Susurros del Pasado.

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Séptima Parte: Tinieblas

Capítulo 39: Susurros del Pasado.



Expreso de Hogwarts, Enero del 2014.

— ¿Ya empezaron a estudiar para los EXTASIS? —preguntó Astrid Black sin despegar su mirada de la nueva edición de corazón de bruja.

Lola rodó los ojos... no había ni empezado.

—Sabes que necesito sentir la presión...—se burló Scorpius abrazando a su prometida.

—Yo empecé la semana pasada—susurró Bella Malfoy adelantando una tarea de pociones.

—Por favor... no iniciemos a hablar de eso... apenas es Enero—gruño Lucían Carrow que acababa de llegar con los brazos llenos de dulces.

— ¿Acaso haz asaltado una dulcería? —siseo Lola al ver la cantidad de chocolates.

—Una dulcería no... el carrito de chucherías sí—secundó su hermano, William.

—Detesto lo dulce...—siseo Lola asqueada.

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— ¡Te juró que podría morir comiendo chocolates! —chillo Marie degustando la barra de chocolate alemán que Isabella había cogido para ella.

—Tú morirías por cualquier cosa... ahora tienes que ayudarme a limpiar el confesionario, esta mugriento—convenció, Marie rodó los ojos mientras comenzaba a arrastrar el trapeador.

—No entiendo por qué debemos limpiar... ¿Acaso las monjas no pueden hacerlo ellas? —se quejó.

—Shhh... ¡No hables tan fuerte! —Reprendió Isabella mientras abría la puerta que daba al patio central—. Sabes que es nuestro deber, siempre lo ha sido.

—Y tú sabes que es injusto, mientras ellas duermen hasta tarde nosotras debemos limpiar su chiquer...—Marie dejo lo que decía para dar un grito agudo que hizo a Isabella soltar la cubeta con agua.

— ¿Qué? —chillo nerviosa, Marie señaló un punto detrás de su espalda con temor, Isabella voltio confusa para encontrarse con el nuevo conserje a tan solo unos centímetros de ellas.

—Hola—dijo en su torpe alemán.

—Hola—respondió Marie nerviosa.

—Buenos días William, si nos disculpas—se excusó Isabella incomoda tomando la mano de su amiga.

— ¿Van al confesionario? —preguntó.

—Sí.

—No hay luz por ahora... iré al sótano a arreglarlo—Marie casi salta de la felicidad.

—Bueno... nos vamos—William les cortó el paso.

—Esperen... ¿Quieren acompañarme? —Isabella pensó seriamente en negarse, pero la mirada suplicante de Marie la hizo cambiar de opinión.

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Era más de medianoche en Hogwarts... todos los alumnos dormía más Gennovive no podía conciliar el sueño... eso y que Severus se había quedado trabajando hasta tarde en el estudio, ya no podía dormir sin él a su lado.

La Mujer de Severus Snape #Wattys2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora