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Unos puntos antes de empezar:
* Solo lo digo por aclaración: Siempre, de ley, siempre cada 5 capítulos hay un capítulo narrado por Alonso ;)
* Este capítulo es uno de ellos y me han convencido de que sea un capítulo con smut el cual nunca he escrito así que me disculpo de antemano
Y... No, ya eso es todo :v

.

-Pero no pasará si tu no lo quieres.

Jos río un poco antes de besar castamente mis labios. Este chico me enloquecida pero quería asegurarme que estaba preparado para este paso.

-Alonso, solo quiero hacer esto con la persona que me ame tanto como yo a el. Tu encajas perfectamente ¿No? -me explico tomándome tiernamente la mejilla, sonreí antes de besarle toda la cara mientras me encargaba de decirle cuanto lo amaba. Y entonces, cuando el me beso tomándome por la nuca y yo comenze a meter las manos bajo su camisa, supe que en serio lo íbamos a hacer y no podía estar más feliz por eso.

La levante poco a poco, pero al llegar a la mitad de su cuerpo, Jos no resistio mas y se la quito el mismo. Solté una suave risa al ver lo desesperado que lo tenia.

-Todo a su tiempo -murmure con una sonrisita mientras acariciaba con sumo cuidado su abdomen. Mis manos se desplazaron hasta el principio de su pantalon, dandome cuenta que este era de estilo de espalda baja, dejando ver asi sus boxers rojos.

Acaricie con delicadeza el elastico de su ropa interior e incluso meti levemente los dedos alrededor de este. Jos gimió suavemente y no pude evitar hacer lo mismo.

Con la exitacion predominando en la habitacion, Jos cayo sobre su cama y me posicione sobre el sin dejar caer todo mi peso, sin lastimarlo. Comencé besando su cuello, dejando algunas marcas en el, despues baje hasta su clavicula, esparciendolos lentamente, desesperando a Jos.

Con una mano, desabroche con cuidado el boton de los jens de mi novio y comencé a bajarlo poco a poco. Con cada roze, Jos gemia un poco más y yo no podía sentirme mejor al ser la causa. Cuando por fin los jens terminaron en el suelo, lleve mi mano a los boxers de Jos, pase mis dedos con suavidad por el elastico para despues, comenzar a acariciar con delicadeza su miembro.

-¡A-ah! ¡N-ng!

No pudo evitar que un pequeño y ahogado grito saliera de los labios de Jos, reí y mis besos bajaron continuamente hasta su abdomen. Deje de masajear su pene para comenzar a bajar el boxer con lentitud.

-¿Q-que c-crees que ha-haces? -tartamudeo mi chico pelinegro con la cara completamente roja, levantandose hasta medio sentarse y tomandome de los hombros. El boxer iba a la mitad.

-¿Que es lo que crees que hago? -pregunte con cierta candencia en su voz y media sonrisa, la cual se contagio en los labios de Jos. Jalo de sus hombros hacia el y beso sus labios con efusividad antes de reir.

-Eres todo un tramposo, Villalpando -me dijo entre risas. Solté un gemido imprevisto cuando senti las frias manos de Jos acariciar mi abdomen y después bajo sus manos hasta mi pantalón.

-Oh Jos, demonios, tus besos -jadee, enredando mis dedos en los abundantes cabellos negros de mi novio, este apresuro el paso, desabrochandolo y tirando de él hacia abajo, le ayude con una suave risa y yo mismo me lo quite. Un gemido ahogado se escapo de mis labios al sentir las manos de Jos acariciar con lentitud mis piernas, soltando una risita. Sus caricias eran el mismo cielo.

-¡Ah, Canela! -gemi alto al sentir la mano de Jos acariciar con cuidado mi miembro sobre la tela de mi bóxer, estuvo a punto de meter la mano bajo el, pero lo detuve, tomando su mano y entrelazandola con la mía.

