Secretos Letales //Jalonso Villalnela//

58.

-En serio me complace su visita pero... Honestamente no se que hacen aquí.

Freddy se movía de un lado a otro por todo el departamento que técnicamente estaba vacío, en algunos momentos, daba movimientos ágiles y precisos pero en otros, entorpecia y hasta me preocupaba que no supiera lo que hacía.

-Bueno, tal vez tengo que venir más seguido ¿Que haces de pie? -pregunto Alonso cruzándose de brazos sobre su pecho. Freddy lo miro con una ceja alzada.

-¿Que?

-Aun debes mantenerte en reposo si no quieres que...

-Oh, cállate Alonso, eres peor que Erin.

Hubo una nostálgica sonrisa que se formo en los labios de mi novio a la vez que negaba levemente.

-Nadie es peor que Erin -respondió.

-¿Y Erin es...?

-Nada. Una chica que nos sobre protegía -me contesto Alonso, dándome un suave beso en la frente. Freddy río suavemente.

-Me dan ternura pero en serio no se que hacen aquí. Ya estoy mejor -comento, sentándose en un pequeño sillón. El único mueble de la sala, en realidad.

-Que estés tu solo tanto tiempo no es bueno -ahora dije yo, honestamente no se que pretendía Alonso con todo esto, yo solo estaba siguiendo las indicaciones que me había dado.

Freddy movió las cejas en una expresión de confusión al momento en que abría los labios para decir algo, cerró los ojos e hizo un ademán con la mano, tratando de pensar algo. Al final, nos miro parpadeando varias veces.

-¿Que dijiste?

-Que no es bueno que estés tanto tiempo solo. Freddy...

-Espera, espera, más lento. ¿Todo este tiempo, solo? -pregunto, ambos asentimos y nos dimos una mirada rápida. ¿Pasaba algo malo?

-Bryan ha estado viniendo -soltó cerrando los ojos-. Y diario. Ha venido diario diciendo que ustedes lo mandaron.

Me quedé en silencio un tanto confundido ¿Y eso era malo? Bryan se había preocupado por el, de hecho, era algo demasiado bueno ¿No?

-¿Y eso es malo porque...?

-¿Y exactamente que ha pasado? - pregunto Alonso, ignorando mi pregunta, su voz era calmada pero sabía que no se sentía así.

-Hablamos... Joder ¡Hablamos! ¡Todo el tiempo! Y ¡Mierda! Ni siquiera me di cuenta de lo que decía ¡Mierda! -Freddy se levantó de golpe y empezó a dar vueltas por el lugar con la mano sobre su frente. Alonso tenía la mirada en el suelo, mordiéndose suavemente el labio. Era obvio que yo no entendía nada.

-Solo le interesas, eso no está mal -repuse recordándoles a ambos sobre mi existencia en ese lugar, ambos me miraron y después intercambiaron miradas.

-Jos, no entiendes...

-No, para nada.

Freddy se recargo en la pared y se cubrió la cara con ambas manos.

-Bryan sigue siendo policía, Jos, y sigue estando en el caso de nuestra organización. Y estoy tan estúpidamente enamorado de él que no me he dado cuenta que esta sacándome información.

Al instante sentí un estrujon en el estómago y negué rápidamente.

-No haría eso.

-Bryan, tu amigo, tal vez no lo haría. Pero Bryan, el policía... Es su trabajo -respondió Alonso, tomándome del hombro. En realidad, no sabia hasta donde podía llegar el joven policía.