"Miedo"
Pude definirse como la sensación de angustia provocada por la presencia próxima de un peligro real o imaginario. Cuando alguien siente miedo su corazón se acelera enviando adrenalina a los músculos los cuales se preparan para huir de ser necesario.
Pero Chat y yo no podíamos huir.
El enemigo que debíamos enfrentar era real, tan real como el hecho de que respirábamos, tan palpable como si su mano se posara sobre mi hombro, tan prominente que debíamos esquivarlo a medida que avanzamos en la ciudad para llegar al epicentro de todo.
Los bellos de mi nuca estaban erizados al igual que los de mis brazos, ¿Por qué Papillon estaba haciendo esto ahora? Repentinamente soltando tantos akumas y poniendo a todo París en estado de pánico junto con toda la destrucción que era provocada.
—Allí. —Señalo Chat el gran tumulto de mariposas que se extendían por la escuela causando casi una barrera.
— ¿La escuela? —La extrañes en mi voz se hizo presente.
— ¿Crees que Papillon esté dentro? —Se giro para encontrar mi minara.
—Espera lo inesperado. —Fue lo que le respondí con una sonrisa.
Y utilizando mi yo-yo pudimos pasar purificando unos cuantos akumas pero este brecha se abrió un par de segundos para después volver a cerrarse.
—Infiltración ¡Lista! —Chat me levanto el pulgar en aprobación.
—No comiences con tus juegos, concéntrate. —Lo reprendí y él me giño un ojo, estaba extremadamente entusiasta para todo lo que pasaba en nuestro alrededor.
—Finalmente. —Escuchamos una femenina voz—Llegaron.
—Si, estábamos esperándolos. —Ahora una masculina.
Y de las sombras salieron dos figuras... Volpina y Evillustrador.
— ¿Cómo es posible? —Se escapo ese susurro entre mis labios.
Chat miraba a ese par tan perplejo como yo, sus akumas fueron purificados hace tiempo entonces ¿Por qué estaban aquí?
— ¿No piensas que son una pareja bastante egoísta Evillustrador? —Pregunto Volpina.
—A decir verdad si, quien diría que Marinette y Adrien pudieran llegar a ser tan desalmados. —Le concedió.
Ellos... ellos saben nuestras identidades. Mire a Chat preocupada, pero el mantuvo su vista fija en los presentes enemigos mientras la posición de su espalda me hacía saber que estaba en alerta.
— ¡¿Quién les dijo nuestras identidades?! —Me atreví a preguntar.
— ¿Qué no es obvio? —Volpina se rio de mi—Fue Papillon, él hizo que abriéramos los ojos, y pensar que por tu culpa Adrien me rechazo dos veces y también jugaste con el corazón de Evillustrador dos veces, los dos son perfectos el uno para el otro, solo ahora puedo verlo. Claro que estarían aun más perfectos tres metros bajo tierra. —Agrego risueña.
—Es una pena Marinette— Evillustrador negó con la cabeza—Tu y yo pudimos haber sido muy felices juntos, ¿No te lo imaginas? Después de todo estuve a tu lado todo el tiempo siendo tu soporte y tú me pateas en cuanto ese idiota—señalo a Chat—Hace un acto aun más idiota para ganarte, al final no vales la pena.
—Marinette, ¿Te has fijado en algo importante? —Susurro Chat.
— ¿Qué cosa? —Pregunte alarmada.