Secretos Letales //Jalonso Villalnela//

34.

Fue un beso con delicadeza, al principio, solo pintado con la fragilidad del momento. Despues, el beso se tinto de nostalgia, era facil entender que ninguno de nosotros habia dejado lo que pasamos atras.

Tomo mi nuca, acercandome mas a el y yo lo sujete con fuerza por la cintura. Si tuviera que mentir, diria que no siento nada por el, por Alonso Villalpando.

Cuando el aire nos hizo falta, nos separamos rapidamente y nos abrazamos con fuerza. Por su estatura mas alta escondi mi cara en el hueco de su cuello y el subio el rostro hasta que senti su barbilla rozar con mi cabeza.

No dijmos nada, creo que ambos sabiamos que echariamos a perderlo todo si alguno hablaba, asi que el silencio reino la habitacion. Solo nuestras respiraciones entrecortadas se escuchaban en todo el lugar.

Creo que por primera vez entendi porque Alonso me habia mentido. O al menos parte.

Se separo lentamente de mi, tenia la mirada fija en el suelo, busco mis manos y las tomo frente a el. Cuando subio la mirada, encontrandose con mis ojos, note que los suyos estaban vidriosos.

-Perdoname, Jos -susurro.

Estaba tan perdido en sus ojos, tan sumergido en los sentimientos contrariados que afloraban dentro de mi cabeza que no respondi.

-Perdon, perdon, perdon -musito con la voz ahogada en arrepentimiento y la mirada entristecida. En cuestion de segundos que transcurrieron demasiado rapido, tanto que no pude detenerlo, Alonso estaba de rodillas frente a mi.

-Perdoname Jos, no sabes cuanto lo siento. ¡Perdon! No queria hacerte daño, lo juro. Solo buscaba tu bien, te prometo que no queria lastimarte y... todo se me salio de las manos, yo no... -hablaba tan rapido que me esforze en entenderlo, pero de inmediato lo levante, quedando frente a frente.

-Alonso...

-¡Fue mi culpa! Lo siento...

-¿A que te refieres?

El me miro como si fuera mas que obvio, pero al darse cuenta de mi confusion suspiro.

-Todos creen que me converti en tu mejor amigo. Jos, nunca fue mi mision enamorarte -explico en voz baja. No entendia, si fue asi...

-¿Fui tu trofeo personal? -pregunte, dando dos pasos hacia atras, depronto, volvi a sentirme desahusiado.

-¡No! Claro que no...-nego inmediatamente con la cabeza-. Jos, yo me enamore de ti cuando no debia involucrar sentimientos. Y no pude evitar ser egoista y volverme tu novio. Me enamoraste cuando solo debia ser tu amigo.

Eso ultimo lo dijo en un susurro acercandose poco a poco a mi. Entendi lo que decia.

Por eso mi abuelo insistia en mantenerlo cerca, porque creia que solo era mi amigo. Nunca penso que nos relacionamos sentimentalmente. Y ahi estaba el porque me pedia perdon, porque creo que hubiese sido menos duro si solo fuera mi amigo.

-¿Como se que no mientes? ¿Como se que es cierto? -me encontre preguntando en voz baja.

-¿Que ganaria con eso ahora? -respondio, estirando los brazos.

Estaba seguro. No se convirtio en mi novio porque esa fue su mision. Se convirtio en mi novio porque se enamoro de mi. Y yo me enamore de el.

-Oh, Alonso... -susurre antes de abalanzarme a el y abrazarlo con fuerza. Siguio susurrando que lo perdonara y me fue imposible no recordar la tarde de nuestro primer beso.

Y entonces entendi su comportamiento. Solo que no sabia en ese momento todo lo que se ahora.

-Te perdono, te perdono -susurre, tratando de tranquilizarlo mientras acariciaba con cuidado su cabello. Su frente estaba recargada en mi hombro.