-Hey, hey, ¿A donde vas? - rei e inmediatamente me deshizo del boxer rojo de Jos. Por fin lo habia logrado. Lo recosté nuevamente, mi mano viajo al miembro erecto de mi novio, este solto un gemido agudo. Comenze subiendo y bajando la mano lentamente, Jos, gimiendo contra mis labios, era un paraiso completo para mi.

-Viene la mejor parte, cariño, no desesperes -dije con una sonrisa que hasta yo creí brillante. El chico pelinegro habia cerrado con fuerza los ojos y una sinfonia de gemidos salia de sus labios. Comencé a masturbarlo cada vez mas rapido con la intencion de que sintiera el mayor placer que pudiese darle.

Jos apreto los labios, intentando callar los suspiros, gemidos y jadeos que salian de sus labios, al darme cuenta, sin dejar de hacer mi trabajo con delicadeza, bese los labios de mi chico con una risita.

-Vamos, no te reprimas. Quiero escucharte decir mi nombre -murmure con voz calmada y divertida, masturbandolo cada vez mas rapido. Sus mejillas sonrosadas me encantaban. No paso mucho antes de que la habitacion se inundara de jadeos altos y mi nombre siendo tartamudeado por la exitacion.

-M-mas ra-rapido, ah ¡Alonso! -jadeo Jos con voz aguda antes de correrse totalmente. Solté su pene, me acerco a mi novio y comencé a repartir besos por todo su pecho, esperando que el pelinegro controlara su respiracion. Cuando por fin lo logro, bese sus labios delicadamente.

-Alonso, quiero que seas el primer chico con el que este y el único a partir de ahora -murmuró Jos antes de besarme suavemente.

-Lo prometo -susurre.

Solo eso basto, bese efusivamente los labios de mi novio, ambos nos perdimos asi un pequeño momento infinito.

Nos separamos lentamente, pase una mano cariñosamente por el cabello negro de mi chico.

-Puede que duela un poco... pero estara bien. Lo prometo -hable de manera tranquilizante, Jos asintio, creyendo estar preparado. Comencé a besar el cuello de mi novio, acariciando sus piernas y lentamente fue abriendo estas.

Y por fin, aline mi pene a la entrada Jos, introduciendome lentamente y con cuidado dentro de el. Varios jadeos salieron de los labios de ambos, unas cuantas notas de dolor eran de Jos. Bese su frente mientras trataba de tranquilizarlo, espere unos segundos hasta que Jos movió levemente la cadera. Y comence a embestir.

-A-alonso... ah... -gimio Jos, bese nuevamente sus labios, tranquilizandolo, pero me sorprendi al escuchar lo que salian de ellos-, A-alonso... si... n-no pares...

-N-no lo hare...

La habitacion se lleno de auténticos gemidos agudos de exitacion, las piernas de Jos se aferraron a mis caderas al igual que sus manos a mi espalda, dejando algunas alargadas marcas de rasguños, no me importó porque yo estaba perdido en el placer.

-¡Ah!... ¡Alonso! ¡Mmh! ¡V-voy a c-correrme! -jadeo Jos, las embestidas cada vez eran mas rapidas y fuertes, causando una mayor exitacion en ambos.

Y en un par de segundos, dos gemidos muy largos tuvieron lugar en la habitacion cuando llegamos al órgano juntos. Sali de el con cuidado, recostandome a su lado. Le sonreí y pase una mano por sus negros cabellos, acaricie su mejilla, recibiendo una radiante sonrisa.

-Vamos a estar juntos a partir de ahora. Prometelo -dijo Jos en tono bajo, acurrucadose a mi lado, tapandonos con una cobija de su cama. Le sonreí antes de besar su frente.

-Vamos a estar juntos y ahora si te juro que nada ni nadie nos separará.

-¿Puedes quedarte hasta que duerma? -pregunto Jos tiernamente

-Ese es mi plan para siempre.

Secretos Letales //Jalonso Villalnela//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora