Capitulo: 24. -¿Se puede morir de felicidad?-

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Satisfacción: Un sentimiento único, y a decir verdad considero que él mejor que cualquier ser humano puede experimentar.

Puedes ser feliz pero aun así sentir que algo te falta, sin embargo cuando estas satisfecho significa que todo está completo, que nada falta, cada pieza encaja en su lugar, estar satisfechos es algo que no todo el mundo experimenta.

—Marinette. —En cuanto salí de mi casa Adrien estaba esperándome, me saludo con una sonrisa.

—Adrien. —Dije como una tonta enamorada.

Ya no tenía porque estar a la defensiva, finalmente podría expresarle todo lo que siento por él y viceversa. De una vez por todas nos amábamos mutuamente, a cada parte de nosotros, sin secretos, solo nuestro amor.

—Marinette...—susurro avergonzado cuando yo tome su mano mientras el color subía a su rostro.

Desde ayer volvimos a salir formalmente, creo que es nuestra tercera vez haciendo eso, trate de no sonreír ante ese pensamiento. Lo peor fue que en medio de nuestras declaraciones de amor la policía irrumpió buscando a Chat Blanc y no lo encontraron, ambos le dijimos que fuimos secuestrados por él y LadyBug junto con el verdadero Chat Noir nos salvaron... el problema estuvo cuando nos preguntaron ¿Y dónde está el civil que hacía de Chat Blanc?

— ¡Se escapo! —Contestamos al mismo tiempo.

Agradecí que no hicieran más preguntas y ese tipo de situaciones fueran de lo más normal en nuestra querida París.

Comenzamos a emprender nuestro camino a la escuela.

—Marinette, hoy... ¿Quieres ir a ver una película conmigo? —Miro directo a mis ojos, aun seguía algo sonrojado y se veía muy lindo.

—S-...—no termine de dar mi respuesta al recordar la fecha, ya había quedado con Nath. —Lo siento, Nathaniel me invito antes, hoy no ¡Mañana! ¡Mañana si! —Me apresure a decir lo último.

Por un segundo él pareció pensar eso seriamente, incluso frunció el seño, luego suspiro y negó con la cabeza.

— ¿No puedes cancelar? —Pregunto algo incomodo.

—No creo... le prometí que iríamos hace unos días y la función es hoy, sería muy descortés de mi parte. —Aparte la vista ya que él comenzaba a parecer un cachorrito deprimido, no podía dejar convencerme por una cara así.

—Entiendo...— ¡¿Por qué se ve tan lindo deprimido?! —Con una condición. —Apretó un poco mi mano.

Mire nuestras manos juntas, eso de ahora... ¿No fue algo posesivo? Al mirar su cara inocente sentí ganas de reírme de mi misma por pensar tal cosa de Adrien.

—Pero él también es Chat Noir.

Me recordó mi inconsciente, bueno... eso era verdad... aun así Chat nunca se había comportado de esa manera conmigo, debería dejar de imaginarme cosas.

—Creo que deberíamos tener una larga charla mañana. —Una vez más fui yo quien dio el primer paso.

Para decirnos todo lo que quedaba por decirnos, nuestros sentimientos finalmente mutuos nos ayudarían a soportar el dolor por el que esas "Cosas que decirnos" nos harían pasar.

— ¿Por qué no mejor esta noche? —Sugirió.

¿Esta noche? ¿Esta noche? ¿Por qué esta noche?

—Oh...—dije al recordar que debía hacer patrullaje con Chat Noir cosa que desde hace tiempo no hacía.

—Sí, "Oh". —Se burlo de mí.

La misma noche. #PBMinds2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora