Capítulo 13 ESCAPE

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Felipe, nos contó acerca de lo planeado para escapar, con lujo de detalles. Él tenía en mente engañar al guardia, y así nos llevaría hasta la puerta trasera, una vez afuera, subiríamos al auto de Nico, que nos esperaba en la carretera.

-¿Y qué va a pasar con vos?- preguntó preocupadamente mi amiga

-Tranquila, no sospecharán, te lo aseguro. Y si lo hacen, no importa, lo principal es que salgan con vida- respondió Feli despreocupadamente

-Ojalá todo salga bien, no quiero lastimar a nadie más- comenté

-Nada de lo que pasa, es tu culpa linda, esto es así, y lo sabíamos de ante mano- me contuvo Sole

Pasaban las horas, y hacía de cuenta de que éstas, eran años. Nunca había deseado tanto, que llegara un momento del día, como hoy. Ya mismo, quería salir. Pero... ¿qué le diría a mis padres?. Algo tendría que inventar, o realmente enloquecerían.


Me encontraba en una de las esquinas, de la habitación, abrazada a mi amiga. Le acariciaba su lacio cabello, ahora sucio y enmarañado. Su rostro descansaba sobre mi vientre, mientras que el resto de su anatomía estaba inmovil sobre el frío suelo. -¡Que gran amiga tengo, nadie se ah arriesgado por mi, tanto como ella!- pensé

-Jaz...- llamó Soledad

-¿Si?-

-Vamos a seguir, ¿verdad?-

-¿Con qué?-

-Con esto, la búsqueda no está finalizada, tenemos que seguir, Richard es solo una pieza del gran rompecabezas-

-Ya... no quiero que... te lastimen, ni a los chicos. Si sigo, lo voy a hacer sola-

-¡Estás loca!, ni pienses que te voy a dejar-

-Primero, no grites mujer, y segundo... Sole...-

-Sole nada, esto ya está decidido- me cortó

El resto de la noche o tarde, no sé bien, ya que desde aquí no vemos nada, prosiguió en silencio.

Desperté, porque sentía que alguien me samarreaba para todos lados.

-¡Nena, dale levanteate!, ¡Dale que nos vamos a casa!- gritó en un susurro mi amiga

Me paré inmediatamente y salimos. Fuera de la pieza, estaba todo igual de oscuro, esepto por unas pequeñas antorchas en las paredes. ¿Esta gente, es de la época medieval?. Si, al parecer si.

Al final del pasillo, se encontraba Felipe, con unas llaves en una de sus manos.

-Muy bien chicas, sigan por la derecha, allí hay una puerta, la abren con estas llaves y salen. Los chicos están al final del pequeño sendero- comentó Feli, mientras nos hacía entrega de las llaves y nos daba un pequeño apretón de manos

-Gracias Feli, te debemos mucho, en serio- dije

-Es mi trabajo Jaz, ahora vayan, antes de que se den cuenta de que no están-

Llegamos al final del sendero, y ahí estaban...

-¡MIS CHICAS!- gritó Luisito mientras se avalanzaba sobre nosotras, y nos abrazaba hasta romper la última costilla de nuestra caja toráxica

-¡Hey Luis!, dejalas respirar- comentó Nicolás

-Jaz, lamento no haber...- quizo decir Nico

-Shh... no pasa nada, estoy bien- le corté

Me abrazó, miró mis ojos cansados y beso mi frente.

Hay Nico... lo extrañé tanto... ¿Eh? No, no el encierro me hizo mal... si, Jazmín el encierro...

Después de ser, literalmente aplastadas por todos, subimos al auto. Pero antes de que me sentara, alguien me sacó bruscamente del vehículo y me abrazó... Will

-Jaz... te extrañe tanto... ¡perdón por todo! ¿estás bien?- consultó

-Ahora estoy perfecta-respondí

Y sin más, nos fundimos en un profundo y cálido abrazo.

¿Por qué te cruzaste en mi vida?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora