¿Por qué te cruzaste en mi vida?

Capítulo 55 SORPRESA

Apenas volvimos a la casa caí desmayada en la cama, realmente no se que me pasó pero no supe más nada hasta el otro día...

-Jaz... amor-

-¿Qué pasa?- respondí bostezando mientras me incorporaba en la cama

-Ya son las doce, ¿pensás seguir durmiendo?-

-¡¿Las doce?!- dije sobresaltada 

-Si, dormiste como morsa-

-No lo puedo creer...-

-Esta bien igual, esa es la idea de estas vacaciones, que te relajes-

-Pero Milán me necesita-

-No te preocupes, ya me encargué de todo- comentó sonriente 

-Bueno... ¿debo preocuparme?- contesté divertida mientras buscaba que ponerme

-No seas cruel mujer, soy mejor de lo que te imaginas- dijo Nico abrazándome por detrás

-No soy cruel cielo, sino realista-

-Ajá, ahora me voy con Milán a comprar unas cosas, el desayuno está sobre la mesa- respondió cambiando de tema

-¡Ay sos más lindo!- dije dándole un beso sobre sus labios

Acto seguido Milán y su padre desaparecieron de la casa, mientras yo me quedaba desayunando...

Al rato recibí un mensaje de Nicolás, diciendo que había dejado algo para mí en el comedor, que siguiera las instrucciones de la nota sobre la mesa... 

¿Qué se traía entre manos?

Encontré una caja y una bolsa, y en la nota decía lo siguiente:

"Jaz, espero que te guste lo que compré para vos, quiero que te arregles y a las 9:30 hs. salgas a la playa... te voy a estar esperando.

Te quiero Nico

P.D: No salgas antes de la hora indicada, por favor no arruines las sorpresa"

Muy bien... ¿esto será una broma?, a lo mejor quiere vengarse por lo de la playa... aunque no creo... no lo sé realmente. Mejor hago lo que dice la nota y cuanto mucho lo asesino por tenderme tal broma. 

-¡Ay Jaz, tan  inteligente que me sorprendés!- dijo una voz femenina detrás de mi

Me di vuelta y pude ver sobre el marco de la puerta muy cómoda a mi amiga Soledad

-¿Sole?-

-No, tu abuela querida- contestó sarcásticamente 

-Muy graciocita, ¿qué haces acá?-

-Soy la encargada de que no  metas la pata y hagas lo que dice esa nota, pequeña-

-Pero no entiendo nada-

-Vos déjame a mi, voy a ayudarte a que quedes bellísima-

-Juro que si sos cómplice de una broma con Nicolás, los mato a los dos juntos-

-Tranquila, dudo mucho que esto sea una broma- contestó seria

Pasamos toda la tarde arreglándome, Soledad insistía en que quedara lo más "perfecta" posible.¡ Esta mujer me iba a volver loca!, hizo que me bañara tres veces y a su vez lavó mi cabello con millones de cremas importadas de Francia, luego la depilación fue totalmente arrasante, ropa interior de encaje blanco y perfume del más exquisito...