¿Por qué te cruzaste en mi vida?

Capítulo 54 ¿VACACIONES?

Al llegar a destino, me di cuenta de que nos encontrábamos en el mismísimo paraíso. Nicolás nos había traído nada más ni nada menos que a las playas de Alicante. Este hermoso lugar español, uno de los tantos paraísos de España.

Había alquilado una casa de playa, para que durante estas dos semanas estuviéramos de lo más cómodos, y que además Milán lo disfrutara al máximo.

-Amor, ya te dejé todas la maletas y bolsos en la habitación nuestra, yo voy a caminar a la playa con Milán- avisó Nico mientras salía de la casa

-Bueno, bueno, ¡tengan cuidado!-

Yo sin perder tiempo me puse a ordenar todo, mis cosas junto a las de Nico y Milán. Cada prenda y accesorio en su lugar.

Una vez que terminé, me dispuse a limpiar un poco y preparar algo para comer, y así llevárselo a los chicos... Aunque, ¿dónde están las cosas?. Busqué por todos lados, y todas las alacenas junto a los cajones de la cocina estaban vacíos... ¿qué se supone que voy a hacer?...

Como no tenía con que preparar las cosas, decidí llamar a Nico, a lo mejor él sabe en dónde esta todo.

*Llamada*

-¿Si?-

-Nico, resulta que intenté preparar algo de comer, y me di cuenta de que ,bueno... no hay nada-

-¿Cómo que no hay nada?-

-Si cielo, está todo vacío-

-¡Ay Jaz!... Vos nunca encontrás nada amor-

-¡Nicolás te digo que está todo vacío!-

-Bueno, bueno calmate. Ahora llamo al dueño y le pregunto, apenas sepa algo te aviso-

-Bueno- respondí enojada

-Te quiero linda-

-Yo no-

*Fin de la llamada*

Muy bien... a esperar el mensaje de mi querido novio. Mejor me voy a dar un baño, porque con este calor no doy más...

Al salir del baño, me cambié, até mi cabello en una coleta y tomé mi celular para ver si Forx ya me había mandado una respuesta.

Resulta ser que todo estaba en el sótano, así que una vez que traje todo, me dispuse a preparar algo ligero para llevarles. Al terminar los sándwiches, lavé todo y salí en busca de los hombres...

-¡Acá traje para comer!- dije al llegar a la orilla

-¡Qué rico!- respondió Nico tomando a Milán y llevándolo a la arena

-Bueno vos tenes lo que traje para comer, y vos Milán vení con mamá, ya es la hora de amamantarse- dije tranquilamente  

-Ahh... ¡pero yo también quiero!- protestó Nicolás

-¡Forx está el nene!, no seas desubicado-

-Yo también tengo derecho, además es bebé... no entiende-

-Nunca se sabe-

-Mmm... no me respondiste, ¿yo también pued...-

Antes de que terminara de hablar, le estampé un trozo de pastel en la cara...

-¡¿Qué carajo?!- dijo Forx limpiándose brutalmente

-Eso te lo mereces por ser desubicado- contesté tomando al bebé y comenzando a alimentarlo

Milán no paraba de reír al ver a su padre en ese estado

-De esta no te salvas Jazmín, ya vas a ver a la noche- comentó enojado

-¡Ay que miedo!- dije riendo

-Ahora no te agarro porque está el bebé de por medio, pero tené cuidado querida-

Yo solo reía, pero sabía muy bien lo que me esperaba... Cuando de vengarse se trataba, Nicolás era el indicado... podía pasar cualquier cosa.