perida, ¿dónde estaba? ¿Qué había sido de él desde aquel día en el que se dio cuenta de que era la persona más patética del planeta? ¿Qué había sido de él desde que se dio cuenta que había perdido a su mejor amigo y al su verdadero amor?
La respuesta es simple, ese Gastón Perida, ya no existe, esta enterrado mil metro bajo tierra y el Gastón que existe ahora no es nada más que una simple alma en pena.
Lo único que bien que ha hecho este Gastón es terminar bien con Daniela, le explicó las cosas, le pidió perdón y todo bien, todo perfecto con todos los chicos de ese colegio, pero eso no lo hace sentir bien porque esos chicos son solo sus compañeros, con los que sale a divertirse un rato, pero son solo eso compañeros.
Amigos son pocos los que hay y yo Gastón los tenía y por un error los perdí.
Dicen que nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde, y esa frase justo describe mi situación.
Por algo estupido y pasajero deje ir algo hermoso y que podría haber sido eterno.
Perdí a Matteo, a mi mejor amigo, con el que podía contar incontrolablemente, la persona que más me conoce en el mundo, perdí a mi hermano del alma.
Y lo que es aún pero la deje ir a ella, a la chica con los ojos más lindo del mundo, la chica de la mirada dulce y sonrisa encantadora, a esa chica que escribía frases que me llenaban el alma, a una chica que daba todo por mi, deje ir a Nina, deje ir al amor de mi vida y eso jamás, jamás en la vida me lo voy a perdonar.
Hago un esfuerzo por no sentirme mal y por alejar esos sentimientos de mi, pero llega un momento en el día en el que tengo que correr y desaparecerme del mundo para descargarme y llorar.
Eso de que los hombres no lloran es estupido, no por ser hombre significa que no tienes sentimientos, todos los seres humanos somos iguales y ambos sexos tenemos sentimientos y tenemos la necesidad de aveces dejarlos fluir y bueno esta situación es muy dolorosa y llorar es la única forma que he encontrado para desahogarme.
Los cuentos de hadas no existen, eso es totalmente cierto.
Debemos de tener en claro que estamos en la vida real y que no todo es color rosa, aveces el cielo se torna nublado y cae una tormenta que tarda en acabar, pero... Las tormentas no son del todo malas, ¿qué sería de las flores sin el agua de la lluvia? Obviamente no crecerían.
La vida es así, tiene sus lados buenos y malos y hay que aprender de ambos, dejar todo en manos del tiempo y del destino, estos dos no irán dando de apoco las respuestas que necesitamos, nos irán abriendo los caminos a eso que queremos llegar o a las sorpresas a las que decidas abrirte.
Solo ten paciencia, que todo estará bien y si no lo está es porque aún no es el final.
