—Esta es mi casa-Dice la pequeña mientras corre por sus cosas a su habitación.
-Miro con impacto la casa de Justin Bieber, era grande y para ser un hombre tenía buenos gustos con la decoración, la mudanza ya había dejado mis cosas por la casa, Justin había dejado una nota en la mesa con las indicaciones y una disculpa por no poder ayudarme a instalarme.
—Mia ¿Quieres comer para después ayudarme a desempacar?-Preguntó mientras me agacho hasta su estatura.
-Ella grita con emoción corre hacía la cocina donde me muestra donde esta cada cosa y cada condimentos para prepararle unos ricos Hot cakes, rápidamente le agradezco a mi madre por haberme enseñado las artes culinarias de la cocina. Ella era una gran señora, que siempre había visto primero por los demás y claro por mi, esa era una de las cosas que siempre le agradecía, claro lamentablemente ella no estaba en Portland había retomado su vida en Los Ángeles con Bob un hombre con casi los mismos gustos de ella.
—Son deliciosos ¿sabes cocinar?-Pregunta la pequeña con una gran sonrisa.
—Claro, soy repostera, se cocinar muchas cosas deliciosas-Le digo con una sonrisa.
—Eso es maravilloso, mi mami no me daba de comer cosas tan deliciosas como las que tu preparas, decía que hacían daño o que no eran las adecuadas para una pequeña como yo-Dice con tristeza.
—Pues tu mamá estaba equivocada lo sabes, por que a los niños se les debe de dar muchas cosas para que disfruten claro también deben de comer sano-Dije mientras movía mis manos para después juntarlas en mi cadera, ella rió y después continuo comiendo.
-Mia estaba mirando la televisión mientras yo estaba acomodando las ultimas cosas en mi nueva habitación, era enorme de color blanco y tenía una hermosa vista la ciudad, el colchón era enorme había un gran armario y un baño increíble.
—La casa a quedado sucia ¿Quieres ayudarme?-Le pregunto a Mia quien esta mirando la tele.
—Si-Pega un grito de emoción.
-Mia apaga la televisión, primero que todo Mia enciende la música eligiendo un poco de su agrado, después nos vamos en partes, arreglamos la cocina y después las recamaras, tomamos sus juguetes que estaban regados por la casa y los acomodamos en orden en su habitación, abrimos las ventanas y limpiamos los pisos con un poco de el fabuloso sabor a frutas y en un dos por tres la casa estaba completamente lista, mire hacía la ventana y me di cuenta que era de noche, Mia estaba dormida en mi brazo, la tome con precaución y la arrope en su cama. Una vez que baje las escaleras, tome los ingredientes para hacer unos pastelillos de vainilla y fresa el sabor favorito de Mia. En cuestión de minutos la casa tenía el aroma a pastelillos recién salidos, tome uno y lo coloque en mi boca saboreando el delicioso sabor a vainilla. Escuche abrir la puerta no le tome importancia y seguí disfrutando de el pastelillo.
—¿También sabes cocinar?-Entra Justin dejando su maletín en la mesa, asiento delicadamente aun comiendo el pastelillo.
-Él me mira y después toma un pastelillo saber fresa lo come mientras me sigue mirando, lentamente cierra los ojos y disfruta del sabor y el caliente pastelillo pasar por su garganta.
—Eso es delicioso-Dice mientras devora otro.
Mamá Sustituta...