13. ¿Seres del mas allá?

362 62 32
                                    

—Sabes, estoy considerando la idea de que Maddy se esta escondiendo de nosotros. —Digo mientras acomodo algunos sillas de la cafetería.

Me tiene indignada.

Es viernes y Maddy tampoco vino hoy instituto.—Como en toda la semana. —En este momento me encuentro abriendo la cafetería junto a Matt, —Porque Camille esta algo enferma. —El lugar se encuentra solitario ya que debemos tener presente que todos los adolescentes deben de estar ansiosos y emocionados por sus fiestas de hoy. Matt no me contesta nada, así que volteo a mirar y lo encuentro totalmente sumergido en sus pensamientos.

—¿Matt? —Me paro en frente de él y le tiro el trapo de limpiar en la cara.

—¿Ah? —Matt da un pequeño salto y se quita el trapo, mientras yo lo esquivo porque esta apunto de tirarlo.    

—Te estaba hablando de Maddy. —Su posición se pone tensa y rígida. —¿Tu mejor amiga recuerdas? 

—Alisha, —Matt frunce el ceño y su mandíbula se endurece. Toma el trapo que tire y comienza a limpiar, mientras continua hablando. —No puedes esperar nada de Maddy, cuando ella ni siquiera sabe donde esta parada. 

Decido pasar por alto su expresión y como me contestó, ya que obviamente Matt esconde algo de Maddy y no hay que ser adivino con una barita de cristal para darse cuenta de que es algo malo. Este secreto no durara mucho, ya que lo averiguare porque esos dos son mis mejores amigos. 

Soy toda una detective cuando quiero saber algo.

Clientes comienzan a llegar, Matt y yo atendemos, mientras corremos con los pedidos en nuestras manos de un lado a otro y tratamos de hacer nuestro trabajo bien,—Con gentileza y amabilidad. —Aunque con todos los clientes que están en la cafetería es imposible no agotarse, definitivamente estaba equivocada, este viernes no tiene nada de solitario.

Cuando por fin despacho a todos mis clientes, me paro a fuera de la cafetería, —Entre los arbustos. —Para lograr respirar aire puro y serenarme un poco. De repente escucho a lo lejos como me llaman por mi nombre, busco con la mirada y le doy un masaje a mi oído por si de pronto fuera una alucinación, pero sigue el susurro.

¿Seres del mas allá?

—Estoy detrás del arbusto estúpida. —Reconozco esa voz.

—¿Maddy? —Busco detrás del arbusto y encuentro a mi mejor amiga con gafas de sol, ropa negra y un sombrero del mismo color. —¿Estas de luto?

—Claro, acabo de enterrar a Stalin, —Dice sarcásticamente. —¡Obviamente no!

—¿Entonces por que te escondes y hablas así?

—Porque, —Maddy se lleva su mano a la barbilla y hace un gesto pensativo. —Tengo gripe.

—Maddison, —Mi tono de regaño renace. —Como tu mejor amiga, sabemos perfectamente que a mi no me engañas y por mas que digas cosas es obvio que son una total farsa. ¿Que te pasa? 

Tengo una pista.  

—¿Porque no pasas adentro y hablamos? Esta Matt y...

—No. —Maddy no termina de decir su excusa, ya que de un momento a otro se pone de pie y sale corriendo mientras lleva una mano en su sombrero para que no salga volando. 

No cabe duda que es un psicópata.   

—No sabia que los arbusto hablaran Marie.  —Mientras cierro los ojos y me volteo, maldiciendo lentamente por lo bajo. Me encuentro un Jake riéndose mientras toma su café.   

Enamorada de mi peor enemigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora