Capítulo Treinta

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Trigésima separación.

Saliste de casa corriendo tan deprisa como tus piernas te permitían. ¿Por qué todo lo malo te pasaba a ti? Quisieras volver a tener tu vida normal, querías que volviera tu familia, lo darías todo por retroceder en el tiempo y recuperar antus padres, con la esperanza de borrar todos tus recuerdos junto a Jeff.

Saliste del barrio fantasma, así era como tú la llamabas, y te decidiste a rodear el bosque. Lo que fuera con tal de no volver a encontrarte con algo que quiera verte muerta. No volverías a perderte.

Seguiste un camino que te llevó directa a tu barrio. Corriste en dirección a tu casa y viste que estaba intacta y la cinta policial había sido retirada. Te tomaste unos segundos para recuperar el aliento, ya que habías estado corriendo desde que que saliste de la casa de Jeff.

Te pusiste de puntillas para alcanzar la llave de repuesto que siempre colocaban tus padres encima de la puerta. La cogiste y limpiaste un poco el polvo de ella para luego introducirla por la cerradura y, tras girarla un par de veces y empujar un poco la puerta, se abrió con un chirrido.

La casa estaba tal y como la viste por última vez, pero el sofá seguía con aquella mancha de sangre seca.

Subiste las escaleras y entraste en tu habitación. Estaba llena de polvo, pero no podías evitar sentirte como en casa con un poco de nostalgia. Las lágrimas no se habían detenido en ningún momento y empezaron a caer con más fuerza recordando todo por lo que habías tenido que pasar simplemente por querer estar al lado del asesino que te había dejado de lado por unas simples palabras de una mujer que había abandonado a alguien para correr hacia su platónico.

Apoyaste la espalda en el armario y te dejaste caer hasta quedarte sentada en el suelo. Le rogabas al mundo que detuviera este dolor. Te permitirse unos minutos para desahogarte y dejar salir todos los gritos y el dolor reprimido que habías ocultado todos esos días. Una vez que las lágrimas de habían detenido, te levantaste y empezaste a quitarle el polvo a la casa, ya que tenías previsto quedarte.

—Así que estabas aquí...— La voz de Liu te sobresaltó, pero no te diste la vuelta para mirarle —Entiendo que no quieras volver a casa.

Te quedaste en silencio escuchando a Liu, hasta que él se quedó en silencio, esperando a que dijeras algo.

—... Nina puede hacer lo que quiera, ya se lo dije a Jeff... —Sorviste tu nariz y te forzaste para no volver a llorar.

Liu se quedó en silencio. Era un tema bastante delicado y no quería meterse demasiado, para no herirte. Simplemente se acercó a ti y te abrazó por detrás. Tu simplemente te quedaste analizando lo que sucedía, hasta que te giraste y le correspondiste el abrazo.

—Encontraré la manera de abrirle los ojos a Jeff... Te lo prometo.

Liu consiguió tranquilizante, pero no animarte. Querías de vuelta a Jeff, querías que todo esto pasara lo más rápido posible y que se diera cuenta de su error, de que te estaba haciendo daño.

La noche cayó y Liu se despidió de ti con la promesa de volver mañana y contarte lo que sucedía a lo largo del día. Tu simplemente te despojaste de tu ropa y te dejaste caer sobre tu, ya limpia, cama y cerraste los ojos con la esperanza de dormir algo. No lo lograste, ya que a tu mente venía la conversación que habías tenido con Jeff en la mañana y la bofetada que le habías dado, además de la conversación con Nina. Te llenaste de ira, y fue eso lo que te privó del sueño. Fue una noche larga.D

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¡Hola! Espero que os esté gustando la historia ^-^

Quería agradeceros el hecho de que ya somos mil y pico lecturas :'D, no pensé que esta historia llegaría a esa cifra con todos los fanfics que hay de Jeff por Wattpad ヽ(°◇° )ノ

¡¡Gracias Maru-lectoras (y lectores si hay alguno por ahí ;3)

PD: Portada nueva :D

Bezooooooooz xD

Maru-nyan

Painted Smile (Jeff The Killer Y Tú)©»Terminada«Donde viven las historias. Descúbrelo ahora