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De alguna manera, todo el tiempo en el que estuve en la organizacion me habia obligado a resignarme a que nunca mas volveria a ver a mis padres y con un dolor apremiante, habia pensando en las minimas posibilidades de tenerlos denuevo frente a mi. Me habia pasado horas enteras pensando en lo que les diria, creando posibilidades en mi cabeza... y ahora nada. Ahora no tenia nada.

Ella estaba ahi... pero al mismo tiempo, no era ella. Era mi madre, pero supe reconocer que en ella estaba la mujer a la que nunca conoci. La mujer que habia vivido en esto desde que nacio y la que habia escapado. Vestia totalmente de negro, como el arma que sostenia en sus manos. Su cabello negro, que siempre estaba suelto, ahora estaba amarrado en un irregular moño en su nuca, sus facciones eran las suyas, solo que ligeramente mas afieradas. Tal vez por fin veia esa parte que se habia esforzado tanto por esconderme.

-Jos... -habia algo raro en su voz. Me miraba a mi y a los chicos alternadamente. Di dos pasos hacia ella, no muy seguro de lo que podia hacer. Freddy me miro, no sabria decir con que... creo que estaba bastante consternado con todo.

-¿Por que no me lo dijiste? -yo mismo me sorprendi al pronunciar esas palabras. Despues, con aun mas sorpresa, me di cuenta que todos habian reconocido a mi madre a pesar de todos los años que habian pasado.

-Jos... yo... nosotros... Jos, ven -camine hacia ella... pero a mitad del camino, me detuve, quedando entre Freddy y mi madre. Los mire a ambos.

-Todos. Bajen sus armas -me encontre diciendo. Ellos me miraron como si me hubiese vuelto loco, pero en realidad estaba bastante cuerdo.

-Jos, tal vez es tu madre pero... bueno, es tu madre -dijo Freddy, mirandome pero sin mover la posicion de su mano.

-Es del otro bando -murmuro Hayley, aunque notaba en su mirada que eso era solo lo que debia decir, pero tal vez no lo que creia. Tal vez todo estaba revuelto en su cabeza por la traicion de Jade.

-Yo solo quiero llevarme a mi hijo -sentencio claramente. La mire tratando de decir algo, pero eso era lo mas logico que habia escuchado. Negue levemente.

-Bajen sus armas -repeti, alze un poco los brazos-. Podemos arreglar esto sin que nadie le dispare a nadie.

-¿Solo quiere llevarse a Jos? ¿No quiere entregarnos a la policia, tambien? -pregunto Alessia. Mi madre nego rapidamente.

-Yo no tengo nada contra ustedes... se que todo esto fue idea de mi padre. Solo quiero a mi hijo -respondio-. Ustedes lo saben bien, el no pertenece aqui.

Esa era una verdad que no estaba dicha, pero estaba presente. Tal vez yo no pertenecia aqui, pero ya estaba involucrado en ciertas cosas. Ya lo sabia, y asi como yo estaba en la vida de Alonso, el estaba en la mia. Y esta era su vida.

-No voy a entregarlos. Solo dejenme llevarme a Jos -repitio mi madre al no recibir respuesta de ninguno. Mire a Freddy, quien parecia analizar cada cosa, cerro rapidamente los ojos y al abrirlos, suspiro.

-Bajen las armas -dijo al fin, todos lo miraron como si el tambien se hubiese vuelto loco.

-¿Que? Freddy, si ella nos entrega...

-No va a hacerlo -bajo su arma y se volvio a mirarlos-. Ella tendria que entregarse tambien.

Poco a poco, los 3 bajaron el arma, con la mirada no muy convencida pero siguiendo a Freddy. Mi madre tambien bajo la pistola, guardandosela en el pantalon de mezclilla negra. Me miro con algo... creo que todavia no sabia lo que era.

-Tienes que regresar conmigo Jos. Te explicare todo en casa, solo... tenemos que salir de aqui -me dijo. Los cuatro chicos me miraban, pero creo que en realidad estaban esperando a que Freddy dijera algo. Despues de todo, aqui el ahora era el lider. No dije nada, no encontraba nada para decir.

Secretos Letales //Jalonso Villalnela//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora