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《Solo estan esperando el momento adecuado para apuñalarte por la espalda, y no es una frase en sentido figurado, exactamente》

Cameron... Si, lo conocia de poco, casi un mes pero el... el no es el tipo de persona que... quiero decir, no se ve como...

Y Adam, bueno, de hecho no he cruzado ninguna palabra con el. Pero Bryan si.

-¿Por que no deberia de confiar en ellos? -pregunte tartamudeando torpemente. La voz del otro lado suspiro ruidosamente antes de susurrar algo en otro idioma, me parecio aleman

-No puedo decir mucho, chico. Ellos no son lo que dicen ser, ni mucho menos tienen buenas intenciones contigo ni con tu familia. Todo es un timo, esta arreglado. No sigas preguntando, solo no confies en ellos.

¿Que queria decir con eso? ¿Por que? Si no son los que dicen ser ¿Que quieren?

-Oye ¿Sabes que esto suena irreal? Digo ¿Como me pides que confie en ti, si solo conosco tu voz? ¿Como me pides que desconfie en ellos, si los conosco (aunque sea un poco)?

Volvio a suspirar, seguramente arto de mi comportamiento.

-Mira, esta bien, ¿Quieres creerme? Voy a hacer algo que no deberia hacer. Mantente en la cocina, termina de cocinarte y en exactamente en 15 minutos iras a la puerta trasera que da a tu covertizo. Encontraras un sobre gris, dentro vas a ver 3 fotografias.
《Cameron te dira que no conoce al otro chico, sin embargo en la primera estan juntos.
En la segunda foto, vas a ver a Cameron vigilandote con tu amigo castaño en una cafeteria.
Y en la tercera foto, veras a Cameron hablando con tu padre.

Me quede sin habla. Las manos pararon de temblarme. No podia ser cierto.

-No es lo que crees. Escucha, nadie debe saber lo que sabes, ni tu familia ni nadie. Apartir de ahora comienzan los 15 min.

La comunicacion se corto dejandome en silencio con los ojos bien abiertos. "Demons" de Imagine Dragons volvio a sonar pero no era capaz de procesar ninguna palabra en ese momento. No podia describir el sentimiento que crecia dentro de mi, ademas de una confusion inmensa.

Cuando los 15 minutos se cumplieron, con el cuerpo y la mente dando tumbos, camine hasta la puerta trasera. No me pregunte como es que sabia sobre ella, si tenia todo lo que decia era obvio que sabia mucho mas que ese simple detalle.

Y cuando abri la puerta, el sobre de color gris descansaba en el piso. Tenia tanto miedo de abrirlo... No, tenia que armarme de valor. Me arrodille y lo abri.

Las manos no podian temblarme mas. Con una camisa negra, unos jens del mismo color bastante ajustados y un gorro cafe que cubria su pelirrojo cabello, haciendolo ver mucho mayor de lo que era, Cameron estaba hablando con el mismo chico que acompañaba a Bryan en el instituto. Estaban sentados frente a frente y se veian serios, a su alrededor solo se visualizaba el lugrube ambiente de algo que alguna vez fue una plaza, puesto que ahora todo se veia en un triste abandono, las paredes se veian roidas y grafiteadas tantas veces que era imposible leer cualquier grafitti que hubiera debajo.

La segunda fotografia mostraba a un Cameron igualmente vestido solamente con color negro, esta vez, gafas de sol cubrian sus verdes ojos. Estaba fuera del cafe donde Bryan y yo soliamos ir. Podria jurar que nos miraba a traves del cristal, a pesar de que la foto (como todas) se mostraba algo borrosa. Fueron tomadas a distancia, el no lo sabia.

Y la tercera fotografia (la mas desconcertante y la que me daba el golpe mas fuerte) se veia un poco mas borrosa, pero si los veia atentamente era posible entenderlo. La camisa negra fue sustituida por una blanca bajo un saco gris y unos pantalones de vestir del mismo color. Su cabello pelirrojo esta vez estaba peinado de lado, el aire de madurez estaba presente. Cameron, con una expresion seria, hablaba con mi padre. Los ventanales tan altos de su oficina opacaban un poco la imagen a causa del reflejo de la luz, por lo que tuve que deducir que mi padre tambien estaba serio, de hecho, percataba cierto miedo.

