El año final (SDLV #3)

20.- Remember

El camino a casa es silencioso. No sé si es porque no queremos hablar de lo que pasó o simplemente no queremos perturbar el silencio que nos ofrece la noche. Puede que un poco de ambas. 

De vez en cuando nos encontramos con alguna persona de la calle o algún borracho. Jake me dice que simplemente los ignore y nos dejarán tranquilos. Al final, es así y podemos llegar tranquilamente a casa sin ningún problema.

Mi teléfono ha sonado mil y veces y el de Jake mil veces más. Ninguno de los dos contesta. 

Mil cosas está pasando por mi cabeza. No sé si será por el alcohol, pero no puedo pensar con claridad. Lo único que se me aparece en mi cabeza por más que intente que no lo haga es que Jake está conmigo en vez de con Kelsey. El muy idiota no creo que entienda la magnitud de la decisión que acaba de tomar. Puede parecer que solo decidió acompañarme a mí en vez de a Kelsey, pero todos sabemos que significa mucho más que eso.

Jake me ha elegido a mí por sobre su novia. Eso es algo muy grande y si Kelsey tiene un poco de amor propio no se lo perdonaría a Jake. Yo por lo menos no se lo perdonaría jamás.

Saco las llaves para poder abrir la puerta. Jake se mantiene detrás de mí y no entiendo porque él sigue aquí. Llegué sana y salva a casa. Debería irse a la suya o irse de vuelta a la fiesta. No lo sé, pero no debería estar aquí. 

No lo quiero aquí.

Entro a casa y dejo las llaves en un canasto que tenemos en la entrada para guardar las llaves. A papá se le ocurrió esa idea cuando se le perdieron las llaves por décima vez. 

Camino hasta la cocina y me tomo un vaso de agua de un solo trago. Estoy bastante consciente de que Jake me sigue como si fuera mi propia sombra.

-¿Qué tan ebria estás?- pregunta con cautela y se sienta en una butaca que tenemos en la cocina.

-No lo suficiente- le digo y me siento frente a él- ¿Y tú?

-Igual- me dice- Aunque agradezco en este momento estar medianamente sobrio.

No entiendo a lo que se refiere, pero tampoco se lo pregunto. Jake y yo, como estamos frente a frente, no podemos evitar mirarnos directamente a los ojos. Sus ojos celestes me miran suplicantes. No sé lo que dirá mi mirada. 

¿Es posible que una mirada pueda mostrar confusión? Porque si es así, eso es lo que le estoy mostrando a Jake con nuestro juego de miradas. 

Jake cierra los ojos, como si le doliera mirarme. Estoy sintiendo el conflicto interno que está sufriendo este chico. 

-Emilie- dice Jake en un susurro que apenas escucho- Tenemos que hablar.

-No quiero hablar contigo, Jake.

-¿Por qué no?- pregunta y toma mis manos- Necesitamos hablar.

Niego con la cabeza. Con Jake hemos atrasado conversaciones por años y algo me dice que aquello que hemos callado por tanto tiempo está a punto de salir a la luz. 

No sé si estoy lista para tener esta conversación con Jake. Han pasado dos años y aun no me siento lista para esto.

-Emmie...

-¡Ya te dije que no quiero hablar, Jacob!- le grito y me levanto de mi asiento- Solo vete, Jake. Ve donde tu perfecta novia a arreglar tu perfecta relación y vive tu perfecta vida. Yo sobro en ese plan y tú lo sabes.

-Mi vida es de todo menos perfecta, Emilie- dice Jake al tiempo que se acerca a mí- Y no me importa que sea perfecta con tal de estar contigo.

-No digas eso, por favor- le digo y cierro los ojos de dolor.