Si, Cameron no era la persona que decia ser. O almenos tenia bastantes secretos los cuales me ocultaba. Nunca dijo nada de conocer a mis padres, ni de buscarme despues del colegio. Y mi padre nunca me dijo nada, asi que podia sentirme herido por partida doble.

Volvi a meter las fotografias en el sobre pero despues no me movi de donde estaba. Me era imposible asimilarlo, aunque... ¿Que iba a asimilar? Si lo veia por el otro lado, aquel chico, Adam, podia conocer a Cameron de algun lado. La cafeteria del centro era demasiado grande y tambien reconocida, Cameron podia ir por su propia cuenta. Pero, el hecho de haber hablado con mi padre...

El timbre de mi celular sono, denuevo vi el "Desconocido" en la pantalla. Respondi y la misma voz de hace unos minutos resono de golpe.

-Regresa a la cocina y deja las fotografias donde estaban. -dijo cortante apenas respondi

-¿Que?

-¿Creias que iba a dejartelas? Lo siento niño, pero realmente nunca debiste verlas.

-¿Y como...?

-¡Basta de preguntas! -parecia arto de mi actitud, bueno, no todos los dias te dan cosas asi- Solo hazlo.

-Bien -respondi con un suspiro-. Pero antes quiero saber una unica cosa y confiare en ti.

La voz denuevo comenzo a murmurar cosas en un aleman perfecto. Las fotos me quemaban la piel atraves del sobre

-Intentare decirte algo que no te mate.

Eso no fue exactamente algo de mucha ayuda.

-¿Por que Cameron y Adam estan haciendo lo que sea que dices que hacen? ¿Y que se supone que hacen?

Recibi algo, un murmuro, nuevamente en aleman que me parecio, por como lo dijo, una blasfemia.

-Es mas complicado que solo soltartelo, Jos. No puedo decirtelo, solo no confies en ellos. Y no le digas a nadie lo que sabes, te pondria en gran riesgo.

Me quede callado, no tenia ni la menor idea de lo que hablaba y a que riesgo se referia.

-Jos, solo... Tu no eres el culpable. De hecho, tu no tienes nada que ver, eres una desafortunada pieza en medio de una guerra sin precedentes.

Y despues de una leve y seca despedida de su parte, la llamada se corto. Guarde las fotos en el sobre y nuevamente las deje donde estaban. No, no queria meterme en problemas porque aparentemente ya estaba liado en muchos mas que ni siquiera entendia.

Regrese a la cocina y me sente en la silla. Cameron no podia abandonar mi mente.

Podia ver sus ojos azules, invadidos por el resplandor de su sonrisa y al mismo tiempo miraba el contraste que hacia su rostro serio con su apariencia de alguien mayor a un chico de 16 años.

El otro chico estaba de mas, pero Cameron no... Cameron era Cameron Vazquez, el chico con el que disfrutaba estar en el Instituto, el chico que me arrancaba risas y me hacia pensar de mas, el chico que amaba ponerme a prueba, el chico que tanto...

¿Que estabas haciendo Cameron?

Escuchaba su suave risa y al mismo tiempo podia imaginar su voz seria al hablar con mi padre. Podia ver su torpeza cuando queria esconder las marcas en sus manos e igualmente podia ver su destreza al tenerme vigilado. Podia sentir su dedicacion para dejar a todo el mundo de lado cuando se encontraba conmigo, pero tambien podia ver como se enfocaba habilmente para buscar lo mismo con aquel chico.

Me levante de la silla, camine hacia arriba con la cabeza dandome martillazos por todas partes y entre a mi cuarto. Mire alrededor y me di cuenta de que todo estaba en orden.

Por primera vez, deje el panico que sentia oprimiendome el pecho, de lado, abri la ventana y me deje caer en la cama, tratando de acurrucarme en mi mismo. Cerre los ojos, escuchando todo y nada a la vez.

Con la humeda brisa recorriendome la espalda, escuche mi suave y apenas audible susurro de imprevisto:

-Cameron.

Secretos Letales //Jalonso Villalnela//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora